10 octubre 2008

Los dos diputados en el Congreso se dividen: Santiago Cervera abandona UPN y se queda en el Grupo Popular, Carlos Salvador abandona el Grupo Popular y se queda en UPN

Ruptura total entre UPN y PP tras 17 años juntos por la decisión de los navarristas de no oponerse a Zapatero: nace el ‘PP de Navarra’

Hechos

  • El 10.10.2008 el consejo político de UPN votó por el 91% respaldar la decisión de D. Miguel Sanz de no votar en contra de los presupuestos del Gobierno Zapatero. El 7.11.2008 se presentaba el PP-Populares de Navarra como nuevo referente del Partido Popular en esa comunidad.

Lecturas

En 1991 el Partido Popular se disolvió en Navarra y convirtió a Unión del Pueblo Navarro (UPN) en su referente en la comunidad foral. Los diputados de UPN, elegidos en elecciones generales se integraban en el grupo parlamentario del PP. En la actualidad UPN cuenta con dos diputados en el Congreso, D. Santiago Cervera Soto y D. Carlos Salvador Armendáriz.

El 10 de octubre de 2008, a pesar de que la orden del presidente del PP nacional, D. Mariano Rajoy Brey, es votar ‘NO’ a los presupuestos de D. José Luis Rodríguez Zapatero, la dirección de UPN ordena a sus dos diputados votar ‘Abstención’, evidenciando un acuerdo entre el Gobierno del PSOE y la comunidad de Navarra que preside D. Miguel Sanz Sesma (presidente de UPN).

El diputado D. Carlos Salvador Armendáriz obedece la indicación de UPN, pero no D. Santiago Cervera Soto, por lo que el 27 de octubre es expulsado del partido.

El 7 de noviembre de 2008 se consuma la ruptura definitiva con la creación del Partido Popular de Navarra, que aparece presidido por D. José Ignacio Palacios y con D. Santiago Cervera como aparente líder y nuevo referente del PP en la comunidad foral.

LOS PRINCIPALES LÍDERES DEL NUEVO PP NAVARRO

palacios_pp_navarro D. José Ignacio Palacios fue el encargado de presentar el 7.11.2008 el nuevo Partido Popular de Navarra, abandonando así su militancia en UPN. Asumió la presidencia de la gestora que dirigió el PP estrenado en aquella localidad.

jaime_ignacio_burgo_viejo D. Jaime Ignacio del Burgo era oficialmente el representante de UPN en la Ejecutiva Nacional del PP, en la práctica nunca había sido un hombre de UPN, por lo que no sorprendió que se alineara con el PP navarro.

santiago_cervera D. Santiago Cervera, uno de los dos diputados de UPN en el Grupo parlamentario del PP anunció que optaba por quedarse en el PP, mientras que el otro diputado, D. Carlos Salvador, abandonaba el grupo parlamentario y se pasaba al mixto fiel a UPN.

EL PROGRAMA ‘ESTAS NO SON LAS NOTICIAS’ (GLOBOMEDIA) DE CUATRO TRATÓ LA RUPTURA:

El programa ‘Estas No Son Las Noticias’ que Quequé y Dña. Nuria Roca que la productora Globomedia hacía para el canal CUATRO.

11 Octubre 2008

Miguel Sanz consuma su traición

EL MUNDO (Director: Pedro J. Ramírez)

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El Comité Ejecutivo y el Consejo Político de UPN ratificaron ayer la consigna de que sus dos diputados se abstengan cuando el Grupo Popular al que pertenecen, presente su enmienda de devolución a los Presupuestos del Estado. La decisión fue aprobada en el Comité Ejecutivo con un solo voto en contra. En la posterior reunión del Consejo Político se sopesaron las consecuencias que la ruptura de la disciplina de voto de los dos diputados de UPN tendrá para el futuro de la formación, ya que supone abandonar el pacto con el PP. Algunos de sus miembros alertaron sobre el riesgo que asume UPN, al quedar supeditada a la estrategia del PSOE en Navarra; pero pese a ello también se aprobó mayoritariamente la tesis de Sanz.

De nada ha servido la buena voluntad de Mariano Rajoy, que ha intentado infructuosamente en las últimas semanas evitar esta ruptura, la última vez durante un almuerzo con el presidente navarro el pasado jueves. El líder del PP ha ofrecido diversas soluciones a Sanz, pero éste ha optado por romper la baraja. Lo cual viene a confirmar definitivamente que el presidente navarro tenía la decisión inequívoca de separarse del PP, en cumplimiento de los acuerdos a los que llegó con el vicesecretario del PSOE. El propio José Blanco confirmó la existencia de este pacto, al exigir públicamente su cumplimiento al presidente navarro.

De esta forma, Miguel Sanz no sólo ha hecho trizas el pacto con el PP, sino que ha traicionado la confianza que debe existir entre dos socios, puesto que ocultó el contenido de sus negociaciones con el PSOE. Además, el presidente navarro ha llegado a confesar que aunque los Presupuestos no son buenos, UPN tiene que abstenerse. Todo un alarde de felonía política y egoísmo personal. Como no podía ser de otra manera, teniendo en cuenta la magnitud del órdago, Rajoy ha anunciado que el PP considerará roto el acuerdo entre ambas formaciones, si los dos diputados de UPN rompen la disciplina de voto. El divorcio no será firme hasta el día en el que se produzca la indisciplina, pero la dirección popular tiene mucho trabajo por delante. El PP desapareció en Navarra en favor de UPN y ahora debe poner en marcha una estrategia para recuperar el terreno que cedió y presentarse a las próximas elecciones con sus propias siglas.

