23 junio 2022
Amber Capital será el principal accionista de la compañía después del Estado
El dueño de PRISA, Oughourlian, entra en INDRA y pacta con la SEPI la destitución de los consejeros independientes de la compañía
Hechos
El 23 de junio de 2022 se produce una modificación del consejo de administración de INDRA al decidir la mayoría de los accionistas la sustitución de una parte de los miembros del consejo.
Lecturas
El 22 de febrero de 2022 se hacía público que el Gobierno, a través del Estado reforzaba su presencia en el capital de INDRA subiendo al 28% de las acciones. La presidencia no ejecutiva seguía siendo ocupada por D. Mar Murtra aunque el día21 de abril de 2022 se conocía la dimisión de Dña. Cristina Ruiz como consejera delegada de la compañía, quedando D. Ignacio Mataix como único consejero delegado.
El 16 de junio de 2022 se producía el principal cambio en el capital con la entrada del Fondo Amber Capital de Josep Oughourlian, el propietario del Grupo PRISA, editor de EL PAÍS, comprando un paquete de acciones que le situaban como cuarto socio de la compañía tras la SEPI, que cuenta con el 28%, el fondo de inversión Fidelity (9,8%) y el grupo de defensa SAPA (5%). Para septiembre el 2022 la presencia de Amber Capital habrá subido al 9,9% convirtiéndose en el principal accionista de INDRA después de la SEPI.
La nueva composición de capital votaba el 23 de junio la destitución como miembros del consejo de administración de INDRA de D. Alberto Terol, Dña. Carmen Aquerreta, Dña. Ana de Pro, D. Enrique de Leyva y Dña. Isabel Torremocha, todos ellos consejeros independientes. A estos el día 27 de junio se unirá la dimisión de la también consejera independiente Dña. Silvia Iranzo. El 28 de junio dimitía D. Ignacio Martín, lo que suponía un total de siete consejeros que abandonaban INDRA ante el cambio de capital.
Para reemplazarles los accionistas propondrán a Dña. Virginia Arce, Dña. Olga San Jacinto, D. Felipe Fernández Atela, Dña. Coloma Armero, D. Axel Arendt y Dña. Belén Amatriain
22 Febrero 2022
La SEPI elevará su participación en Indra hasta el 28%
El Consejo de Ministros ha autorizado este martes a la Sociedad Estatal de Participaciones Industriales (SEPI) para que aumente su participación en Indra hasta el 28% del capital. La empresa pública, que depende del Ministerio de Hacienda, posee un 18,7%, cifra que ahora escalará hasta quedarse justo por debajo del 30%, el límite legal a partir del que tendría que presentar una oferta pública de adquisición (opa).
De esta forma, la SEPI comprará aproximadamente un 10% del capital de la tecnológica española con esta operación. “Dicha decisión responde al renovado compromiso del Estado con una compañía que recientemente ha asumido retos de especial trascendencia para los intereses de nuestro país y de nuestros aliados más cercanos, siendo entre ellos especialmente destacable el Futuro Sistema Aéreo de Combate o FCAS (Future Combat Air System), del que forma parte España con Indra como líder industrial de la participación española”, asegura la empresa pública en el comunicado remitido a la Comisión Nacional del Mercado de Valores (CNMV).
La compañía ha cerrado la sesión de este martes con una cotización de 9,25 euros, un 0,27% por debajo del día anterior. Con este valor por acción, la capitalización bursátil de la tecnológica queda cerca de los 1.640 millones de euros. Por tanto, la adquisición supondría para la SEPI un desembolso de unos 150 millones si se realiza la compra a valor de mercado actual.
Con esta operación, se otorga “estabilidad accionarial y un apoyo eficaz para que pueda llevar a cabo con éxito los compromisos asumidos”, según explica la sociedad estatal en la nota firmada por su presidenta, Belén Gualda, que ocupa el puesto desde marzo de 2021. El pasado diciembre, el hólding especializado en defensa SAPA se hizo con un 5% de la compañía a Corporación Financiera Alba, de los March, que ya adelantó entonces que buscaría deshacerse del capital restante en Indra (3,2%). Asimismo, la SEPI impulsó en mayo del año pasado el relevo al frente de la compañía que acabó con la salida de Fernando Abril-Martorell y el nombramiento de Marc Murtra como presidente no ejecutivo e Ignacio Mataix y Cristina Ruiz como consejeros delegados.
