22 junio 2018

Tras desmembrarse Audiovisual Sport, Telefónica se ha convertido en el principal rival de Mediapro por los derechos del fútbol

Telefónica gana a Mediapro en la puja por la gestión de los derechos de la Liga de Fútbol para el periodo 2019-2022 en una competencia en la que no se han producido hostilidades entre los rivales

Hechos

  • En junio de 2018 se hizo pública quien gestionaría los derechos de la Liga Profesional de Fútbol de 2009-2020, 2020-2021 y 2021-2022.

Lecturas

El 26 de junio de 2018 La Liga hace público la empresa que explotará los derechos deportivos en las temporadas 2019-2020, 2020-2021 y 2021-2022, que será Movistar, propiedad del Grupo Telefónica, la multinacional presidida por D. José María Álvarez-Pallete cuya oferta, 2.940 millones de euros, superó la oferta de Mediapro, la productora fundada por D. Jaume Roures Llop y cuyo principal accionista ahora es el fondo de inversión chino Orient Hontai Capital, que ha sido su titular en las temporadas pasadas.

26 Junio 2018

Telefónica arrebata la Liga a Mediapro con 2.940 millones por tres años

Javier García Ropero

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El fútbol de pago en Primera División cambiará de manos a partir del verano de 2019. Telefónica se ha hecho con los principales paquetes de emisión de los partidos de la competición doméstica más importante para el trienio entre 2019 y 2022.

Según ha desvelado esta noche la patronal de los clubes, LaLiga, Telefónica ha adquirido los dos lotes principales para la emisión residencial de los encuentros de pago: el lote 4, que da derecho al conocido como Partidazo y que ya emite en la actualidad; y el 5, que permite la emisión de ocho partidos de Primera cada semana en exclusiva. La operadora desembolsará 980 millones de euros al año, es decir, 2.940 millones por todo el periodo. Hasta el año que viene estos ocho encuentros son propiedad de Mediapro y se emiten a través de su canal Bein LaLiga, que está incluido en la oferta de Movistar+ tras un acuerdo de Telefónica con la productora catalana.

A partir de 2019, será la compañía de telecomunicaciones la que diseñe ese canal con sus medios técnicos y humanos, en lugar de subcontratarlo. Previsiblemente los ocho partidos del lote 5 se agruparán en un nuevo canal de Movistar+, mientras que el del lote 4 seguirá como hasta ahora, en el canal Movistar Partidazo. También permitirá a otros operadores, como Vodafone u Orange, acceder a estos contenidos a un precio tasado.

Por su parte Mediapro, que ya se hizo con los derechos de la Liga de Campeones a partir de esta próxima temporada, sí ha adquirido los derechos de emisión de la Primera División en bares, así como con los resúmenes en abierto y en exclusiva. Hay que recordar que la productora catalana fundada por Jaume Roures se hizo con los derechos de la Champions para las próximas tres temporadas por una cifra cercana a los 1.200 millones de euros, y todavía no ha encontrado plataforma para su emisión a partir de agosto, aunque las negociaciones con las distintos operadores interesados se mantienen.

Estos lotes, junto a los comprados por Telefónica, suman 3.421 millones de euros para todo el trienio, un 15% más que en la subasta anterior, restando cuatro por vender. Entre ellos, el del partido en abierto.

En cambio, el precio que pagará Telefónica cada año, 980 millones, no solo no aumenta sino que está ligeramente por debajo de lo que debe abonar por la temporada 2018-2019, aún correspondiente al anterior trienio. En ese periodo los precios aumentan de una temporada a otra, algo que no sucederá desde 2019. Desde la operadora indican incluso que la deflación es superior al 5%, ya que con el nuevo contrato Telefónica será la que gestione los ingresos publicitarios.

«Telefónica siempre ha defendido que los partidos de la LFP son un contenido muy atractivo, pero que su adquisición debía realizarse al precio apropiado. La oferta realizada por la compañía cumple estos parámetros», ha explicado la compañía en un comunicado.

27 Junio 2018

TELEFÓNICA APARTA A LA ‘MEDIAPRO CHINA’ EN LA PUJA POR EL FÚTBOL

Eduardo Fernández

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El fútbol ya no interesa como antes, el precio por emitirlo está inflado y Mediapro siempre se impone en la puja por los derechos. La última adjudicación de la Liga contradice taxativamente esas máximas, repetidas como un mantra por los operadores televisivos en los tiempos recientes. Esta vez, Telefónica se ha llevado los derechos por 2.940 millones, a razón de 980 por cada una de las tres temporadas subastadas, de 2019/2020 a 2021/2022. Falta decidir qué ocurrirá con el partido en abierto, Segunda División y Copa del Rey.

