14 julio 1990

El perdón se produjo a pesar del locutor deportivo era uno de los periodistas que más había atacado al Gobierno del PSOE

El Gobierno de Felipe González indulta a José Mª García (ANTENA 3 RADIO) para que no vaya a la cárcel por injuriar a José Luis Roca

Hechos

El 13.07.1990 se hizo público que el Gobierno del PSOE indultó a D. José María García parcialmente conmutando su pena de privación de libertad por una multa de 600.000 euros.

Lecturas

El Gobierno indultó ‘parcialmente’ a D. José María García para que no tuviera que ir a la cárcel. El locutor contestó al gobierno diciéndolo que ‘se lo agradecía parcialmente’.

14 Julio 1990

Indultos

Rosa Montero

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Vi por la tele la comparecencia ante el juez de José María García; se le veía la mar de pinturero y entró estrechando manos a diestro y siniestro cual torero de moda, porque el despliegue de fotógrafos era lo nunca visto y más que un trámite legal aquello era un guateque. Servidora no desea que a García le metan en el trullo, porque la cárcel es un sitio tremendo y me parece que por el mero hecho de hablar o de escribir nadie se merece semejante castigo; y para aquellos periodistas que se pasen de insultones y bocazas -que los hay- siempre existen las multas, por ejemplo. Total, que a ver si indultan al García de una vez y se acaba por fin esta verbena.Pero no era de él de quien quería hablar, sino de Fidel Vera. Ya saben, ese chico que hace ocho años, cuando tenía 19, robó 25.000 pesetas, y al que ahora acaban de encerrar con una condena de 14 años. Fidel no había vuelto a delinquir, ha formado una familia, tiene un hijo, un empleo. Posee informes favorables de todo el mundo, incluyendo el director de su empresa, el Tribunal Superior de Murcia y las personas a las que robó, que le han perdonado. Pero el Gobierno le ha negado el indulto. No hemos podido ver su comparecencia ante el juez: seguro que tuvo mucho menos rumbo y tronío que la de García. A Fidel, en cualquier caso, ya le han metido en ese pudridero que es la cárcel: si el sentido de la prisión es reformar, verdaderamente con este chico la han pifiado.Hay que hablar de Fidel, porque él no puede ir estrechando manos por doquier ni ocupar la primera página de los periódicos. De lo cual no es culpable García, que está en su derecho de intentar librarse de la trena por todos los medios, sino aquellos que a su alrededor montan el circo. Lo de Fidel, en fin, no tiene el glamour de la popularidad ni el bálsamo eficaz del corporativismo, pero es una barbaridad y una injusticia. Que le saquen. Que le indulten. Es urgente.

08 Junio 1990

García y la inseguridad jurídica

Ramón Pi

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EN este oficio del periodismo, como en todo, cada maestrillo tiene su librillo. El de José María García es archiconocido: verdades de a puño, agresividad punzante, combatividad suma. Así se ha convertido en el monstruo radiofónico que es en el periodismo deportivo, sin nadie que pueda hacerle sombra. Primero, García. Luego, «naide», y luego muchos otros, como dijo el torero sentencioso. Si yo hiciera periodismo deportivo no lo haría como él, del mismo mbdo que si él se dedicase al periodismo político, no lo practicaría como yo. Digo esto porque quiero que quede claro que el librillo de García y el mío son bien diferentes,lo que no impide que nos profesemos afecto recíproco desde hace años. Ahora el Tribunal Constitucional acaba de denegar el amparo que García pedía contra una sentencia de la Audiencia de Zaragoza que lo condenaba a dos meses y un día de arresto mayor por haber insultado a un jerarca deportivo que tenía además la condición de diputado regional. Esto significa que, al acumularse esta sanción con otra de igual duración por haberse metido hace tiempo con otro político que tenía responsabilidades en el deporte, García tendrá que ir a la cárcel si no media un indulto. Lo que denunció el periodista respecto del jerarca deportivo (cuyo nombre, desde luego, yo no voy a pronunciar, porque con este señor parece recomendable no ir ni a recoger una herencia) era, simplemente, la pura verdad. Pero la condena no viene por la veracidad o no de la información, sino por las expresiones «claramente ofensivas, innecesarias para la información que transmitía, e inútilmente vejatorias» dedicadas al prócer en cuestión. Estamos ante un asunto de formas más que de contenidos. Todo esto sería bueno saberlo, e incluso resultaría esclarecedor a la hora de que los periodistas supiéramos a qué atenernos, por más que nos doliese que tan relevante compañero tuviera que ir a la cárcel unos meses, porque significaría que ya existe un punto de referencia. Podríamos, y deberíamos, discutir si semejante criterio tiene que ver con la salvaguardia de la libertad de expresión, pero eso sería ya un asunto posterior. Pero resulta que esta denegación de amparo nos lleva a la confusión absoluta, porque hace muy pocas semanas fue absuelto el presidente de un club de fútbol que había puesto a parir a otro presidente de club, y aquella sentencia dejaba dicho que procedía la absolución ya que en él era cosa habitual lo que en cualquier otro podría tomarse por un delito de injurias y calumnias. El desconcierto es total: García no se ha comportado de manera diferente a como lo viene haciendo desde hace décadas. La inseguridad jurídica es para alarmarse en serio, ciertamente. Si alguien hubiera decidido dar un escarmiento a los periodistas que no dejan en paz a nuestros ejemplares políticos, no lo podría haber hecho mejor.

El Análisis

BUTANO, 'EL INDULTAO'

JF Lamata

El Gobierno de D. Felipe González aceptó evitar que D. José María García fuera a la cárcel – por la condena que había sufrido por insultar a D. José Luis Roca – a pesar de toda la leña que les había metido, en particular al ministro responsable de Deportes, D. Javier Solana. Aunque también les echó un capote en momentos críticos como el referendum de la OTAN.

Los enemigos del Sr. García y, en particular D. José Ramón de la Morena se referirían con frecuencia al Sr. García, despectivamente como ‘Butano, el indultao’. Sabiendo que para el Sr. García no era precisamente agradable deber algo a un Gobierno (y menos aún del PSOE). No obstante ese no sería último pleito, ni muchos menos que afrontaría el polémico periodista. Por esas mismas fechas se vería enfrascado en otro pleito con un colega, D. Pablo Sebastián. D. Ramón Mendoza o D. Florentino Pérez también le harían pasarse por los tribunales.

J. F. Lamata