Elecciones Asturias 1987 – Pedro de Silva mantiene la presidencia de la comunidad aunque sin mayoría absoluta por la irrupción del CDS

D. Pedro de Silva logró ser reelegido Presidente de Asturias aunque perdió un gran número de votos que se pasó a un emergente CDS que le quitó los suficientes como para hacerle perder la mayoría absoluta. El Sr. de Silva lograría ser reelegido presidente gracias a la abstención del CDS y de Izquierda Unida. Durante aquella legislatura se produjo un relevo en la cúpula del PSOE asturiano, que culminó en abril de 1988 con la retirada de D. Jesús Sanjurjo como Secretario General del PSOE asturiano, siendo reemplazado por D. Luis Martínez Noval. La federación asturiana del PSOE es la que más sufrió la crisis PSOE-UGT, por ser Asturias la región donde más fuerte es la UGT. De hecho en la nueva ejecutiva de abril de 1988 dominaría el peso de los hombres de D. José Ángel Fernández Villa, cabeza visible del sindicato de los obreros mineros asturianos (SOMA-UGT).

D. Isidro Fernández Rozada, presidente de Alianza Popular en Asturias, fue el candidato de este partido a la presidencia del Principado aunque no era un candidato especialmente popular, puesto que el auténtico ‘hombre fuerte’ de AP en Asturias seguía siendo D. Francisco Álvarez Cascos, en aquel momento diputado en el Congreso de Madrid por Oviedo, cuya sombra seguiría en la federación.

D. Alejandro Rebollo había sido uno de los primeros ex dirigentes de la UCD por integrarse al CDS del Duque de Suárez, de cuyo Gobierno había sido Director de RENFE. Con la originalidad que mientras que el curriculum del Sr. Suárez había grandes trabajos al servicio de la dictadura franquista, el Sr. Rebollo podía presumir de haber sido abogado defensor del comunista Julián Grimau, asesinado por el franquismo en los años sesenta acusado a su vez de asesinatos durante la Guerra Civil. El Sr. Rebollo logró buenos resultados, aunque quedó por detrás de PSOE y AP. El Sr. Rebollo dejaría al poco tiempo la política regional asturiana para acupar cargos en el Grupo parlamentario del CDS en Madrid en la legislatura 1989-1993.

Los comunistas asturianos no lograban levantar cabeza, la alianza del PCE con otros grupúsculos de la izquierda (PASOC, FP, Izquierda Republicana y PCPE, ninguno con especial presencia en asturias) para formar Izquierda Unida, no se tradujo en más escaños, sino en menos. Uno menos. Eso sí, la caída de votos del PSOE le permitía jugar un poco a ser ‘la llave’, junto con el CDS. Aunque una coalición AP-CDS-IU era inviable, si podía bloquear leyes del Sr. de Silva, que estaría obligado a pactos puntuales para gobernar.