24 julio 1952
Se convierte en el más joven de todos los directores de periódico en España
Antonio Bruned Mompeón, nieto del fundador, asume el cargo de director-propietario del periódico EL HERALDO DE ARAGÓN
Hechos
El 24.07.1952 El periódico EL HERALDO DE ARAGÓN anunció que D. Antonio Bruned Mompeón era el nuevo director del periódico.
Lecturas
Asume la dirección del periódico privado El Heraldo de Aragón D. Antonio Bruned Mompeón, nieto del forjador del diario D. Antonio Mompeón Motos (editor hasta su fallecimiento en 1940). Bruned Mompeón, reemplaza en la dirección a D. José Morales López. A los 21 años se convierte en ese momento en el director de periódico más joven de España.
El mismo día D. Antonio Olmedo es designado director del periódico privado ABC de Sevilla y D. Fernando García de Albéniz director de El Pensamiento Alavés.
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El mandato de D. Antonio Bruned Mompeón se extenderá hasta el año 2000, siendo uno de los directores de periódicos con un mandato más largo en la historia periodística española.
24 Julio 1952
Antonio Bruned Mompeón, nuevo director de HERALDO
Desde hoy dirige este periódico D. Antonio Bruned Mompeón. Es uno de los periodistas más jóvenes de España. Es, desde luego, el más joven Director de un diario español. Todavía está reciente la tinta del carnet profesional que ganó después de seguir brillantemente los cursillos de la Escuela Oficial de Periodistas. Llega brillantemente los cursillos de la Escuela Oficial de Periodistas. Llega, pues, o este difícil cargo sin una larga historia profesional. Pero tras, apresurémonos a decirlo, valores más importante y esperanzadores y tan entrañablemente propios como que están inscritos en la misma historia de esta Casa y metidos en su propia sangre.
Don Antonio Bruned Mompeón es nieto de don Antonio Mompeón Motos uno de los más ilustres periodistas aragoneses y artífice de este HERALDO DE ARAGÓN que tanto representa en la vida aragonesa y tanto cuenta en la Prensa de España. Nació acunado por el ruido de las linotipias y se educó en un ambiente familiar donde los problemas del periódico eran clima y atmósfera. Y los problemas íntimamente enlazados con este ambiente familiar eran los que la ciudad y los de la región y los de la Patria grande. Sin tener, pues, una historia escrita de periodista viejo, ¿quién podría negarle a D. Antonio Bruned Mompeón una cuajada veteronia en nuestras preocupaciones?
Es, por lo tanto, un espíritu forjad en los deberes que ahora asume y ninguna responsabilidad ha de afrontar ahora que sea para él totalmente nueva. Tiene, además el caudal de ejemplos preclaros que vienen de su casta. La tradición creada por su abuelo y celosamente guardada en el ámbito familiar que se puede sintetizar en el doble e indisoluble lema de Religión y Patria, es sustancia de este diario y será para su nuevo Director manantial de fe, esfuerzo e inspiración.
Para los que aquí trabajamos D. Antonio Bruned Mompeón no es un desconocido ni siquiera algo nuevo. Los más viejos lo hemos visto nacer. Y todos lo hemos tenido como compañero de nuestras tareas desde que hace más de un año terminó sus estudios en la Escuela Oficial de Periodismo. Es inteligente y ha sabido hacerse una sólida cultura. Y es en su espléndida juventud un excelente ejemplar humano. Como su ilustre abuelo, al que tanto recuerda físicamente, reparte con generosidad el don de la simpatía y tiene tantos amigos como compañeros de trabajo.
Para todos nosotros es una jubilosa noticia la de su nombramiento. Nuestra alegría es mayor porque se confunde con la que inunda hoy a sus familiares, tan entrañables para todos cuantos colaboramos en la confección de HERALDO DE ARAGÓN. Al dar la bienvenida como Director a D. Antonio Bruned Mompeón, nos volvemos hacia la excelentísima señora doña Josefina de No, viuda de Mompeón, que rige esta casa y a los señores de Bruned Mompeón.
EL HERALDO DE ARAGÓN
El Análisis
Cuando en 1952 Antonio Bruned Mompeón asumió la dirección de Heraldo de Aragón, pocos podían imaginar que su nombre quedaría vinculado durante casi medio siglo a la historia viva de la prensa regional y nacional. Nieto del fundador Antonio Mompeón Motos, Bruned tomaría las riendas del periódico familiar en plena dictadura franquista, sorteando las rigideces de la censura y el férreo control del régimen, para mantener viva una cabecera histórica que desde 1895 había sido el referente periodístico de Zaragoza y de Aragón. Su habilidad fue precisamente esa: conservar la línea editorial en momentos de represión, sin renunciar del todo al espíritu informativo del diario, incluso cuando las libertades eran apenas un recuerdo.
A lo largo de casi cinco décadas, Antonio Bruned fue testigo privilegiado —y cronista— de la evolución política y social de España: desde el franquismo más rígido de los cincuenta, pasando por la apertura controlada del desarrollismo en los sesenta, la incertidumbre de la Transición, la restauración monárquica, la consolidación democrática con la UCD, el largo ciclo socialista de Felipe González y el inicio del giro conservador con José María Aznar. Bruned logró algo poco común en el periodismo español: permanecer, adaptarse y dirigir con coherencia, sin estridencias, enfocando buena parte de la atención informativa en lo que siempre fue su razón de ser: Aragón.
Su salida en el año 2000, marcada más por disputas familiares entre las ramas Bruned y Yarza que por una voluntad propia de retirada, no empaña un legado de extraordinaria longevidad y estabilidad en un mundo como el de la prensa, sujeto a vaivenes tan rápidos como imprevisibles. Antonio Bruned Mompeón fue mucho más que un director de periódico: fue un símbolo de continuidad, de apego a la región y de periodismo perseverante. En tiempos en los que la dirección de un diario rara vez supera una década, su permanencia durante casi cincuenta años es, por sí sola, una lección de constancia y visión.
J. F. Lamata