19 octubre 2007

Fue reemplazado por una Gestora que dirigiría la federación hasta el siguiente congreso

Joan Ignasi Pla dimite como secretario general del PSPV-PSOE denunciando una ‘operación de derribo’ por parte del Grupo PRISA

Hechos

El 18.10.2007 D. Joan Ignaci Pla anunció su dimisión como Secretario General del PSPV-PSOE.

Lecturas

El 18 de octubre de 2007 D. Joan Ignasi Pla Durà anuncia su dimisión como secretario general del PSPV. El líder de los socialistas valencianos ha aguantado sólo cinco meses después de su derrota electoral ante D. Francisco Camps Órtiz en las últimas elecciones valencianas.

Su dimisión se produce después de que tanto el periódico El País, como la cadena SER, como el canal Cuatro, los medios del Grupo PRISA, desvelaran que había realizado una reforma de su casa por 104.000 euros que no había abonado todavía amparándose en que las obras las había realizado un empresario amigo suyo.

En su dimisión el Sr. Pla se presentó como víctima de una campaña de ‘acoso y derribo’ por parte de ‘un destacado grupo mediático’ en referencia a PRISA.

El 17 de octubre de 2007 la web de la Cadena SER protestaba en su portada de que D. Joan Ignasi Pla se negaba a dimitir como secretario general del PSPV-PSOE al tiempo que publicaba encuestas que aseguraban que los internautas eran favorables a su dimisión.

El día 18 de octubre de 2008 la web de la Cadena SER anunciaba en su portada que el Sr. Pla había dimitido.

17 Octubre 2007

Una constructora adelanta el pago de obras del piso del líder de los socialistas valencianos

EL PAÍS (Tono Calleja)

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Joan Ignasi Pla reconoce que "hasta hoy no ha abonado" los 78.000 euros facturados

El grupo constructor Villegas adelantó el pago de las obras de reforma de la vivienda del secretario general de los socialistas valencianos, Joan Ignasi Pla, según reveló anoche la cadena SER. La constructora abonó a las 10 empresas encargadas de los trabajos 78.000 euros. La reforma se inició en 2006 y acabó en febrero de 2007. Seis meses después de acabada la obra, Pla reconoció: «A día de hoy yo no las he pagado». Miembros de la ejecutiva del PSPV-PSOE pidieron anoche una reunión urgente para que Pla dé explicaciones o presente su dimisión.

La reforma se efectuó en el domicilio particular del dirigente socialista en Valencia entre mediados de 2006 y comienzos de 2007 y consistió en la colocación del parqué y en la reforma de la cocina y el baño. Según la SER, Construcciones Villegas, un grupo constituido en Murcia en 1964 y que opera en la Comunidad Valenciana, se ha hecho cargo de las facturas de Pla, por importe de 78.000 euros -unos 13 millones de las antiguas pesetas-, a través de su filial Opalia del Mediterráneo, SL. Entre los trabajos abonados está una vinacoteca por 1.200 euros, una campana extractora de humos de 1.100 o una encimera de mármol por otros 6.700 euros.

El secretario general del PSPV-PSOE, Joan Ignasi Pla, en declaraciones a la emisora de radio, reconoció refiriéndose a las facturas: «Hasta el día de hoy yo no las he pagado. La empresa a la que encargué esas obras será la que habrá hecho frente a los distintos proveedores». Pla, portavoz del Grupo Socialista en las Cortes Valencianas y candidato a la presidencia de la Generalitat en los pasados comicios autonómicos, afirmó no conocer a ninguna de las dos empresas que han pagado sus facturas. También dijo desconocer el precio de la reforma: «No lo sé porque se encargó de eso mi mujer, pero la verdad es que estoy en la idea de que más de 70 o 80.000 euros seguro que no».

Según el entorno del dirigente, Pla encargó en 2006 a Jesús Arjona, responsable de la empresa Gesidova, la remodelación de su domicilio y éste subcontrató al grupo Villegas para llevarla a efecto. Estas mismas fuentes explican que lo que ha sucedido es que Villegas no ha trasladado a Gesidova las facturas seis meses después de haber acabado las obras.

