28 octubre 1986

El periódico ABC reprocha al obispo de San Sebastián, monseñor Setién, su posición equiparando los crímenes de ETA con los presuntos crímenes del Estado español

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Publicado el 28 de octubre de 1986 en ABC.

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EDITORIAL DEL 28 DE OCTUBRE DE 1986.

Las ambigüedades de monseñor Setién

Monseñor Setién, obispo de San Sebastián, ha declarado tras el asesinato del gobernador militar de Guipúzcoa: «No más muertes, ni secuestros, ni torturas». Podría parecer esta declaración un principio de rectificación por parte de un obispo cuya ambigüedad ha sido denunciada reiteradamente. Pero, según expertos en la situación vasca, monseñor Setién ha hecho esta declaración para, dentro del ambiente creado por el horrendo crimen del sábado, quedar lo mejor posible con ETA. No se puede hablar como si se tratara de lo mismo de asesinatos, secuestros y torturas, con clara alusión en este ultimo caso a la Guardia Civil. ETA ha asesinado a centenares de personas, civiles y militares. ETA ha secuestrado a numerosos ciudadanos inocentes. De los centenares de acusaciones por torturas contra la Guardia Civil, diligenciadas por unos jueces que viven bajo la presión del terror en el País Vasco, sólo se ha demostrado un caso de «malos tratos». No se pueden meter en el mismo saco asesinatos (que monseñor Setién llama muertes), secuestros y torturas, como diciendo que ETA y la Guardia Civil son igualmente condenables. Habrá que recordar también a monseñor Setién que las verdaderas torturas son las que la banda de ultraizquierda ETA ha ejercido bárbaramente contra los secuestrados y sus familias. Si fuera a esas torturas a las que se refiere el obispo, entonces su declaración sería válida. Si no, lo que monseñor Setién ha hecho es prestarse una vez más al juego de ETA, cuyos miembros y simpatizantes de Herri Batasuna tienen la consigna de denunciar torturas cada vez que se les detiene