20 febrero 2013

El estudio aún no ha pagado a sus actores por películas como 'Lincoln', 'El Hobbit' o 'Tintín'

Quiebra Sonoblok el histórico estudio de doblaje de Barcelona

Hechos

El 20.02.2013 se hizo público que la compañía Sonoblok entraba en suspensión de pagos.

Lecturas

LA DIRECCIÓN DE LA EMPRESA REEMPLAZADA POR UN ADMINISTRADOR CONCURSAL

El Consejo de Administración presidido por D. Roger Sangenis Bermejo y con D. Josep María Pedrós Cuyas como secretario, los herederos de las dos familais fundadoras fue suprimido el 28.03.2013 según consta en el Registro Mercantil y reemplazado por un administrador concursal.

Cierra sus puertas otra empresa histórica del sector audiovisual catalán. Sonoblok ha presentado concurso voluntario de acreedores en el Juzgado Mecantil número 7 de Barcelona tras años en números rojos y ante el recorte en la dotación de Televisió de Catalunya (TVC) al doblaje de películas y series al catalán.

El concurso afecta a tres empresas: la sociedad anónoma Sonoblok, que actúa como hólding, Sonoblok Audiovisual y Sonomadrid Audiovisual. Las tres sociedades suman un pasivo de nueve millones, contraído principalmente con Bankia y Unnim -ahora integrada en BBVA-. Las entidades concedieron préstamos a Sonoblok para construir sus estudios de doblaje en Barcelona y Madrid.

Además de las dos entidades, entre los acreedores se encuentran algunos de los principales actores catalanes, como D. Jordi Boixaderas, que dobla a actores estadounidense como Russell Crowe y Daniel Craig; Daniel García, el doblador de Brad Pitt; D. Jordi Brau, que presta su voz a Tom Cruise, y D. Sergio Zamora, que dobla a Keanu Reeves, Colin Farrell y Matthew McConaughey.

Sonoblok es una compañía de capital familiar, controlada en la actualidad por miembros de la segunda generación de las familias Sangenís y Pedrós. Ha doblado al español y al catalán títulos como Titanic, la última entrega de Batman, y las recientemente estrenadas Lincoln, La Vida de Pi y El Hobbit. También ha participado en la postproducción de Lo Imposible, Eva y Pa Negre.

Según el administrador concursal de la empresa, D. Josep Lluís Jori, de Compás Concursal, la progresiva caída de ingresos registrada en los últimos años ha precipitado la presentación del concurso de acreedores, ya que la compañía no podía hacer frente a la devolución de las hipotecas. Cerró 2012 con una cifra de negocio de 1,5 millones de euros, frente a los cinco millones que ingresaba en 2008. En este mismo periodo, sus pérdidas han pasado de 55.000 euros a 585.000 euros.

La firma llegó a emplear a unos 50 trabajadores y cuenta actualmente con una plantilla de 22 personas. Las previsiones de los dueños pasan por presentar un expediente de extinción para todos los trabajadores y vender los estudios de Madrid y Barcelona.

Sector

Sonoblok es una de las empresas audiovisuales que se adjudicaron en 2012 los contratos de doblaje al catalán de Televisió de Catalunya para un periodo de cuatro años. En concreto, se adjudicó tareas de doblaje por 3,2 millones de euros. La principal beneficiaria fue Soundub, controlada en un 70% por Catalana d’Iniciatives. Esta empresa nació en 2007 como un proyecto de la sociedad de capital riesgo de la Generalitat y el Ayuntamiento de Barcelona para liderar un proceso de concentración en el sector catalán de las empresas de doblaje. Otras firmas del sector son International Sound Studios y Sonygraf.

Los propietarios de la empresa plantean el cierre y la venta de sus estudios de Barcelona y Madrid

09 Febrero 2013

Cine enmudecido

Márius Serra

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Los defensores de la V.O., entre los que me cuento, no podemos obviar el papel sociolingüístico del doblaje

La misma semana que una película muda gana el Gaudí a la mejor obra en lengua catalana me entero del cierre inminente de los estudios de doblaje Sonoblok. Desde 1969, unas tres mil pelis y más de diez mil episodios televisivos han cobrado voz en Sonoblok, doblados al castellano o al catalán. La prensa cultural que ha llenado páginas de diario con el cierre de las librerías Catalònia, Robafaves o Proa no chista sobre Sonoblok. ¿Por qué? Una indiferencia relacionada con los fantasmas que enturbian la percepción de la cultura. En 1987, cuando Joan Manuel Serrat sacó la canción Los fantasmas del Roxy, yo traducía series para Sonoblok. Los estudios estaban en el número 84 de la calle Roger de Flor. El éxito de TV3 añadía un punto de velocidad al movimiento uniformemente acelerado por la zanahoria olímpica. Los fantasmas de la canción de Serrat eran de otro tipo. Antes que en 1977 Sonoblok se instalase allí, el edificio había sido convento y fábrica de hielo. Algún técnico veterano hablaba del fantasma de una monja que perturbaba las grabaciones y las salas de doblaje eran las antiguas celdas, luego cámaras de hielo, a uno y otro lado de un largo corredor. Hacía mucho frío. Tal vez por eso en el 2002 la zanahoriecilla del Fòrum de les Cultures llevó a Sonoblok a su sede actual del 22@, con unas instalaciones en la calle Perú que debieron costar un ídem y que inauguró el alcalde Clos con gran prosopopeya.

