23 septiembre 1953

D. Emilio Romero despedido como director del diario PUEBLO por firmar un manifiesto de apoyo al director del periódico de Prensa Española

Torcuato Luca de Tena destituido como director de ABC por publicar que Beria, jefe de la policía secreta stalinista, estaba en España

Hechos

  • El 23 de septiembre de 1953 el director del diario ABC, D. Torcuato Luca de Tena y Brunet fue despedido después de publicar un reportaje sobre el ex jefe de la policía secreta de la URSS, Sr. Beria. Igualmente fue despedido el director de PUEBLO, D. Emilio Romero por respaldarle.

Lecturas

El Director del periódico privado ABC, D. Torcuato Luca de Tena Brunet, y el Director del periódico público Pueblo, D. Emilio Romero Gómez, son destituidos por la Dirección General de Prensa de D. Juan Aparicio López y el ministerio de Información de D. Gabriel Arias-Salgado Cubas. El primero por publicar un reportaje-rumor sobre la posible presencia en España del ex jefe de la policía secreta de la Unión Soviética, Sr. Laurent Beria, y el segundo por solidarizarse con el primero. D. Luis Calvo Andaluz asume la dirección de ABC y D. Manuel Pombo Angulo la de Pueblo.

Nada más producirse la muerte del dictador de la Unión Soviética, Stalin, el periódico  ARRIBA advirtió la posibilidad de que Laurenty Beria, el jefe de la policía secreta soviética, fuere detenido. Y, en efecto, Beria fue destituido, expulsado del PCUS y procesado por traidor a la URSS a los cuatro meses de morir Stalin.

El ABC da amplia repercusión a la caída de Beria dedicándole primera página. La familia Luca de Tena había recuperado el control del diario y su empresa editora, Prensa Española, con el nombramiento de don Torcuato Luca de Tena y Brunet como director en octubre de 1952. Ante la caída de Beria la redacción del ABC se pregunta porque el ‘traidor’ no ha sido asesinado. ¿Acaso se había fugado del país? ¿A dónde había ido entonces el ex temible Beria? Comienza entonces un exhaustivo trabajo de periodismo de investigación muy poco usual hasta entonces para encontrar el paradero del desaparecido y que culmina con la publicación del 23 de septiembre de 1953 de un reportaje en ABC autorizado por D. Torcuato Luca de Tena que afirma que Beria está ni más ni menos que en la Costa del Sol de España.

Lavrenti Beria (…) se encuentra escondido en España. (…) El hecho de que Beria escogiera la península ibérica y, dentro de ella, concretamente España, se debe a dos motivos fundamentales: Primero, ser este el único  país del mundo en que la organización del partido comunista es prácticamente inexistente. Segundo, porque quienes le han conducido hasta el país han sido pilotos que, por haber intervenido en la guerra civil española son conocedores de la geografía. (ABC, 23-9-1953)

La teoría del periódico del señor Luca de Tena y Brunet molestó profundamente al gobierno del general Franco. Para empezar el subtitulo –  “¿Ha concedido ya el Gobierno  español  la autorización necesaria para su salida?” – era algo impertinente, pero sobretodo le molestaría porque el hecho de que se hablara de criminales comunistas en tierra española no daba la imagen del país deseada por el general. El supuesto paso de Beria por España nunca se confirmaría, pues Beria sería ejecutado en la URSS en diciembre de 1953 sin la menor prueba de que hubiera pasado por nuestro país. El Gobierno, a través del Delegado de Prensa, don Juan Aparicio, ordenó la inmediata destitución de don Torcuato Luca de Tena y Brunet como director del ABC el mismo día en que salió el artículo. Un gran número de escritores desde Azorín hasta el señor Pemán enviaron una carta al general para que reconsiderara aquel cese.

JuanAparicio TorcuatoLuca D. Juan Aparicio, Director de la Prensa del franquismo en 1953, fue el responsable del despido de D. Torcuato Luca de Tena y Brunet como director de ABC en 1953.