13 Octubre 2008

Lo sensato en Navarra

EL PAÍS (Director: Javier Moreno)

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Lo que se juega no son los Presupuestos, sino el giro de Miguel Sanz para favorecer el consenso

El Consejo Político de la Unión del Pueblo Navarro (UPN), partido que desde hace 17 años asume la representación del PP en ese territorio, aprobó el viernes casi por unanimidad la propuesta de su líder y presidente autonómico, Miguel Sanz, de abstenerse en la votación de los Presupuestos Generales de 2009. Aunque la decisión ha sido calificada de «extremadamente grave» por el PP, Rajoy se ha dado un plazo antes de considerar definitivamente rota su alianza con UPN.

Se comprende que lo haga: un acuerdo entre UPN y los socialistas navarros (PSN) es «lo sensato, lógico, decente y normal, lo que quiere la mayoría», había declarado el líder del PP tras las elecciones autonómicas de 2007. Por entonces, ese acuerdo era la única alternativa viable frente a la de un Gobierno del PSN en alianza con IU y Nafarroa Bai.

El PSN era en principio partidario de intentar esta segunda fórmula, pero la dirección del PSOE la vetó con el argumento de que asociarse con una formación que, por ejemplo, apoyaba el plan Ibarretxe podría costarles muy caro en Navarra (y en toda España, en las elecciones generales). La decisión costó al PSN una grave crisis, aunque a posteriori la mayoría reconoció que había sido acertada. Entre otras cosas, porque el acuerdo (sin participación directa en el Gobierno de Sanz) favoreció al abandono por parte de éste del radicalismo tremendista que había polarizado la política navarra durante la legislatura anterior.

Se desconoce si entre las condiciones socialistas para permitir gobernar a Sanz, y que lograse aprobar sus presupuestos regionales, figuraba la abstención de sus dos diputados en el Congreso; pero si así fuera sería un acuerdo lógico. Lo ilógico es considerar vital que Navarra sea gobernada por la mayoría contraria a la integración en Euskadi y no hacer nada para favorecer el entendimiento entre UPN y los socialistas. Además, ningún partido ha alcanzado nunca la mayoría absoluta en Navarra.

Con el actual sistema de investidura, difícilmente podrá gobernar UPN sin la aquiescencia del PSN. Así lo ha entendido Sanz al dar a su partido un giro hacia la moderación que favorezca ese entendimiento. Lo cual es, a su vez, condición para que los socialistas puedan un día volver a gobernar en Navarra sin pactos arriesgados. Esto es lo que está en juego, y no los Presupuestos Generales, cuya aprobación no depende de esas dos abstenciones.

29 Octubre 2008

Divorcio a la navarra

EL PAÍS (Director: Javier Moreno)

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Sanz aprovecha la falta de flexibilidad del PP para modificar a su favor el pacto de la derecha

La Unión del Pueblo Navarro (UPN) y el Partido Popular (PP), unidos desde hace 17 años por un pacto de mutua conveniencia, se divorciaron ayer tras unos días de separación que sirvieron para que cada parte intentara hacer asumir a la otra la responsabilidad de la ruptura. El punto crítico se produjo el lunes, cuando la dirección del partido navarrista suspendió cautelarmente de militancia al diputado Santiago Cervera, que votó por la devolución del proyecto de Presupuestos del Gobierno de Zapatero, y al ex diputado Del Burgo, que apoyó esa actitud en contra de la consigna de abstención decidida días atrás por los órganos de UPN.

El pacto de conveniencia funcionó hasta que entraron en contradicción sus dos principios esenciales: respeto a la autonomía de decisión de UPN en la política navarra y coordinación con el PP en los asuntos de interés general. En función de lo primero, UPN había alcanzado un acuerdo por el que los socialistas permitían gobernar a Miguel Sanz en Navarra pese a no tener mayoría absoluta. En función de lo segundo, el PP exigía el voto de los dos diputados de UPN contra los Presupuestos.

La abstención de los socialistas navarros hizo posible la investidura del candidato de UPN, Miguel Sanz. Esa abstención fue impuesta a su vez por la dirección central del PSOE, que veía muy arriesgada la alternativa en principio decidida por el PSN de gobernar en alianza con los nacionalistas de Nafarroa Bai. Riesgo agravado por el hecho de que este partido tenía más votos que el PSN, lo que le colocaba en una situación de gran debilidad.

La dirección del PP que había reclamado un entendimiento como el que efectivamente se produjo, parece no haber entendido que ello implicaba una cierta política de no beligerancia con los socialistas. La abstención en los Presupuestos era un gesto político de alcance limitado pero de cierto valor simbólico para favorecer la continuidad del acuerdo; más concretamente, para no dar pretexto a una eventual moción de censura contra Sanz. El presidente navarro tiene presente seguramente situaciones como la de Galicia, con un partido (el PP) próximo a la mayoría absoluta pero condenado a la oposición por falta de aliados.

En Génova ha faltado flexibilidad para entender el dilema de Sanz, mientras que el presidente navarro, con un apoyo amplio de sus seguidores, ha dado la impresión de no ver del todo mal la oportunidad de marcar distancias con el PP. Más concretamente, de querer aprovechar la situación para modificar los términos del acuerdo con ese partido, reforzando su autonomía. Ocasión para ello ofrecía el Congreso de UPN previsto para marzo. Pero las cosas se han precipitado con las sanciones a Cervera y Del Burgo, y el PP ya ha anunciado que reconstruirá las estructuras del partido en la comunidad foral, con lo que la derecha navarra vuelve a estar dividida, como hace años, en tres formaciones: UPN, su escisión (CDN) y PP.