28 febrero 2006

Los propietarios de Unidad Editorial no quisieron participar en el proyecto en el que sí estará, a título personal, Pedro J. Ramírez, como accionista minoritario

Nace EL ECONOMISTA fundado por Alfonso de Salas tras romper con EL MUNDO y Unidad Editorial

Hechos

El 28.02.2006 nació el nuevo periódico EL ECONOMISTA, cuyo propietario es D. Alfonso de Salas

Lecturas

El ex presidente de Unidad Editorial, D. Alfonso de Salas Castellano fundó el periódico El Economista nombrando a D. Carlos Salas como su primer director y a D. Amador G. Ayora como Director Adjunto. Su primer número sale el día 28.

La empresa editora de EL ECONOMISTA es Ecoprensa S. A., cuyo Presidente es D. Alfonso de Salas, su Vicepresidente D. Gregorio Peña (ex consejero de Unidad Editorial), el Director Gerente es D. Antonio Martín y el Director Comercial D. Miguel Suárez.

El periódico nace con una fuerte campaña mediática contra El Corte Inglés, periódico que rechazó apoyar económicamente el nacimiento del periódico.

28 Febrero 2006

Ayudar a los profesionales

Alfonso de Salas

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Desde que me surgió la idea de este nuevo periódico, en el verano de 2004, hasta el día de hoy en que usted, querido lector, lo tiene en sus manos, ha transcurrido más de año y medio. Durante estos meses, los tres promotores de EL ECONOMISTA, Juan González, Gregorio Peña y yo mismo, que estuvimos en la fundación de EL MUNDO, hemos ido perfilando el periódico junto con Carlos Salas y Amador Ayora, director y director adjunto de EL ECONOMISTA.

Nuestra meta es crear un concepto de periodismo económico más accesible, inteligible y ameno para el empresario, el directivo o el inversor medio. Nuestros tres millones de profesionales, directivos, emprendedores y autónomos han demostrado un gran dinamismo y creemos, necesitan un periódico nuevo que les ayude a afrontar con éxito sus retos profesionales.

EL ECONOMISTA nace como un proyecto intelectual. Nuestro primer objetivo no es lograr beneficios, sino proporcionar a nuestros ciudadanos una información que les ayude en su desarrollo empresarial y profesional. El segundo objetivo será que la empresa editora sea rentable, pues sólo así podremos garantizar la independencia de la línea editorial.

Los principios ideológicos del proyecto son conocidos desde el primer momento por nuestros más de 100 accionistas y 80 profesionales, y todos lucharemos para hacer de España un país moderno, donde se respeten los principios de la economía libre de mercado y se cree, así, cada vez más riqueza.

Nuestro periódico no quiere competir con los diarios de información general ni con lo llamados salmones, que cumplen eficazmente su papel elaborando una información técnica necesaria para los especialistas, un colectivo que ronda los 50.000 compradores. Nuestro periódico quiere crear un nuevo concepto de periodismo que se sitúe en un segmento que ya existe en Europa. Es el caso del periódico italiano IL SOLE 24 ORE, que hemos tenido la fortuna de incorporar en nuestro proyecto. Nuestros periodistas, tiene un magnífica cualificación – para mí constituyen el mejor equipo profesional de la prensa económica española – y van a desarrollar esta nueva forma de enfocar el periodismo económico.

En fin, querido lector, EL ECONOMISTA es para usted, para ayudarle en su vida profesional. Un periódico es un ser vivo y éste, que es suyo, debe estar en un proceso continuo de evolución y mejora, lo que conseguiremos con su ayuda, el trabajo de los profesionales de todas las áreas de la empresa editora (redacción, comercial, gerencia) y el apoyo de nuestros accionistas.

28 Febrero 2008

NO NOS TIEMBLA EL PULSO

Carlos Salas

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Hace casi un año, Alfonso de Salas me citó en un hotel de Madrid, para proponerme una locura: lanzar un diario económico. ¿Hay hueco para otro más? Cuando el EL PAÍS salió a la calle en 1976 les dijeron lo mismo: no hay hueco en 1989 muchos le dieron unos meses de vida, y allí está, vivo y coleando con fuerza. Lo mismo sucedió con LA RAZÓN, que acabó encontrando su sitio en el mercado. También daban por muertos a los gratuitos, y mañana nacerá otro a escala nacional.

Eso quiere decir que siempre habrá lectores para quien sepa conquistarlos. Por sorprendente que parezca, existen cientos de miles de personas que están llamando a las puertas de la prensa económica pero nadie les hace caso. Son hombres y mujeres que necesitan un compañero que les explique qué está pasando dentro y fuera de nuestras fronteras, que les interprete las guerras empresariales, que les informe de las novedades en los impuestos, que les oriente sobre dónde conseguir subvenciones, quién ofrece los mejores créditos y cuál es el mejor momento para vender acciones.

Pero no nos conformamos con todo eso: queremos hacer un diario económico independiente al que no le tiemble el pulso a la hora de sacar los trapos sucios de las grandes corporaciones, del Gobierno o de quien sea. Cada vez que decimos esto, escuchamos la misma reacción: ¿y os vais a meter con los poderosos? Nos arriesgaremos. Es un riesgo controlado porque sabemos que una empresa o un poderoso pueden soportar críticas. Lo que no soportan son las mentira o la mala fe.

La economía vuelve a estar en la primera página de los diarios de información general de todo el país, en la radio y en la televisión. El escenario mundial va a estar protagonizado por grandes operaciones apoyadas por sumas fabulosas de dinero. Adiós al provincianismo económico de una vez.

¿No es éste el mejor momento para lanzar un diario económico? Sin duda. Pero no queremos ser otro periódico más. Queremos lanzar y participar en los grandes debates del país: el impacto de la inmigración, los efectos del Estatuto, la escasez de agua, el futuro del País Vasco, la falta de competitividad de España, la globalización…

Y queremos contarlo sin tapujos y hasta con un poco de picardía. Ése es el nuevo concepto de periodismo económico que empezamos a cocinar hace meses. Desde hoy, tienen el gusto de probarlo.