En su libro ‘Franco sí, pero…’, D. Torcuato Luca de Tena y Brunet da la siguiente descripción de aquel episodio:

Lo que en Estados Unidos hubiese supuesto un premio Pulitzer y en cualquier otro lugar del mundo libre un éxito periodístico sonado, en la España de Gabriel Arias y Juan Aparicio significó la destitución del director del periódico. Juan Aparicio, más listo que el hambre y más malo que un día sin pan. Yo estaba entre aquella espada, Juan Aparicio, y esta pared, Arias Salgado [ministro de Información y Turismo].

D. Torcuato Luca de Tena y Brunet, en “Franco sí, pero…”

Aquella crisis alcanzó al diario vespertino PUEBLO, El director de ese periódico, don Emilio Romero, firmó el pliego de solidaridad. Don Juan José Pradera, director del YA (cuyo padre había sido asesinado durante la guerra civil) llamó personalmente al Sr. Romero para recomendarle que retirara su firma, este se negó y el Gobierno procedió a su destitución. La figura del Sr. Romero está llena de controversias, pues tenía gestos de independencia del régimen, pero también otros de franquismo fervoroso.

emilioRomero002praderaD. Emilio Romero fue despedido como director de PUEBLO tras negarse a aceptar la petición de D. Juan José Pradera (YA) de que retirara su firma de la carta de apoyo a D. Torcuato Luca de Tena.

Contactado por HEMEROTECADELBUITRE, don Jesús de la Serna, subdirector de PUEBLO comentó al respecto de D. Emilio Romero: “Conozco muy bien sus defectos, pero era un periodista excepcional y a mí me dio absoluta libertad”.

SUSTITUCIONES

LuisCalvo D. Luis Calvo Andaluz, nuevo director del diario ABC

Tras la destituciones de D. Torcuato Luca de Tena y Brunet como director de ABC y de D. Emilio Romero Gómez como director del diario PUEBLO, llevó a la Dirección de la Prensa a nombrar nuevos directores para ambos periódicos. En el ABC se aceptó la propuesta del Consejo de Prensa Española de designar a D. Luis Calvo Andaluz, nuevo director del periódico. Y en el periódico PUEBLO a propuesta de la Organización Sindical fue nombrado director el Sr. Pombo Angulo.

El Sr. Calvo Andaluz, descubridor de los plagios de Dña. Julia Maura y en cuyo curriculum figuraba haber sido acusado de espía nazi durante la Segunda Guerra Mundial, resultaría ser un director de periódico de talante aperturista según recuerdan muchos de los periodistas que trabajaron para él con los que contacto LA HEMEROTECADELBUITRE.

Los dos directores de periódicos cesados serían restituidos: primero D. Emilio Romero en PUEBLO por parte del ministro franquista Sr. Arrese y luego D. Torcuato Luca de Tena por parte del ministro franquista Sr. Fraga. Ambos periodistas mostraban que eran rechazados por una parte del franquismo, pero tenían igualmente el apoyo de otros dirigentes franquistas.

23 Septiembre 1953

¿ESTÁ BERIA ESCONDIDO EN ESPAÑA?

ABC (Director: Torcuato Luca de Tena Brunet)

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Se dice que pilotos que tomaron parte en nuestra guerra lo trajeron hasta el centro de la Mancha.

En el momento de cerrar estás páginas, y por un conducto que la más elemental prudencia nos obliga, hoy por hoy, a silenciar, nos llega una información de cuya veracidad no puede este periódico responder, pero que siendo, en cierto modo, verosímil, creemos interesante su publicación, bien que anticipando las máximas reservas respecto a su contenido.

Dice así:

Agentes del FBI con carta credenciales del vicepresidente de los Estados Unidos y de la Subcomisión del Senado que preside Mc Carthy, han llegado a la Península con la misión de entrevistarse con Lavrenti Beria, que se encuentra escondido en España; certificar su personalidad, protegerle de sus posibles enemigos y facilitarle el traslado desde el escondite en que se encuentra hasta los Estados Unidos. El director del periódico de California “San Diego Unión”, que fue el primero en dar la primicia de esta noticia sensacional, conocía el paradero del prohombre soviético, a pesar de no haberse dado a conocer en la información de su periódico desde hace muchos días. Las gestiones para conseguir el derecho de asilo se han realizado directamente a través de terceras personas, entre el presidente y vicepresidente de los Estados Unidos, de una parte, y de la otra, miembros del Partido Comunista, fieles a Beria y residentes en Centroamérica. Por expresa condición de este se ha excluido de las negociaciones a cualquier miembro del Senado, de las subcomisiones senatoriales y del propio Departamento de Estado, ya que, según afirma el fugitivo, en todos estos Departamentos existen hombres con los que él, como jefe de la Policía y de los movimientos subversivos comunistas en el exterior, mantenía contacto desde antaño. Tal como ha publicado la Prensa, ha prometido a cambio del derecho de asilo, facilitar toda la información de los hombres, que, incrustados en las oficinas del Estado y en los puestos de mayores responsabilidades político de los países de Europa y América, servían secretamente los fines de la política exterior soviética. De aquí la extraordinaria importancia que para los Estados Unidos tenía el facilitar la salida de Beria desde su escondite, protegiendo durante el traslado su vida, en evidente peligro, pues los agentes fieles a Malenkov tienen orden de hacer lo imposible por evitarlo. EL hecho de que Beria escogerá la península ibérica y, dentro de ella, concretamente, España, se debe a dos motivos fundamentales: Primero, ser éste el único país del mundo en que la organización del Partido Comunsita es prácticamente inexistente.

En efecto, en cualquier otro país de fuera del telón de acero, hubieran sido muchos los enemigos que en pleno ejercicio de su libertad de acción hubieran podido atentar contra él. Segundo, porque quienes le han conducido hasta el país  han sido pilotos que, por haber intervenido en la guerra civil españoles, son perfectos conocedores de la geografía peninsular. El medio de que se ha valido Beria para llegar a España constituye una verdadera novela de aventuras. Parece ser que se dejaron caer de noche todos los tripulantes del avión que le transportaba en el centro de La Mancha, escogiendo los puntos que teniendo próximas comunicaciones por carretera, estuvieran sin embargo menos próximos a núcleos habitados. El avión con los mandos fijos y con la gasolina perfectamente calculada, prosiguió solo su camino hasta sumergrirse en las aguas del Atlántico no dejando así huella ninguna de su paso. Desde allí, ypor medio de un automóvil que les esperaba, la comitiva de fugitivo continuó el viaje hacia un punto determinado de la costa española, donde Beria ha permanecido, y quizá permanezca aún, escondido en espera de que el Gobierno de los Estados Unidos concediera el solicitado derecho de asilo y este realizara las oportunas gestiones para llevarse su presa, sin violar la neutralidad española, esto es: con el consentimiento de nuestras más altas autoridades. Parece ser que el Gobierno de los Estados Unidos no quería en modo alguno colaborar en la salida de Beria del territorio español sin contar con la previa autorización española, en vísperas, precisamente, de la posible firma del Acuerdo hispano-norteamericano. Parece ser que esta autorización ha sido concedida ya y Beria ha salido o está a punto de salir en el momento de redactar estas líneas, de territorio español.

Nota de la Redacción

De esta información – que nos ha sido remitida – no podemos, en caso alguno, hacernos solidarios ni asegurar su veracidad, aunque sí su verosimilitud.

En efecto, el Gobierno ruso sólo indicó que Lavrenti Beria sería procesado, pero luego nada ha dicho en relación con su encarcelamiento ni la fecha de la vista de la causa. Aun sin la sensacional noticia a estas horas ignoraríamos – y nos extrañaría – si el ex ministro del Interior se halla realmente arrestado, si se encuentra en alguna cárcel, e incluso si todavía vive, o… si ha conseguido escapar a sus perseguidores. Ciertamente, de la siniestra Lubianka no se sale con la misma facilidad que durante  la época zarista de ciertos campos de concentración de Siberia. Resulta, pues, más verosímil el hecho de que Malenkov y sus esbirros hayan fracasado en cuanto a la proyectada detención de Beria que la huida desde una celda de incomunicado. Si Beria ha logrado evitar su detención, el resto ya no sería tan absurdo si pensamos que el ‘Campesino’ se escapó dos veces de la Unión Soviética sin que contara con tantos posibles amigos como el ex jefe de las dos policías, la oficial y la secreta. Y si una vez fuera de la cortina de hierro ¿hacía qué país hubiera podido dirigirse el perseguido? Lógicamente hacia uno de aquellos en que menos tuviera que temer de la acción de los agentes del Kremlin; la terrible muerte de León Trotsky, en Méjico sería para él una útil advertencia. Cualquier país que mantuviera relaciones diplomáticas con Moscú representaría para Beria menos garantía que el nuestro. No se trata de una certidumbre matemática, más sí de una deducción lógica. Al menos se tiene la impresión de una posibilidad, nada inverosímil, de algo que ‘se non e vero, e ben trovato’.

