23 noviembre 1989

Las escuelas de doblaje formadas por profesionales reconocen que no quieren publicidad "esto es un grupo familiar"

Demoledora crítica de Salvador Arias a la situación del doblaje: «Los que están arriba forman una mafia que cierra el paso a los nuevos»

Hechos

El 23.11.1989 en declaraciones al periodista D. Carlos Alsina reproducidas en prensa este hizo una valoración sobre la situación de la profesión.

Lecturas

En el año 1989 todo el sector audiovisual estaba cambiando principalmente por la irrupción de las televisiones autonómicas y de las televisiones privadas. En ese contexto el periodista D. Carlos Alsina decidió realizar para Prensa Española S. A. un reportaje sobre la situación del doblaje en España.

El punto más inquietante del reportaje es sobre la dificultad de que en el sector entren ‘nuevas voces’. De acuerdo al informe del Sr. Alsina hasta 1988 en Madrid, donde había hasta doce estudios de doblaje, algunos más históricos (Tecnison, Cinearte, Sincronia…) y otros más recientes (Abaira), pero en cambio sólo había una escuela profesional formada por actores en activo. La escuela y sus responsables declinan dar sus nombres o las señas de la escuela de doblaje aclarando que sólo puede ser conocida desde dentro del gremio (principalmente para familiares o amigos de profesionales ya activos): «No queremos publicidad, ni tampoco más alumnos» – asegura el Sr. Alsina que le transmitieron los responsables de esa escuela – «Este es un grupo casi familiar, y no pretendemos convertir la escuela en un negocio».

El reportaje también incluye las declaraciones recogidas por D. Carlos Alsina del veterano D. Salvador Arias, considerado el promotor del doblaje en España (dirigió el doblaje de la película ‘Ciudadano Kane’) y maestro de actores de doblaje que, al respecto de la situación de la profesión aseguró: «Lo cierto es que ya hoy existe escasez de actores de doblaje. Lo que ocurre es que en esta profesión los que están arriba y situados forman una mafia que cierra el paso a los nuevos».

Una profesión bien remunerada

El informe del Sr. Alsina concluye que el doblaje es una profesión competitiva e inestable, cuya remuneración para cada actor es de 5.400 por ser convocado a un estudio (lo que se llama C. G., convocatoria general) y a partir de ahí se suma una cantidad de dinero por cada ‘take’ (minuto aproximado) que doble. Por lo que lo habitual es que tras cada convocatoria diaria un actor perciba cerca de 10.000 pesetas.

La escuela APADEMA

El sindicato de actores de doblaje APADEMA (registrado como asociación) intentó precisamente en 1989 formar una ‘Escuela de Formación de Actores’. En palabras de su presidente, D. Estanis González al Sr. Alsina «pensamos que somos los más indicados para enseñar este trabajo». Y anunciaron que matricularían a 75 alumnos (entre ellos D. Iñaki Crespo) para formarlos en doblaje. La escuela duraría poco tiempo por la imposibilidad de los actores de APADEMA de dar clase a la vez que ejercían su labor.

En el informe del Sr. Alsina figuran declaraciones del presidente de APADEMA críticas a aparición de nuevas escuelas de doblaje privadas creadas por gente ajena al sector.