Si la operación culmina con éxito, la sociedad pública podría aspirar a aumentar su representación en el consejo de la tecnológica. En estos momentos cuenta con dos consejeros dominicales: el exdiputado socialista Antonio Cuevas y el exministro de Industria en el Gobierno de Zapatero, Miguel Sebastián.
El Ministerio de Hacienda, a través de un comunicado, ha asegurado que la intención es ganar peso en una firma que el Gobierno considera estratégica: “La autorización del Consejo de Ministros responde a la importancia de reforzar la participación del Estado como accionista de referencia en una compañía estratégica para el país, especialmente en el ámbito de la seguridad y la defensa”.
16 Junio 2022
Joseph Oughourlian se hace con el 4,1% del capital de Indra
El presidente de PRISA (grupo editor de EL PAÍS), Joseph Oughourlian, ha entrado en el accionariado de Indra con un 4,1% del capital, lo que le convierte en el cuarto máximo accionista de la compañía a una semana de la junta de accionistas de la firma tecnológica y de defensa. Oughourlian ha vehiculado su inversión a través de la gestora de fondos Amber Capital y cuenta con 7.384.790 títulos de la firma, según ha transmitido este jueves a la Comisión Nacional del Mercado de Valores (CNMV). Esta participación está valorada a precios de mercado actuales (10,21 euros por título) en 75,69 millones de euros.
El directivo del grupo mediático y de educación se sitúa por peso en el capital solo por debajo de la Sociedad Estatal de Participaciones Industriales (SEPI), que cuenta con el 25,15% y aspira alcanzar pronto el 28%, el fondo de inversión Fidelity (9,8%) y el grupo de defensa SAPA (5%). En paralelo al movimiento de Amber Capital, Goldman Sachs ha aflorado derechos por el 5,268% del capital de Indra, además de controlar directamente un 0,23%. La entidad financiera cuenta con una opción de compra de 3,5 millones de títulos, equivalentes al 2% de Indra, en julio de 2023, así como una opción de venta por la misma cantidad y fecha. Adicionalmente, cuenta con 16 swaps, que podrían cambiar por acciones, que suman el 1,2% del capital.
Oughourlian llega al capital de la empresa en un momento crucial para su futuro a nivel organizativo, ya que precisamente el pasado miércoles el consejo de SEPI aprobó proponer al exdiputado socialista Juan Moscoso como su tercer consejero en Indra. El objetivo de SEPI es convertir a Indra en un polo que consolide el sector de la defensa español, especialmente después de la guerra de Ucrania y ante la previsible subida del presupuesto en este campo. En este contexto, Oughourlian se une a SAPA como nuevo accionista dentro de la empresa de defensa y tecnología española, en sustitución de un histórico en el capital de la firma como Corporación Financiera Alba, que vendió su participación a raíz de la salida de Fernando Abril Martorell a instancias de SEPI el año pasado.
Junta de accionistas
El orden del día de la junta de accionistas del 23 de junio contempla continuar con el modelo que sitúa a Marc Murtra como presidente no ejecutivo y dos consejeros ejecutivos, el consejero delegado, Ignacio Mataix, y el director general de Tecnologías de la Información, Luis Abril, cuyo nombre deberán aprobar los accionistas. Asimismo, la junta deberán revalidar la renovación de los dos consejeros dominicales con los que la SEPI contaba hasta ahora en el órgano: el exministro de Industria Miguel Sebastián y el exdiputado Antonio Cuevas, así como el nombramiento del independiente, Francisco García Sanz, ex número dos de Volkswagen, y la renovación de Isabel Torremocha.
Por otro lado, SAPA ha reclamado un asiento en el consejo para el presidente de la Real Sociedad, Jokin Aperribay, miembro de la familia fundadora del grupo, pero se ha encontrado con la oposición de la Comisión de Nombramientos.