Pag. 17-18

Franco, sí, pero...

Torcuato Luca de Tena Brunet

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Y aquel mismo miércoles 23 de septiembre de 1953 llegó fulminante la orden de mi destitución. Lo que en Estados Unidos hubiese supuesto un premio Pulitzer, y en cualquier otro lugar del mundo libre un éxito periodístico sonado, en la España de Gabriel Arias y Juan Aparicio significó la destitución del director del periódico que tan pacientemente, atando cabos en tren continentes, y tras una investigación exhaustiva y personal, había publicado la verdad y nada más que la verdad, bien que no toda la verdad.

La historia secreta de Laurenti Beria según las fuentes que paso a citar y que fueron pacientemente encajadas por mí, es como sigue. El 5 de marzo de 1953 muere Stalin y se inicia la lucha interna por el poder. Dos grupos se perfilan como opositores: los moderados que encabeza Malenkoff y los de Beria continuadores de la línea dura del más puro stalinismo. Ambas tendencias buscan el apoyo del ejército. Quien lo consiga será vencedor de esta pugna. Al entender el jefe de la NKGB que los militares se inclinan por Malenkoff, apoyado a su vez por el ala del Partido que sigue a Molotov, comprende que sus días están contados y desaparece muchos años antes de que se produzca su destitución.

Beria se refugió en las montañas caucásicas de su nativa Georgiana, patria asimismo de Stalin y nido del más puro stalinismo. De allí logró evadirse un emisario suyo quien entró en contacto con el servicio secreto estadounidense para tantear sus posibilidades de encontrar asilos en los Estados Unidos.

El agente de Beria busca en México contacto con elementos que enlacen con financieros norteamericanos que se brinden a facilitar su fuga. Los financieros norteamericanos cuyos nombres se barajan como posibles intermediarios para facilitar la fuga de Beria son Robert A. Vogeler, quien sufrió prisión en Hungria, condenado por los comunistas bajo la acusación de espionaje, y Clandenin Rayan, sin que ese extremo fuese reconocido ni desmentido.

La salida de Beria de la Unión Soviética se produjo desde las montañas de Azerbaiján. Desde donde en avión fue trasladado por pilotos rusos que habían intervenido en la guerra civil española hasta la zona meridional de la Mancha donde fue parachutado y trasladado en automóvil por sus cómplices y protectores estadounidenses a la Costa del Sol en cuyas aguas le esperaban submarinos norteamericanos para llevarlo a Estados Unidos. Esta operación fracasó y Beria fue capturado, o bien por agentes soviéticos desplazados al efecto, o bien devuelto a la Unión Soviético por las autoridades españolas para el importante canje expuesto líneas más arriba. Obsérvese que la destitución oficial de Beria se produjo el 9 de julio y su ejecución no tuvo lugar hasta el 24 de diciembre, seis meses después. ¿Qué es lo que ocurrió entretanto? Con posibles errores en datos o matices, lo que aconteció en este tiempo es algo muy semejante a lo expuesto en las líneas que anteceden. Por publicar entre interrogaciones si estaba el antiguo déspota escondido en España fui separado de mis funciones por orden gubernamental.

Las víctimas de Beria durante su gestión como jefe de la policía secreta y de la policía oficial fueron innumerables. La última víctima, bien que incruenta de Laurenti Beria, fui yo.

