El ministerio de Sanidad de Celia Villalobos alerta contra el chuletón por la crisis de las vacas locas a instancias los Comités Científicos

La decisión política está tomada: el chuletón de vaca tendrá que desaparecer de las carnicerías de la mayoría de países europeos, incluidas las españolas, dentro de unas semanas. Siguiendo los consejos del Comité Científico Director, los ministros de Agricultura de la Unión Europea llegaron ayer a la conclusión de que el espinazo debe ser considerado material de riesgo en las reses de más de un año y, por tanto, destruido.

Queda por determinar técnicamente cómo se separa la columna vertebral del animal, de tal manera que la carne del chuletón no pueda verse contaminada por tejidos susceptibles de contener el prión de la encefalopatía espongiforme bovina, que son, en concreto, la médula espinal y los ganglios dorsales. Los ministros han prohibido igualmente la comercialización de la carne que se obtiene mediante procesos mecánicos de los huesos de desecho y la columna vertebral, que se utiliza para salchichas, carne picada y alimentos para animales.

Con estas dos medidas, la Unión Europea trata de reforzar entre los consumidores la seguridad de que va a ser prácticamente imposible que la enfermedad pueda saltar la barrera entre especies y afectar a seres humanos. Desde octubre es obligatorio destruir los sesos, la médula espinal, los ojos y las amígdalas en los animales de más de un año. En diciembre se agregaron los intestinos a los materiales de riesgo. Sin embargo, lo que finalmente no han decidido los ministros ha sido rebajar la edad que obliga a efectuar la prueba de detección del prión en las reses que vayan al matadero. Seguirá siendo de 30 meses, aunque algunos países, entre ellos España, propusieron la rebaja a 24. Alemania decidió unilateralmente esa reducción.

Dada la alarma generada por la expansión del mal de las vacas locas en Europa, todas estas medidas de control de la enfermedad, basadas en los análisis efectuados por los científicos, deben ser apoyadas sin reservas. Si los políticos hubieran seguido antes el consejo de los expertos, no se habría llegado a la situación actual, en la que el sector entero de la producción de vacuno puede hundirse. El comisario de Agricultura, Franz Fischler, aseguró ayer que el mercado está evolucionando peor de lo que se preveía hace dos meses y que no se vislumbra ninguna posibilidad de mejora.

Ante esta situación, y dado que los casos de vacas enfermas no van a parar porque los animales se infectaron hace años, es necesario que la UE y los países miembros acaben cuanto antes con el goteo de medidas para garantizar la seguridad del consumidor. Cuanto antes se tomen todas las medidas necesarias, mejor.