23 Junio 2022
Indra da un vuelco en su consejo con el cese de cinco consejeros independientes
La junta de accionistas de Indra ha destituido este jueves a cinco de los ocho consejeros independientes que forman parte de su consejo de administración con el voto a favor de la Sociedad Estatal de Participaciones Industriales (SEPI), la empresa vasca de defensa SAPA y el fondo Amber, primer accionista de PRISA (grupo editor de EL PAÍS).
La asamblea de accionistas ha tomado esta decisión después de que un representante de Amber, que cuenta con el 4,1% del capital, formulara durante las intervenciones una petición para introducir varios puntos fuera del orden del día con el objetivo de cesar a Alberto Terol, Carmen Aquerreta, Ana de Pro y Enrique de Leyva, todos ellos consejeros independientes. Estos ceses han sido apoyados por el 53,06% del capital y rechazados por el 46,93%. Isabel Torremocha, también independiente, ha sido cesada al no renovar su mandato por el voto en contra de un 52,25% de los accionistas. Además, también se ha aprobado la entrada del consejero dominical de SAPA, Jokin Aperribai, con el 53,6% de los votos.
El representante de Amber justificó la petición de que se votara el cese de los consejeros independientes al entender que era necesaria una reestructuración más amplia del consejo para conferir estabilidad al mismo tras unos meses convulsos en el seno del grupo por el rechazo de estos consejeros a que Marc Murtra tuviera poder ejecutivo. Murtra fue nombrado presidente de la compañía tecnológica hace un año a propuesta de la SEPI, el brazo industrial del Estado, un movimiento que despertado suspicacias entre los independientes, que han puesto trabas a la gestión del presidente, que ha declarado que intención es desarrollar el plan estratégico para convertir a Indra en una compañía puntera en el sector de la defensa en Europa.
Amber admitió en la junta que en los últimos días había informado a “determinados accionistas significativos de la sociedad” de sus intenciones de cambios en el consejo. “Las circunstancias que han ido concurriendo en el órgano de administración de la sociedad en estos últimos tiempos hacen aconsejable desde el punto de vista social que el consejo de administración pueda tomar la iniciativa para una reestructuración más amplia respecto de la composición del propio consejo y, por tanto, de sus comisiones, con la finalidad de dar una mayor cohesión y estabilidad a dicho órgano social “, indicó.
El fondo reveló el pasado 16 de junio su entrada en el capital de la empresa en un momento crucial para su futuro a nivel organizativo, ya que precisamente el consejo de SEPI acababa de proponer al exdiputado socialista Juan Moscoso como su tercer consejero en Indra, que no se ha votado en la junta de este jueves por no estar incluido en el orden del día. El objetivo de SEPI es convertir a Indra en un polo que consolide el sector de la defensa español, especialmente después de la guerra de Ucrania y ante la previsible subida del presupuesto en este campo. En este contexto, Amber se une a SAPA como nuevo accionista dentro de la empresa de defensa y tecnología española, en sustitución de un histórico en el capital de la firma como Corporación Financiera Alba, que vendió su participación a raíz de la salida de Fernando Abril Martorell a instancias de SEPI el año pasado.
Precisamente, los consejeros salientes con Terol a la cabeza habían mostrado sus discrepancias con la labor de los nuevos gestores desde que Marc Murtra, a propuesta de la SEPI, relevó al frente de la compañía a Fernando Abril-Martorell en mayo del pasado año, un relevo que fue seguido de cambios en la cúpula gestora como la salida de la consejera delegada en el área de negocio de TI, Cristina Ruiz, y el director financiero, Javier Lázaro. Precisamente, Indra ha nombrado este jueves nuevo director financiero a Borja García-Alarcón, quien ocupaba esta posición en Enagás hasta comienzos de esta semana.
Además, algunos de los consejeros cesados trasladaron al consejo la preocupación de otros accionistas minoritarios de que la SEPI se hiciera con el control absoluto de la sociedad mediante la concertación con otros socios, en lugar de lanzar una opa pública de adquisición (opa) sobre la totalidad del capital, como contempla la ley. En concreto, la normativa española señala la obligación de lanzar una opa por el 100% de la compañía cuando hay una “acción concertada” para tomar más del 30% de una cotizada o controlar su consejo.
