12 febrero 1977

La operación policial estuvo coordinada por el 'Súper Comisario' Conesa

La Policía logra liberar tanto a Antonio María de Oriol como al Teniente General Villaescusa, de las garras del GRAPO

Hechos

El 11.02.1977 la Policía Nacional anunció la liberación de los secuestrados D. Antonio María de Oriol y General Villaescusa y la captura de los secuestradores, militantes del GRAPO.

Lecturas

El 12 de febrero de 1977 tras una redada exitosa son liberados de su secuestro a manos de los terroristas de los GRAPO, D. Antonio María de Oriol Urquijo y el teniente general D. Emilio Villaescusa Quilis,

En la redada son detenidos importantes miembros de los GRAPO como D. Enrique Cerdán Calixto, D. Fernando Silva Sande, D. Abelardo Collazo Araujo, D. Olegario Sánchez Corrales, D. Manuel Casimiro Gil Araujo y D. Juan José Díaz Fernández, los principales responsables del secuestro.

EL ‘SÚPER COMISARIO CONESA’ Y ‘BILLY EL NIÑO’ SALVARON A ORIOL Y VILLAESCUSA

conesaAntonioOriol El ‘Súper Comisario’ D. Roberto Conesa, jefe de la Brigada de Información, dirigió la operación policial por la cual fueron liberados los Sres. Oriol y Villaescusa. Uno de los agentes que participó en su operación fue su hombre de confianza Juan Antonio González Pachecho, ‘Billy el Niño’. Tanto el Sr. Conesa como el Sr. González Paheco estaban acusados de haber cometido torturas durante la dictadura, pero con la liberación de Oriol y Villaescusa han realizado una gran labor para salvar la Transición a la democracia.

DETENIDO EL ‘CEREBRO’ DEL SECUESTRO: EL DIRIGENTE DEL GRAPO ABELARDO COLLAZO

collazo_sanchez_corrales_gil_araujo Abelardo Collazo Araujo, Olegario Sánchez Corrales y Manuel Casimiro Gil Araujo, detenidos en la operación liberación junto a José Juan Díaz Fernández.

Abelardo Collazo Araujo, dirigente de los Grupos Revolucionarios Antifascistas Primero de Octubre (GRAPO) fue señalado por la Policía como el ‘cerebro’ de la ‘Operación Cromo’ por la que fueron secuestrados el Sr. Oriol y el General Villaescusa

CONDENAS POR EL SECUESTRO (Del Sr. Villaescusa, puesto que, por fecha, el del Sr. Oriol entró en la amnistía)

Fernando Silva Sande (cerebro y autor)– 11 años de prisión

Abelardo Collazo (autor)    9 años de prisión

Enrique Cerdán  (autor) – 9 años de prisión

Olegario Sánchez (autor) – 9 años de prisión

Fernando Hierro (autor) –  9 años de prisión

¿CONESA LOGRÓ LA OPERACIÓN GRACIAS AL ‘SOPLO’ DEL TERRORISTA CERDÁN?

La revista comunista LA CALLE publicó en 1979 que la brillante liberación se produjo gracias a que el comisario Conesa, jefe de la Brigada Operativa, logró arrestar en secreto al GRAPO Enrique Cerdán Calixto. Durante el interrogatorio Conesa le promete que  «Nadie le volverá a tocar más a cambio de que Cerdán proporcione la dirección exacta del piso donde está Oriol». El pacto de Conesa y Cerdán tendría las mejores garantías de no salir a la luz. Por parte de la brigada hay el interés de obtener la imagen de grupo infalible y por parte de los GRAPO, se trata de impedir que la gente piense que sus militantes ha tenido momentos de debilidad.»

12 Febrero 1976

No todo ha terminado

EL PAÍS (Director: Juan Luis Cebrián)

Leer

La liberación del señor Oriol y del general Villaescusa no pone punto final a las interrogantes que los españoles han venido haciéndose estos días sobre el origen de la campaña terrorista desatada en nuestro país. Con ser una brillante operación policial, que contribuirá a devolver a los ciudadanos la confianza, harto deteriorada, en los servicios de seguridad del Estado, muchas dudas quedan por aclarar en este asunto. Y quedan pendientes de explicación los temas del asesinato de Arturo Ruiz y la matanza de abogados en la calle de Atocha.Este periódico ha vivido muy tensas jornadas en los dos últimos meses junto a la familia del presidente del Consejo de Estado. Es quizá esta la hora de decir que, elegidos por los GRAPO como medio de depositar sus mensajes, junto con el diario INFORMACIONES, redactores de EL PAIS han padecido numerosos riesgos físicos en esta misión y también afrentas morales hasta por parte de personas que presumen de tener la dignidad por oficio.

Ahora tenemos más fuerza moral para protestar por la detención -a punta de pistola- de nuestros redactores que acudieron a recoger una de las notas de los GRAPO, el registro increíble del domicilio de nuestro director, o las alusiones ofensivas vertidas contra nuestro colega INFORMACIONES y contra nosotros mismos.

No vamos a regatear elogios a los policías que han tomado parte en la operación. Vamos a decir también claramente que este hecho fortalece la figura más debilitada del Gobierno, la del ministro de la Gobernación, cuyos esfuerzo y dedicación por resolver el problema hemos podido conocer muy directamente. Como los del gobernador civil de Madrid, empeñado desde hace meses, en una remodelación efectiva de las fuerzas policiales y en la instauración de un concepto de «orden público» acorde con las necesidades de la democracia. Y vamos a felicitar, calurosa y efusivamente a los familiares de los dos secuestrados.

Pero, después, vamos a seguir preguntando por la verdad profunda de todo este embrollo. La alegría de la liberación de las víctimas y la detención de gran parte de los secuestradores no debe ocultar la gravedad política de los recientes acontecimientos. Y es preciso aclarar ante el pueblo español todos y cada uno de los pasos de este proceso: si hubo conspiración, quién la organizó y para qué.

Evidentemente no todo ha terminado, sino que comienza una nueva historia. Oriol ni Villaescusa han sido liberados el día en que los partidos políticos acuden en tromba a legalizarse para concurrir a las elecciones; el mismo en que regresa de Italia el Rey de España, ensanchando los horizontes europeos de nuestra política. Las cosas van deprisa ahora en nuestra tierra y la libertad de los secuestrados nos parece el símbolo de la libertad de todos. Atrás quedan nueve cadáveres, los cadáveres de nueve españoles de bien, abogados, trabajadores, servidores del orden público, acribillados a balazos, como tantas veces se ha dicho, por los enemigos de la democracia. Delante, un inmenso proyecto político de convivencia y reconciliación, una amnistía necesaria, unas elecciones en libertad. Y seguir barriendo esa basura que queda y que algunos se empeñan en no ver todavía. Pues la posibilidad de una democracia efectiva en España depende de que se descubran y hagan, públicos los autores y cómplices de todo este increíble plan.