José Manuel Villegas, dueño del grupo, declaró anoche que no tenía constancia de que hubiera ningún impago por parte de Pla y que el problema había surgido por el desacuerdo a la hora de facturar el beneficio industrial de la reforma de la casa del político, informa Tono Calleja.

La noticia cayó como una bomba en el seno de la formación política. Varios miembros de la Ejecutiva del PSPV-PSOE pidieron una reunión de urgencia con Pla para que dé explicaciones de lo sucedido o en caso contrario, dimita. El líder socialista mantuvo ayer una reunión con el portavoz parlamentario, Ángel Luna, para valorar la situación. Pla se mostró tranquilo y agregó que no pensaba dimitir ni convocar de urgencia a la Ejecutiva. La dirección federal del PSOE también iniciará una investigación sobre el caso.

18 Octubre 2017

El empresario que reformó el piso de Pla aspira a urbanizar en un municipio socialista

EL PAÍS (Director: Javier Moreno)

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Construcciones Villegas tiene acuerdos con Romymar, implicada en otro escándalo en 2001

El empresario al que Joan Ignasi Pla, líder de los socialistas valencianos, encargó la reforma de su vivienda opta a la adjudicación de una urbanización de 100.000 metros cuadrados en Dénia, localidad gobernada por el PSOE. Jesús Arjona, propietario de Gecydova, SL, contrató la reforma en el piso de Pla a Construcciones Villegas, firma con sede en Murcia, dedicada a la obra civil. El trabajo concluyó en mayo pasado y costó 104.000 euros, que Pla aún debe. Construcciones Villegas mantiene acuerdos con Romymar, SA. Pla fue acusado de favorecer a esta última firma en 2001.

Arjona, administrador único de Gecydova, SL, argumentó ayer que asumió por amistad el encargo del secretario general del PSPV-PSOE. «Hay confianza, y mercantilmente no hace falta contrato», señaló el empresario, que explicó que acudió a Construcciones Villegas porque conoce a la arquitecta que trabaja con esa firma en Valencia. «Al dueño de Villegas no le conozco, conozco al director de la oficina en Valencia», afirmó Jesús Arjona, que justificó el impago a Construcciones Villegas por una diferencia en la comisión por la coordinación de los trabajos. El empresario indicó que Pla se ofreció a abonar parte de la reforma en diciembre y que le dijo que lo dejaran para más adelante.

Las obras se iniciaron en el último trimestre de 2006 y concluyeron en marzo de 2007, aunque una fuga de agua que afectó a la vivienda situada debajo de la de Pla obligó a retomar las obras, que concluyeron en mayo. Pla instó ayer a Arjona, tras destaparse el escándalo, a liquidar la cuenta pendiente.

Arjona, que trabajó durante décadas en el departamento de contrataciones de Dragados en Valencia, creó en 2004 la firma Gecydova, SL, dedicada a la consultoría y la gestión de obras. Desde entonces trabaja para promotores y constructores y ha constituido otras firmas que están inactivas a la espera de encontrar la oportunidad de entrar en segmentos como los puertos deportivos, la prestación de servicios o la gestión de residuos.

El empresario presentó una oferta hace aproximadamente ocho meses a un PAI (Programa de Actuación Integrada) en Dénia, municipio donde Pla tiene su segunda residencia, para construir medio centenar de viviendas protegidas. Arjona manifestó que compite con otra oferta presentada y que el PAI no está previsto que se adjudique hasta dentro de varios meses.

Arjona arropó ayer al secretario del PSPV cuando compareció en el partido para dar explicaciones sobre el «supuesto trato de favor». Pla narró que decidió remozar su piso tras 14 años de permanencia en él y para ello recurrió a una persona conocida desde hace años. El dirigente socialista solicitó una licencia de obras menores por importe de 4.500 euros, que se concedió el 13 de septiembre de 2006. La reforma se ejecutó, según Pla, entre septiembre de 2006 y febrero de 2007. «Antes de la campaña electoral le pregunté a Jesús si tenía que anticiparle algo», narró Pla, y Arjona le respondió que no, porque «había una desavenencia con las proveedoras». Esa es la versión definitiva de Pla sobre lo sucedido, que el dirigente socialista no acertó a defender el pasado martes. Tras reconocer que no había pagado la reforma, fuentes de su entorno justificaron el impago porque Construcciones Villegas no había pasado las facturas a Gecydova. Horas más tarde, el PSPV argumentó que la demora había estado motivada por complicaciones en la reforma. «Se trata de una noticia montada en falso que no sólo afecta a mi dignidad si no a todas las personas que represento», sentenció Pla, que aseguró que no piensa dimitir.