Con el cese de los cinco consejeros, la SEPI, que posee el 26,5% del capital, se asegura el control del máximo órgano de gobierno de la compañía tecnológica y de defensa, con el apoyo de SEPA y Amber. El nuevo equilibrio de poderes en el consejo de Indra permitirá que Murtra asuma poderes ejecutivos, hasta ahora reservados a los dos consejeros delegados. También abre la puerta a la posible entrada de la tecnológica en ITP, el fabricante de motores vasco, que Roll-Royce vendió al fondo Bain, con el objetivo de recuperar su españolidad y que España gane peso en la industria de defensa.
Tras las votaciones de este jueves, el consejo de Indra queda formado por nueve miembros, de los cuales tres son independientes: Francisco Javier García, Silvia Iranzo e Ignacio Martín. Junto a los anteriores se mantienen los dos consejeros ejecutivos Ignacio Mataix y Luis Abril, así como los dos representantes de SEPI (Miguel Sebastián y Antonio Cuevas), el presidente Marc Mutra, y el recién elegido Aperribai. Próximamente, se unirá al mismo Juan Moscoso, a propuesta de la SEPI, y queda la incógnita de cómo se cubrirán el resto de vacantes.
Intervenciones críticas
En el turno de intervenciones, el aún consejero Alberto Terol denunció el pacto tácito que a, su juicio, han sellado SEPI, SAPA y Amber para acabar con la mayor parte de los consejeros independientes “lo que coloca a Indra en una situación absolutamente anómala”. El consejero alertó de que la salida de esos consejeros supone un “atropello” y traerá consigo “una escandalera”, al dejar desprotegidos al resto de accionistas y poner en cuestión la gobernanza de la compañía, “porque el gobierno corporativo no es ninguna broma, y ayuda a las compañías a estar adecuadamente dirigidas”. Terol ya había notificado al consejo su intención de dimitir con efectos desde este viernes, pero aún así Amber mantuvo su propuesta de que se votara su cese en la junta de este jueves.
Por su parte, Enrique de Leyva manifestó que, a la vista del giro que estaba tomando la compañía, era precisamente él quien no quería permanecer en ella. “No contéis conmigo, soy un tipo complicadito y nunca dispuesto a dejarse doblar el brazo”, dijo.
Discurso del presidente
Antes de las reñidas votaciones sobre los consejeros, el presidente no ejecutivo de Indra, Marc Murtra, ha asegurado en su discurso en la junta de accionistas que Indra liderará la “transformación y consolidación” de la industria de defensa española, gracias al carácter puntero de su tecnología propia, que posiciona a la compañía como un aspirante a liderar proyectos de defensa a nivel europeo y nacional. Al mismo tiempo, ha subrayado que el ecosistema de defensa español continúa presentando “carencias de escala” y una capacidad de coordinación, inversión y escala que no es suficiente para el escenario actual, así como “lagunas” en capacidades tecnológicas críticas.
El directivo ha destacado el papel de la SEPI como accionista de referencia y el necesario alineamiento entre el Gobierno y la industria para desarrollar las capacidades de defensa del país. “Un factor clave de éxito ante el escenario que viene es la adecuada colaboración público-privada, cada uno en su rol y con sus responsabilidades y gobernanzas, y tener un alineamiento profesional entre Gobierno e industria”, indicó. En la misma línea, añadió que “es esencial entender el papel de liderazgo en este proceso que está asumiendo el sector público, tanto en España como en el resto de países con industria de Defensa, como Francia, Italia o Noruega”.
Asimismo, ha subrayado el compromiso de los accionistas y el apoyo del Estado a la evolución de la compañía, que podrá beneficiarse de una inversión adicional en Defensa del Gobierno, que estima entre 10.000 y 12.000 millones de euros adicionales al año. Entre las prioridades estratégicas, Murtra también ha destacado el objetivo de penetrar en nuevos mercados, al tiempo que Indra se fortalece en sus mercados estratégicos.