Juan Aparicio, director general de la Prensa; más listo que el hambre y más malo que un día sin pan. Siempre he pensado qué es peor, si un listo malo o un tonto bueno. Yo estaba entre aquella espada, Juan Aparicio, y esta pared, Arias Salgado… Feroz antimonárquico Juan Aparicio desde el primer instante se mostró enemigo declarado de todo cuanto mi periódico y mi familia representaban. La destitución de mi padre como presidente del consejo de administración de Prensa Española lleva su firma; y la mía, como director de ABC, también.

La destitución de un director de periódico en España por haber publicado lo que todo el mundo sabía que era cierto, causó escándalo en el extrajero, perjudicando de nuevo la imagen del régimen, pero no más del que hubiese supuesto la de cualquier otro profesional. Empero, en España, la de Torcuato Luca de Tena, de la dirección de ABC, por razones obvias, causó conmoción.

Los nombres más sonados de la intelectualidad española, entre los que figuraban un premio Nobel y un futuro premio Nobel, dos directores de la Real Academia Española, varios rectores de universidad y los escritores de mayor renombre, muchos de los cuales pasarían a la Historia, sin que faltaran los directores de los periódicos, dirigieron al ministro Arias Salgado un documento, redactado con guante blanco por Fernández de la Mora, abogando por mi reposición. Estaba encabezado por Concha Espina y Azorín.

El único firmante que ocupaba la dirección de un periódico oficial, era Emilio Romero y se le requirió severamente para que retirarse su firma. Él se negó… ¡y fue destitución de la dirección de PUEBLO, por este acto de solidaridad con un compañero de profesión! Lo que dice tanto de su honor y caballerosidad, como de un despotismo que si no se proyectaba en otros estamentos de la España nacional, alcanzada en la prensa sus más altas cotas.

Río arriba

Gonzalo Fernández de la Mora

Leer
Pag 115

Torcuato fue destituido como director de ABC. El motivo oficial fue su insistencia en dar con gran alarde tipográfico la falsa noticia de que Beria se había refugiado en España. Traté de disuadirle por todos los medios, incluso movilizando de madrugada al corresponsal de LE MONDE, mi viejo amigo Jean Creach, que me apoyó hasta la desesperación. Fue inútil, Torcuato se aferraba a sus frágiles fuentes. El ministro de Información, el Ingenuo y fiel Arias Salgado, estaba irritado por nuestra indocilidad; pero creo que sin aquel poderoso pretexto jamás habría llegado la destitución.

Como último recurso redacté un escrito de apelación la jefe del Estado, que firmó un centenar de escritores. Creo que sólo uno de los requeridos se echó atrás en el último momento, mi querido y admirado amigo Rafael Sánchez Mazas. Me acompañó convincente, como refuerzo en aquel almuerzo del desaparecido Gaylord´s, los miedos mayores que José Antonio Primo de Rivera reprochaba al cultísimo Rafael. Empresa inútil, porque en aquellas circunstancias no era pensable la destitución del ministro. El último episodio de la aventura fue más propio de una sátira que de un ditirambo, es lo único que me apena de tan impetuosa y excitante etapa.

El nuevo director [Luis Calvo] me pedía, de higos a brevas, algún editorial.

El Análisis

¿PULITZER O PIFIA DE TORCUATO LUCA DE TENA?

JF Lamata

Teniendo en cuenta que el Sr. Beria fue destituido de todos sus cargos en el PCUS, declarado traidor a la URSS y detenido en julio de 1953 y ejecutado en diciembre de 1953, y la información de ABC de que estaba en España es de septiembre de 1953, sólo hay dos posibilidades. O que Beria fue detenido en la URSS, escapó a España en septiembre  pero por algún motivo regresó en diciembre y fue ejecutado. O, por el contrario, nunca estuvo en España y la información de ABC era errónea.

Que el Gobierno decida despedir al director de ABC por una información errónea es discutible, puesto que esa decisión correspondería más a los accionistas y consejeros de Prensa Española, pero en todo caso no puede catalogarse como un caso de ‘censura franquista contra un periodista independiente’.

J. F. Lamata