Sin contrato

Construcciones Villegas reconoció ayer que aceptó el encargo como compromiso y sin ningún tipo de contrato. «Nosotros habitualmente no hacemos obras a particulares», dijeron, informa Tono Calleja. Las mismas fuentes señalaron que, como la reforma se complicó, «se decidió que el precio se ajustara después de las elecciones porque no era una gran cantidad». «Nosotros pagamos 33.000 euros y queremos cobrar 39.000 euros a Gecydova. La diferencia entre lo que ellos nos ofrecían y lo que queremos es de 5.000 euros, y por eso no nos hemos dado prisa en cobrar», indicaron. «Nadie de la dirección de Construcciones Villegas ha hablado nunca con Pla, por lo que no tenemos nada que facturarle», sentenciaron.

Construcciones Villegas ha presentado ofertas a varias obras públicas de la Generalitat en compañía de la constructora Romymar, SA. Pla fue acusado de presionar para intentar favorecer a Romymar en la adjudicación de una obra en 2001. El ex alcalde socialista de Alaquàs Adrià Hernández remitió dos cartas al entonces secretario de Organización del PSOE, Ciprià Ciscar, denunciando la supuesta presión de Pla. Nada se probó.

El dirigente socialista prepara su dimisión

En contra de lo que dijo ayer en una comparecencia pública, Pla presentará esta mañana su dimisión como secretario general de los socialistas valencianos tras reunirse anoche con su Ejecutiva.El dirigente aseguró a las diez de la mañana que no pensaba abandonar por «una noticia montada en falso» e incluso insinuó que los ataques podían venir de dentro de su partido. «Tengo la sensación de que hay gente que quiere que me vaya, en contra de lo que han dicho los órganos de gobierno del partido». El político recordó que el 80% del PSPV le ratificó el pasado julio en el puesto, descartando un congreso extraordinario para relevarle de la dirección antes de las elecciones generales, como pidió un sector del partido.Poco antes, el secretario de Organización del PSOE, José Blanco, le enviaba un recado desde Madrid pidiéndole que pague lo que debe y que justifique de forma convincente lo sucedido antes de que el partido tome una decisión.La vicepresidenta del Gobierno, María Teresa Fernández de la Vega, de visita por los pueblos de Alicante afectados por las inundaciones, hizo por la tarde una breve declaración, pero no admitió preguntas. Hoy tiene prevista una rueda de prensa.

18 Octubre 2007

Pla o a moro muerto gran lanzada

EL MUNDO (Director: Pedro J. Ramírez)

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A cinco meses de las elecciones, la sombra del escándalo y el rumor de una conspiración interna lastran al PSPV-PSOE. Su secretario general, Joan Ignasi Pla, está dejando de ser un líder amortizado en las urnas para convertirse en un serio inconveniente para la candidatura que Fernández de la Vega tiene encomendada encabezar en la Comunidad Valenciana.

Pla protagoniza una confusa polémica, a cuenta de un supuesto trato de favor por parte de una constructora, en la que las peores conjeturas sobre su honestidad personal y pública comparecen de la mano del más burdo navajeo orgánico. Pla ha sido acusado de haber dejado que una empresa con importantes intereses en la Comunidad Valenciana le pagara diversas obras de reforma en su domicilio, entre el verano de 2006 y marzo de este año, por un valor de entre 78.000 y 104.000 euros.

Como carga de la prueba, una decidida e intencionada campaña mediática y el relajo de un político que admite no haber pagado aún recibo alguno y que acusa a «gente» de su partido de urdir un «montaje» para forzar su dimisión. En el PSOE nadie duda de que -más allá de que a Pla le hayan puesto o no piso- en la controversia subyace una intentona para forzar la imposición de una gestora y controlar así los resortes del partido con vistas al próximo congreso de renovación. Está en entredicho no sólo la credibilidad de un político vapuleado por el electorado desde que en 2000 se convirtió en el vicario de Zapatero, sino también la imagen de un PSPV-PSOE incapaz de seducir a los votantes y cautivo de la cultura de las familias, de las vendettas y de los tutelajes de Madrid.