Por su parte, el consejero delegado de Indra, Ignacio Mataix, ha inaugurado el evento con un discurso en el que ha destacado el “despertar” de la Europa de la defensa a raíz de la guerra de Ucrania. “Se refuerza enormemente nuestra posición como gran empresa de defensa europea en el ámbito de sistemas”, ha asegurado Mataix, quien ha postulado a la compañía para liderar nuevos procesos en este ámbito en España y Europa ante el aumento de inversión en este campo. Asimismo, ha destacado algunos desafíos como el control de costes en plena crisis de la cadena de suministros. Para ello, entre otros aspectos, ha destacado que se ha impuesto un nuevo método de fabricación de radares que reducirá en un 50% la llegada al mercado de nuevos equipamientos.
24 Junio 2022
Sánchez asalta la estratégica Indra gracias al presidente del grupo Prisa
El Gobierno de Pedro Sánchez asaltó y tomó el control del grupo estratégico Indra mediante engaños a los consejeros independientes y sin necesidad de lanzar una Oferta Pública de Adquisición de Acciones (OPA). Con el apoyo decisivo del fondo Amber de Joseph Oughourlian, presidente del grupo Prisa, logró destituir en la insólita junta de accionistas a cuatro consejeros considerados incómodos por Moncloa e impidió la reelección de otra consejera también vista como rebelde. Los fondos internacionales intentaron evitar las destituciones pero no lograron frenar a una mayoría gubernamental formada por la Sepi, el grupo vasco Sapa y el presidente de Prisa que ejecutó la maniobra definitiva para el cese.
El Gobierno se ha apoderado de una empresa estratégica cotizada, Indra, sin lanzar una Oferta Pública de Adquisición de acciones y mediante engaños y el apoyo decisivo del fondo Amber de Joseph Oughourlian, presidente del grupo de comunicación Prisa, para tomar el control por sorpresa. Los hechos comenzaron con un consejo de administración previo a la junta de accionistas, según ha podido reconstruir EL MUNDO, y concluyeron con la destitución por sorpresa de los consejeros independientes considerados más opuestos al control gubernamental.
Indra es una empresa estratégica al ser un emblema de la industria española de defensa en proyectos internacionales y habitual colaborador de la Administración en la contabilidad de procesos electorales. La Sociedad Estatal de Participaciones Industriales (Sepi) es el primer accionista con un 25% del capital, pero hasta este jueves se encontraba en minoría en el consejo de administración, porque, en cumplimiento del Código de Buen Gobierno de las empresas cotizadas, la mayoría de los consejeros han sido independientes.
Para invertir esta situación, el Gobierno aprovechó la junta de accionistas y recurrió a embustes. Todo empezó con la exigencia, como publicó este diario este miércoles, de los consejeros independientes de que el presidente de Indra nombrado a propuesta del Gobierno, Marc Murtra, renunciara a su voto de calidad. Era su condición para que la junta de accionistas de horas después fuera pacífica, porque se iban a producir cambios que podían dejar a los independientes en minoría. Si Murtra cedía su voto de calidad, esta situación se evitaba respetando así el Código de Buen Gobierno de la Comisión Nacional del Mercado de Valores (CNMV).
Según fuentes próximas al consejo, Murtra mostró voluntad de consenso y aceptó ceder temporalmente su voto de calidad lo que llevó al vicepresidente y coordinador de los independientes, Alberto Terol, a confirmar su dimisión pacífica después de la junta por superar doce años de mandato. La Sepi, a través de sus representantes en el consejo de administración, parecía bendecir el acuerdo con cesión de Murtra.
Sin embargo, el Gobierno tenía preparado otro plan y era garantizar la salida ya de Terol en la junta para evitar cualquier maniobra de éste y, de paso, fulminar a otros tres consejeros que consideraba opuestos a sus planes. Se trata de Carmen Aguerreta, Enrique de Leyva, Ana de Pro. Además, impidió la reelección de otra consejera independiente, Isabel Torremocha. La Sepi consideró necesaria esta jugarreta previa para jugar el factor sorpresa y poder imponerse a fondos internacionales en una votación que, como se vio después, pudo perder si no actuaba de forma taimada.
De hecho, el grueso de los fondos internacionales, incluido el soberano noruego Norges o el estadounidense Fidelity, defendieron con sus votos la permanencia de los independientes, pero el factor sorpresa evitó una movilización mayor que se impusiera al grupo gubernamental.
