El presidente del Real Madrid, Ramón Mendoza, nombra a Benito Floro nuevo entrenador reemplazando a Beenhakker

Benito Floro será entrenador del Real Madrid si Rafael Candel da ‘luz verde’ al asunto. Ello puede suceder dentro de un cuarto de hora. O nunca. Pero va a suceder. En cuanto el presidente del Albacete se reponga del disgusto de quedarse sin él.

Mendoza, sin embargo, tenía esta vez las ideas claras. Nada de italianos, nada de holandeses. Primero quiso fichar a Valdano. Se negó el presidente del Tenerife. Ahora su objetivo es Benito Floro. Rafael Candel, presidente del Albacete, va a decir que sí… con todo el dolor de su corazón. Benito Floro es su amigo.

Mendoza fue uno de los primeros presidentes en descubrir a Floro. Comenzaba a despuntar en el Albacete y ya tenía en su mesa un informe sobre él y sus métodos. De hecho, fue entrenador del Real Madrid durante unas horas la pasada temporada. Ramón Martínez, uno de sus avalistas, le tenía al otro lado del hilo telefónico mientras la directiva decidía si era él o eran Camacho y Di Stéfano los que se hacían cargo del equipo.

Tarde o temprano, pues, tenía que terminar en el Real Madrid. Pero no lo va a tener fácil. Ha ascendido mucho en poco tiempo y en este país te pasan factura por eso. Floro tiene detractores. Son esa legión de mediocres que prefieren perder siete partidos por uno a cero a un partido por 7-0.

El Real Madrid saldrá adelante con Floro si nadie interfiere en su trabajo. El milagro Albacete no sólo le corresponde a él. Lo comparte con Rafael Candel, un presidente que siempre ha estado a su lado, nunca en medio.

José Vicente Hernáez