El nombramiento de Pío Cabanillas como ministro de Información desata una polémica entre los diarios YA y PUEBLO: Apostua recuerda que que el diario sindical sacó una foto de este dormido

La prensa y su papel en la actual sociedad política es tema de moda. Habló de los medios de comunicación social don Carlos Arias en su toma de posesión; analizó breve, pero profundamente, su papel y creó un nuevo clima de comprensión. Después, don Pío Cabanillas – a quien se le puede representar de cualquier manera menos dormido – ratificó la aceptación de las nuevas reglas de relación entre el Poder y la prensa, sobre la base de una común lealtad y de un distinto servicio. Ayer, don Licinio de la Fuente habla de la ‘popularización de la acción político’ como tarea que ha de llenar la prensa.

Toda esta literatura es tranquilizadora. Pero, como decía un reciente editorial de YA, quedan parecido importantes por resolver entre ellas las de la autenticidad económica del periodismo como institución que debe vivir con fuentes de financiación claras y conocidas.

Luis Apostua

Resulta que la Administración está estudiando el placet a una nueva revista política – aséptica, puro rompeolas de opiniones – que se llamará ‘Contrastes’. Yo confío ver en ella la firma de mi ilustre y admirado Luis Apostua., quien ayer, en el homenaje a García Carrés, cubrió de congoja nuestro corazón de fieles lectores del YA, en un sentido discurso en el que reiteró sus opiniones escritas en lo que él llamó ‘mi tebeo’. Le digo a usted, señor Morcillo.

Pedro Rodríguez.

Don Pedro Rodríguez, en PUEBLO, notificaba a mi director que yo había dicho ‘mi tebeo’ para referirme a YA. Esto me recuerda una anécdota del inolvidable Herraiz. Durante su servicio militar, el coronel llamó al soldado Ismael Herráiz y le dijo.

– Me he enterado que usted me llama ‘mi cabo’

– Sí, mi coronel – replicó Herraiz – Pero lo hago con enorme cariño.

Eso me pasa a mí con el YA. Si en el lenguaje coloquial de una amistosa reunión le llamó ‘mi tebeo’, lo hago con el mismo cariño con que antes se lo llamaba al HOY de mi Badajoz natal, donde tanto trabajé, y también por una cierta cura de humildad muy conveniente contra el subjetivismos engreídos. Lo que nunca se me ocurrirá llamar a YA ni a su director ‘mi dueño y señor’. Se ve que el sentido del humor anda escaso. También puedo llamar a mi casa ‘mi cueva’. ¿Y si lo digo con el Sr. Rodríguez delante?

La segunda parte de la andanada del señor Drodríguez me sorprende más. Dice que voy a escribir en una revista que se llama ‘Contrastes’. A efectos de mi declaración sobre la renta, ruego a mi profeta particular me diga dónde se va a hacer esa publicación, cuya existencia o proyecto – en lo que tenga relación con mi persona – ignoro por completo.

A todo esto, ruego a los lectores perdonen estas molestias personales, ajenas a mi voluntad. Sepan sólo que el día antes yo había recordado vagamente una foto de PUEBLO donde se veía a un señor, hoy ministro, dormitando. Aunque el pie decía que meditaba, no dormitaba.

Ante esta bizarra situación se me ocurre preguntar: ¿He de pagar yo la factura de la famosa foto?

Luis Apostua