Para el cese de los rebeldes el Gobierno contó con el apoyo clave de Oughourlian, presidente de Prisa bien visto en Moncloa y que se ha hecho con un 4% de Indra a través del fondo Amber en sintonía con el Gobierno.
Oughourlian, que asistió personalmente a la junta, pidió por sorpresa el cese de cuatro consejeros a través del abogado Alberto Alonso Ureba. Éste reclamó la destitución para dotar de «más cohesión y estabilidad a la compañía». Dijo haberlo hablado con «determinados accionistas significativos» que, según el listado oficial son la Sepi y el grupo vasco Sapa, dependiente de contratos del Ministerio de Defensa. Con sus palabras alimenta lo que insinuó Terol en su discurso de despedida y es que existe concertación entre los tres sin lanzar una OPA, pese a que superan el umbral del 30%. Ostentan juntos cerca del 37%, lo que les permitió superar el 50% del voto representado en la junta. Finalmente lograron su propósito con el 53% de los votos lo que muestra que si no llegan a dar un golpe de mano tenían riesgo de perder la votación frente a los fondos internacionales.
Terol pidió la palabra en la insólita junta de accionistas y calificó de «atropello» la operación gubernamental. «Vencerán pero no convencerán», llegó a decir el hasta ahora vicepresidente de Indra evocando la famosa frase de Miguel de Unamuno ante el general franquista Millán Astray.
Terol, que ha sido alto ejecutivo en BNP Paribas y Deloitte, pertenece a la élite empresarial del país, y aseguró que la operación producirá «escandalera internacional». La maniobra para la toma de control de esta emblemática multinacional de defensa española se produce una semana previa de la Cumbre de la OTAN en Madrid.
El destituido desveló el «acuerdo razonablemente malo, como suelen ser los acuerdos en sede de Consejo» de horas antes en alusión al citado pacto -que quedó en nada- de que Murtra cediera su voto de calidad para que no fuera dirimente en favor de los representantes del grupo gubernamental y en contra de los independientes. «Tengo mis opiniones y no me doblan el brazo. Lo siento, si lo que buscáis es doblar el brazo a la gente, no contéis conmigo», se despidió por su parte Leyva.
26 Junio 2023
Marc Murtra (Presidente de INDRA): "Los accionistas han expresado su opinión"
Pregunta. Indra ha vivido una de las semanas más convulsas de su historia. ¿Qué ha pasado?
Respuesta. Lo que ocurrió es que varios accionistas, a través de la junta, expresaron su opinión. No me corresponde a mí explicar por qué o cómo votaron los accionistas. Lo que me corresponde es recoger esas decisiones, implementarlas y, con carácter de inmediatez, cubrir las vacantes de consejeros independientes libres.
P. Pero ha habido revuelo por el relevo de los cuatro consejeros independientes. Se habían opuesto a su plan empresarial y a que tuviera poder ejecutivo.
R. Por respeto al consejo y a la discreción a la que me debo prefiero no explicarlo. Ahora quiero centrarme en el futuro de Indra, en sus órganos de gobierno y en su funcionamiento.
P. Algunos le acusan de dirigir una maniobra del Gobierno para tomar el control de Indra.
R. Primero, en Indra no hay ni interferencias ni sugerencias. Indra se rige única y exclusivamente a través de sus órganos de gobierno, que son la junta, el consejo y sus ejecutivos. Y en segundo lugar, diría que soy un profesional con una larga trayectoria, especialista en el ámbito de la tecnología, en las finanzas y en las operaciones público-privadas. Tengo criterio propio y no me rijo por el criterio de nadie más que el mío, pensando en el 100% de los accionistas, en los pequeños, en los grandes, en los que son activos y en los que son más pasivos. Ese es mi trabajo y solo me dedico a eso. Ni hay interferencias, ni hay injerencias, ni las habrá mientras sea presidente de esta compañía. Indra se va a regir por criterios técnicos y profesionales.
P. ¿Cree que se han vulnerado los principios del buen gobierno corporativo?
R. No. Además, con carácter inmediato vamos a nombrar consejeros independientes, que tengan un currículum contrastado y adecuado. Gente que tenga criterio propio y experiencia para los retos de Indra, que pasan por la tecnología de la información, pero también por la defensa.