En puridad, unas facturas impagadas ni prueban nada ni son constitutivas de delito. Pero la polémica es lo suficiente grave como para que Pla -que como la mujer del César habría de parecer honrado además de serlo- tome de una vez la decisión que debió adoptar tras el descalabro del PSPV-PSOE el 27-M y dimita; una decisión que podría adoptar hoy mismo. Sea como fuere, Blanco tiene un complicado papel en el trance de acallar un escándalo que pone de relieve tanto la falta de liderazgo en el PSPV-PSOE, como su propia incapacidad para contener la crisis interna en esta federación a un nivel de baja intensidad. O impone una gestora cediendo a la posible conspiración, o manda a la vicepresidenta del Gobierno a batirse el cobre con los elementos de su propio partido. El caso Pla pone en valor aquello de que a moro muerto, gran lanzada. Así es como se remata a un cadáver político.

19 Octubre 2007

Dimisión inevitable

EL PAÍS (Director: Javier Moreno)

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El secretario general de los socialistas valencianos, Joan Ignasi Pla, ha presentado su dimisión al conocerse la noticia de que la constructora Villegas realizó unas obras de reforma en su vivienda particular en las que podría haber recibido un trato de favor. Hasta el momento de su dimisión, Pla no había podido acreditar el pago de los trabajos, pese a que la empresa los dio por finalizados el pasado mes de mayo.

La renuncia del líder socialista resultaba inevitable. Basta ver la situación que atraviesa la Comunidad Valenciana como consecuencia de las últimas inundaciones, durante las que se han hecho patentes los efectos devastadores de una planificación urbanística poco escrupulosa y en la que han primado los intereses del sector inmobiliario y de la construcción. La eventualidad de un trato privilegiado al principal dirigente de uno de los grandes partidos políticos de la Comunidad por parte de una empresa del sector, inaceptable en cualquier contexto, se convertía ahora en un problema insalvable para la credibilidad de la fuerza que representa.

Antes de formalizar su decisión, Pla solicitó y no recibió el respaldo de su propia Ejecutiva, lo que hacía difícil su continuidad al frente de los socialistas valencianos. Se reabre así la situación de crisis que ha marcado la historia del PSPV-PSOE y que, en esta ocasión, los dirigentes socialistas tratarán de resolver a través de una comisión gestora. La posibilidad de un Congreso extraordinario, aunque contemplada en los primeros momentos, parecía inviable si se tomaba en consideración la proximidad de las elecciones generales y la necesidad para el Partido Socialista de no seguir cediendo terreno al Partido Popular en la Comunidad Valenciana.

El ya ex secretario general ha señalado a su entorno político como el posible causante último de la dimisión, y se ha considerado víctima de una cacería. Es tanto como reconocer que la estabilidad del partido que dirigió hasta ayer mismo era tan sólo aparente, con luchas internas en las que, según sus propias declaraciones, no se dudaría en comprometer la posición de su máximo responsable. Joan Ignasi Pla ha dirigido desde 2000 el socialismo valenciano, históricamente una de las federaciones más conflictivas del PSOE. Si bien el balance hacia el interior del partido parecía apuntar a una precaria aunque innegable pacificación, los resultados electorales no contribuyeron a reforzar su liderazgo.

Durante sus siete años de mandato, Pla no logró cosechar ninguna victoria ante el PP, que ha logrado hacer de la Comunidad Valenciana una de sus principales reservas de voto. Pero habla largamente en su favor la diligencia con que ha asumido responsabilidades políticas y la escasa entidad del asunto que ha enturbiado su carrera, en contraste con el pésimo ejemplo de otros altos cargos del PP -sin ir muy lejos, el presidente de este partido y de la Diputación de Castellón, Carlos Fabra- que no dimiten ni siquiera cuando ya se hallan imputados por graves delitos de corrupción.