A pesar de que Telefónica había criticado el alto precio de la última puja –2.650 millones–, la suma ofrecida por la teleco ha resultado mayor que ésa y también que la nueva oferta de Mediapro, grupo liderado por Jaume Roures y precisamente especializado en la comercialización de derechos deportivos –alrededor de un 30% de su facturación–.

La productora se tendrá que conformar con los lotes correspondientes a los resúmenes y las emisiones en establecimientos públicos, además de los derechos internacionales, que se han renovado para las próximos cinco cursos. El equipo de Roures, tan acostumbrado a ganar, ha perdido este mismo mes otra subasta crucial de derechos de competición regular, la relativa a tres temporadas de la serie A del fútbol italiano. Desde que a principios de este año entrara en Mediapro el fondo chino Orient Hontai Capital, que ha adquirido un 53,5% del grupo con sede en Barcelona, los derechos se le resisten. Los socios fundadores Jaume Roures y Tatxo Benet, que conservan participaciones de un 12% cada uno, mantienen asimismo la dirección de la productora, en la que ayer se consumó el desembarco del nuevo socio asiático. A finales de mayo, Mediapro adquirió la mayor parte de los derechos de la Liga francesa para el período de 2020 a 2024, pero en las últimas semanas ha visto torcerse la expansión internacional a la que aspira Orient Hontai Capital, primero en Italia y esta semana en España.

El montante de la operación de Telefónica por el fútbol de pago supone un incremento con respecto a la última subasta española, en la que la teleco sólo obtuvo el llamado partidazo. En ese escenario, se vio obligada a negociar a posteriori con la adjudicataria del grueso de la competición regular, que entonces fue Mediapro. Los directivos de Telefónica, empezando por su presidente, José María Álvarez-Pallete, han denunciado en los últimos meses una inflación en el mercado televisivo del deporte, por lo que reivindicaban una bajada del precio. Hasta ahí el discurso, pero la práctica difiere de la teoría: Movistar ha superado el precio de la anterior puja. Eso sí, por fin podrá revalorizar sus canales y disfrutar del retorno publicitario derivado de la explotación de los derechos.

A pesar de que Movistar procede de la compra de Canal+, Telefónica se ha topado con numerosas dificultades en su intento de dar continuidad al sello futbolístico que dotaba de identidad a esa plataforma. Mediapro ha tenido buena parte de la responsabilidad, al dominar las pujas de los últimos años y luego negociar con las distintas plataformas derrotadas. La guerra del fútbol que antaño libraban Prisa y Mediapro parece haberse reactivado, ahora entre esta última y Telefónica, aunque sin tribunales de por medio. Así, en 2016 y tras un prolongado tira y afloja, Movistar consintió pagar 2.400 millones a Mediapro por incluir durante tres temporadas los canales beIN La Liga, con la competición regular, y beIN Sports, que emite Europa League y Champions. A partir del curso 2019/2020 y en virtud de la última adjudicación, la teleco podrá dar uso y valor a sus propios canales.

Mediapro aún controla, eso sí, los derechos de la Champions para 2018/19, 2019/20 y 2020/21, si bien Telefónica ha visto aliviada la presión para negociar con la productora la emisión del fútbol europeo, ya que contará con la Liga. De hecho, la teleco ha cerrado un acuerdo para integrar Netflix en Movistar, decisión a la que se había resistido al entender que ambas rivalizaban en la producción de contenidos. Sin tantas reticencias, otros operadores sí habían alcanzado antes pactos similares, como Vodafone, Orange y Euskaltel.

Según fuentes cercanas a la negociación, en el pasado se pagó, en cifras aproximadas, 700 millones por la temporada 2016/2017 de Liga, 900 por la 2017/2018 y 1.000 por la 2018/2019, hasta un total de 2.650 millones. En la nueva puja, Telefónica presume de que el precio no sube con respecto al último curso, aunque la bajada sólo se produce con respecto a 2018/2019; paga 980 millones por cada una de las tres nuevas temporadas, hasta 2.940 millones. Tal y como expone la compañía, el precio por curso se cifra ahora por debajo del último adjudicado –1.000 millones–, «lo que supone una ligera deflación».

Para Telefónica, la Liga cuesta 2.940 millones; devolverle el golpe a Mediapro… no tiene precio.