27 Junio 2022
Silvia Iranzo presenta su dimisión como consejera independiente de Indra
Silvia Iranzo Gutiérrez ha comunicado por carta su decisión de dimitir irrevocablemente como consejera independiente de Indra con efectos desde el pasado 25 de junio, según ha informado la compañía este lunes a la Comisión Nacional del Mercado de Valores (CNMV).
La consejera ha remitido una carta al consejo de administración de la empresa tecnológica explicando que su dimisión viene motivada por su rechazo a “los acuerdos adoptados por la junta general de accionistas de cese y no reelección de cinco consejeros independientes que, bajo su criterio, suponen rebajar el estándar de gobierno corporativo de la compañía en perjuicio de la mayoría de accionistas no representados en el consejo”, según señala la comunicación al regulador.
La junta de accionistas de Indra destituyó el pasado día 23 a cuatro consejeros independientes (Alberto Terol, Carmen Aquerreta, Ana de Pro y Enrique de Leyva) y no renovó a Isabel Torremocha, también independiente, con el voto a favor de la Sociedad Estatal de Participaciones Industriales (SEPI), la empresa vasca de defensa SAPA y el fondo Amber, primer accionista de PRISA (grupo editor de EL PAÍS).
Tras la dimisión de Iranzo, el consejo de administración de la empresa que preside Marc Murtra ha sido convocado para reunirse este lunes “a los efectos de proceder, entre otros asuntos, al nombramiento de miembros de sus comisiones e iniciar el proceso de selección de consejeros independientes”, afirma el comunicado de la sociedad. Con la marcha de Iranzo, Indra queda con sólo dos consejeros independientes, Francisco García Sanz e Ignacio Martín.
El consejo se reunió a última hora de la tarde de este lunes para tratar de restituir los comités del consejo de administración. Entre ellos, el Comité de Nombramientos, Retribuciones y Gobierno Corporativo, que tiene que estar formado por mayoría de independientes. Por eso, el consejo estudia constituir este órgano, decisivo para la configuración de la cúpula con García Sanz, Martín y otro consejero dominical. Asimismo, el consejo también analiza la configuración de la Comisión de Auditoría y Cumplimiento, que también tiene que tener mayoría de consejeros independientes.
“La Comisión de Auditoría y Cumplimiento estará compuesta exclusivamente por consejeros no ejecutivos, con un mínimo de tres y un máximo de seis. La mayoría de sus miembros deberán ser consejeros independientes y designarán de entre estos a su presidente”, señala el reglamento del consejo de administración y sus comisiones de Indra.
El presidente de la compañía, Marc Murtra, explicó el domingo en una entrevista en EL PAÍS: “Con carácter inmediato vamos a nombrar consejeros independientes, que tengan un currículum contrastado y adecuado. Gente que tenga criterio propio y experiencia para los retos de Indra, que pasan por la tecnología de la información, pero también por la defensa”. Por eso, el consejo de administración se dispone a elegir a una consultoría de personal ejecutivo, conocido como cazatalentos, para seleccionar a los consejeros independientes que tiene pendientes de nombrar la compañía.
“El consejo de administración actuará bajo el criterio de que los consejeros dominicales e independientes representen una amplia mayoría del consejo y que el número de consejeros ejecutivos sea el mínimo necesario, atendida la complejidad de la sociedad y el porcentaje de participación de los consejeros ejecutivos en el capital de la sociedad”, señala el reglamento. Y añade: “Con el fin de establecer un equilibrio razonable entre los consejeros dominicales y los consejeros independientes, el consejo de administración atenderá a la estructura del accionariado de la sociedad, considerando en términos absolutos y comparativos la importancia de las participaciones accionariales, así como el grado de permanencia y de vinculación estratégica con la sociedad de sus titulares”. La literalidad del reglamento deja abierta la puerta para que el actual consejo dominado por los nuevos accionistas de la SEPI, SAPA y Amber puedan determinar el número de consejeros independientes. Pero Murtra dijo en la entrevista: “Creo en la proporcionalidad. Claro que tiene que haber al menos la mitad (o el 50%) de independientes. Vamos a cumplir estrictamente todas las recomendaciones de buen gobierno”.
