7 junio 1942
Es el primer frenazo de las tropas japonesas desde que iniciaron su expansión en los años treinta
Batalla de Midway: Vuelco en la Segunda Guerra Mundial en el Pacífico por el triunfo de Estados Unidos sobre Japón
Hechos
El 7.06.1942 finalizó la batalla de Midway con el triunfo de Estados Unidos de América contra Japón.
Lecturas
La batalla de Midway fue un conflicto aeronaval librado entre los días 4 y 7 de junio de 1942 en el teatro del Pacífico durante la Segunda Guerra Mundial. En ella, las fuerzas aeronavales estadounidenses detuvieron el intento japonés de invadir el atolón de Midway, donde los primeros tenían una base militar. Se libró un mes después de la batalla del Mar de Coral, cinco meses después de la conquista japonesa de la isla Wake y seis meses después del ataque a Pearl Harbor, que supuso el inicio del conflicto en el océano Pacífico entre japoneses y estadounidenses. La derrota japonesa supuso un serio obstáculo para sus planes de expansión por el resto del Pacífico y fue un «punto de inflexión» en el conjunto del conflicto. Por esto, Midway es generalmente considerada la batalla más importante de la Guerra del Pacífico.
Ambos bandos sufrieron importantes pérdidas. Los nipones perdieron cuatro de sus portaaviones, un crucero pesado y unas 240 aeronaves, lo que debilitó enormemente a la Marina Imperial Japonesa, mientras que los estadounidenses perdieron solo un portaaviones y un destructor. Estratégicamente, el resultado de la batalla implicó que la Marina Imperial japonesa perdiera la iniciativa en el Pacífico y esta pasó de manera definitiva a los estadounidenses. El ataque nipón a Midway —al igual que a Pearl Harbor— no era parte de un plan para conquistar los Estados Unidos, sino que estaba dirigido a la eliminación de las fuerzas de la flota naval estadounidense del Pacífico y de este modo evitar su intervención en la campaña japonesa en el sudeste y este de Asia.
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Batallas clave de la Segunda Guerra Mundial de 1942-1943
Europa – Batalla de Stalingrado
Norte de África – Batalla de El Aleim.
El Análisis
La batalla de Midway, librada en junio de 1942, ha marcado un punto de inflexión crucial en la guerra del Pacífico. Hasta entonces, el avance del Imperio Japonés había parecido imparable: desde Pearl Harbor hasta Filipinas, Malasia y Singapur, sus fuerzas se habían expandido con una rapidez que ponía en entredicho la capacidad de respuesta de los Aliados. Sin embargo, en las aguas del atolón de Midway, esa aparente invencibilidad se ha quebrado.
Con una combinación de inteligencia estratégica, superioridad táctica y un golpe de suerte, la Armada estadounidense —bajo el mando del almirante Chester W. Nimitz y con el crucial liderazgo del almirante Raymond Spruance en el terreno— logró hundir cuatro portaaviones japoneses, el núcleo del poder naval del Japón. Por el lado japonés, la operación estuvo liderada por el almirante Isoroku Yamamoto, arquitecto del ataque a Pearl Harbor, y por el vicealmirante Chūichi Nagumo, al mando directo de la flota de portaaviones. La pérdida no es sólo material —aunque lo fue de forma catastrófica para Tokio—, sino también simbólica: por primera vez desde el inicio de la guerra, Japón ha sido detenido, y no en tierra firme sino en su propio terreno de dominio, el mar.
Midway no significa que la guerra esté ganada, pero sí que la hegemonía japonesa ha comenzado a resquebrajarse. El panorama ya no es de expansión sin límite, sino de contención. A partir de ahora, Japón se ve obligado a defender lo conquistado, mientras Estados Unidos inicia su contraofensiva. El equilibrio se ha roto, y Midway quedará en la historia como el momento en que el sol dejó de ascender para empezar a ponerse en el Imperio del Japón.
J. F. Lamata