Sonoblok es historia viva y los fantasmas del Roxy una minucia al lado de los suyos. Rovira-Beleta dobló allí al catalán La dama del alba o Crónica sentimental en rojo. Clásicos como Gone with the wind, Casablanca o E.T. aprendieron a hablar catalán en can Sonoblok. También series como Dallas, Perry Mason o Neighbours. En los últimos tiempos, muchas de las pelis que se han estrenado en catalán también han salido de ahí: series como Harry Potter o El Senyor dels Anells, El Hòbbit, El discurs del rei, El pacient anglès… Los defensores de la V.O., entre los que me cuento, no podemos obviar la dimensión sociolingüística del doblaje. Ver pelis en versión original es útil para aprender idiomas, ergo verlas dobladas al catalán lo es para aprender catalán. Sería absurdo que renunciásemos a ello en favor de la subtitulación y en cambio se mantuviera el doblaje al castellano. O todos mudos o todos charlatanes.

En 1987 Serrat cantaba «sobre las ruinas del Roxy juega al Palé el capital» en referencia a la oficina del Banco Central en la que se transformó el cine. Tal vez ahora mismo Serrat ya prepara una canción en catalán sobre las ruinas de la Catalònia y el McDonalds que construirán (por Sant Jordi me gustaría firmar libros en este McDonalds). Pero cuando Sonoblok se fue a jugar al Palé al 22@, en Roger de Flor se instaló una peluquería china. Veo en la red que en el 2009 la investigaron porque ofrecía servicios con «final feliz». Es una metáfora antonímica del final de Sonoblok.

"Padrós hijo no ha aprendido nada de su padre, el perfecto empresario"

Joaquín Díaz

Memorias

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Para los supersticiosos, este año 2013 empieza mal. Cierra Sonoblok, estudio puntero en España. Estudio insignia de Barcelona. Hace suspensión de pagos. Dejo de cobrar las dos últimas películas El Hobbit y Lincoln. Se esperaba un gran revuelo en la profesión, pero la gente se lo toma con filosofía, dicen que se veía venir. Padrós hijo no ha aprendido nada de su padre, el perfecto empresario que elevó a Sonoblok a la cabeza de los estudios de doblaje. Quedan en Barcelona los estudios Soundstudio, de relativo nue- vo cuño, Soundtrack, 103, Sonygraf, Seimar y Dubbing Films. Por cierto, una de las pocas buenas noticias es la homologación, por parte de TV3, del estudio Dubbing, de mi hija Azucena y Gerard. Estudio que ha alcanzado el segundo puesto en la lista de aceptados por TV3.

Sin embargo, como decía, el doblaje en castellano en Barcelona, y formato 35 mm se extingue como una vela. Muchos actores se van a Madrid. Allí no ha menguado tanto el trabajo. Otros se dedican más a la televisión, al teatro, al cine (poco). En realidad, de donde procedían la mayoría de actores que se pasaron al doblaje porque estaba mejor remunerado. Esto es como el final de una película. Como el final de un ciclo. El final de una época dorada de una profesión, que ha sido por muchos igno- rada, por otros criticada, y por una minoría, admirada. Una profesión que, a lo largo de los años, ha aportado un mosaico de voces que hacían comprensible, con el idioma, la expresión de los grandes artistas de Hollywood. Las estrellas del séptimo arte también han ido desapare- ciendo poco a poco. Como en las películas, se acerca la palabra “FIN” de aquellos años de esplendor. He vivido en el cénit de sus dulces años. He gozado de sus grandes éxitos. Me siento satisfecho de haber dedicado la mayor parte de mi vida a una profesión que amo por encima de todo, el doblaje o sincronización de películas.

La “película” con este nombre tiene su fin. El cine en película y fotogramas de celuloide se acaba. La materia básica de que está hecha la película, el celuloide, va a de- jar de fabricarse. ¿Cómo se conservarán las producciones futuras? Según dicen, se guardarán en un dicso duro. Todo el cine será digital. Las clásicas “latas” donde se guardan actualmente las bobinas, desaparecerán. De m mento, aún puedo hacer uso del título de estas, mis memorias artísticas: Una voz en millones de fotogramas. Ahora puedo añadir… “en películas de celuloide”. Es imposible contarlos pero, sin duda, son millones los fotogramas en donde mi voz está grabada. Películas donde mi rol era el de protagonista, donde doblaba a personajes secundarios, o donde solo ponía voz a cuatro frases o ambientes. Sin duda, son millones. Llevo una cuenta bastante exacta de las películas que he doblado a lo largo de mi profesión. Se acercan a las cuatro mil.