El ministro de Información franquista, Pío Cabanillas, se fotografía con una barretina catalana en la cabeza

En la actualidad política de los últimos días ha destacado la presencia del ministro de Información y Turismo, Pío Cabanillas, en Barcelona, donde ha hecho importantes manifestaciones, según infrmábamos en las páginas de tipografía de nuestra anterior edición: «Las ideas de tutela jerárquica o de dirigismo estatal están ya superadas», dijo el señor Cabanillas y añadió: «Ello equivale al trazado de un auténtico camin de libertad para la convivencia nacional, en lo cultural y lo político». El ministro de Información en la imagen de nuestra portada, agita la clásica barretina al estilo de los cantaires durante el acto de homenaje al creador de los Coros Clavé.

Don Pío Cabanillas es como si dijeramos el timbaler del Bruch. Ha ido a Barcelona a ganar la guerra de la Independencia, y por eso el tambor ha sonado muy bien en toda España. Es el redoble que anuncia el triple salto moral de la convivencia, de la cultura y de la política. Si resulta así, queda justificado el ademán de la barretina. Es la primera imagen alegre de un ministro de Información que he visto en mi vida.