Silvia Iranzo, secretaria de Estado de Comercio en la segunda legislatura de José Luis Rodríguez Zapatero, fue nombrada consejera independiente de Indra en 2017, cuando Fernando Abril-Martorell ocupaba la presidencia de la empresa. Actualmente, la consejera presidía la Comisión de Sostenibilidad del grupo. Licenciada en Ciencias Económicas y Empresariales y Técnico Comercial y Economista del Estado desde 1987, es consejera del Instituto de Consejeros y Administradores y recientemente ha sido propuesta para formar parte del consejo de Técnicas Reunidas.
Por su parte, la vicepresidenta primera del Gobierno, Nadia Calviño, aseguró este lunes en relación con la situación en la empresa Indra que no tiene “nada que comentar sobre movimientos corporativos que tienen que ver con la gobernanza”, y recalcó que el interés del Gobierno solo es “reforzar a esta sociedad y su funcionamiento”.
Las acciones de Indra cerraron la sesión de este lunes con un repunte del 2,55%, hasta a 8,86 por título. El alza se produce tras la caída del 14,76% que registró el pasado viernes, marcando mínimos anuales y su peor registro desde julio pasado.
24 Noviembre 2022
PRISA Y EL GOBIERNO, ANTE LA COMPETENCIA: NORMALIDAD
LA MANIPULACIÓN DE LA PRENSA en el debate político ha regresado una vez más a España, y ahora el arma arrojadiza empleada por el presidente del Gobierno ha sido una portada de EL MUNDO en la que se informaba de las peticiones de los barones del PP a Núñez Feijóo para que fuese duro y explícito con Pedro Sánchez en el debate en el Senado. El arma se la proporcionó al presidente la cadena de radio del grupo Prisa, también editor de El País, que esa mañana había refutado la veraz y completa información de nuestro Juanma Lamet, quien había efectivamente preguntado a todos esos barones.
En resumen: un grupo mediático manipula la correcta información de un competidor para dar oxígeno al político al que apoya. Le apoya o está a su servicio, daba entender Jorge Bustos en una columna publicada en estas mismas páginas: «Yo le agradezco emocionado a Sánchez que prevenga a Feijóo de lo mucho que influimos en él, pero en el fondo de nuestro humilde corazón todos los periodistas de EL MUNDO sabemos que jamás podremos aspirar al nivel norcoreano de influencia que Sánchez tiene sobre El País».
Todo ello, ante el telón de fondo, que Bustos recordaba, de los 915 millones de euros de deuda de Prisa. Las últimas noticias al respecto son curiosas: Prisa está controlada por un fondo de inversión foráneo, el de su presidente Joseph Oughourlian, y busca dinero fresco ante la necesidad de una ampliación de capital. Mediaset es desde hace tiempo candidato a entrar en Prisa pero, como ha informado The Objective, el Gobierno debe autorizar cualquier inversión extranjera de más del 5%, y no se opone a Mediaset, pero quiere que también entre capital español que evite que, en su caso, Prisa se pase a la derecha. Y resurge la opción del Banco Santander. ¿De izquierdas o de derechas? Veremos.
Todo esto es actual e interesante, pero no novedoso. Este cronista siempre ha opinado que el cordón umbilical Prisa-PSOE se consolidó el 23-F de 1981, a ambos les fue muy bien, y alguna deriva pasajera a la derecha de Prisa no rompe esa unión.
Un periodista que llegó a El País a mediados de los 80 se quedó boquiabierto ante el silencio del periódico cuando su competidor Diario 16 estaba revelando el enorme escándalo de Filesa. Sobre todo porque varios redactores del diario de Prisa ya habían sido sus compañeros en Informaciones cuando luchaban por un periodismo libre y prodemocrático en el final del franquismo y la primera transición. Algo profundo había cambiado. El periodista se fue, y lo mismo vio con los crímenes del GAL y las revelaciones de EL MUNDO: silencio de Prisa. Por eso no hemos visto un cambio profundo en el nombramiento de la nueva directora y la línea de nuevo radicalmente progubernamental: es un retorno a las esencias de Prisa.