5 octubre 1989

En 1990 será condenado a seis años de inhabilitación

El TSJ gallego absuelve a Xosé Luis Barreiro Rivas de prevaricación abriendo el camino a que sea candidato a presidenta de Galicia por Coalición Galega

Hechos

El 5 de octubre de 1989 el Tribunal Superior de Justicia de Galicia absolvió a D. Xosé Luis Barreiro Rivas del cargo de prevaricación.

06 Octubre 1989

El 'caso Barreiro'

EL PAÍS (Director: Joaquín Estefanía)

Leer

LA SENTENCIA por la que el Tribunal Superior de Justicia de Galicia ha absuelto «I delito de prevaricación al ex vicepresidente de la Xurita José Luis Barre¡ro habrá supuesto para él un alivio personal y un desquite político frente a sus antiguos correligionarios y denunciantes de Alianza Popular; pero conviene situar la sentencia en sus justos términos y no realizar extrapolaciones apresuradas..Para empezar, así como es lícito discrepar de los fundamentos jurídicos de la sentencia, no lo es dudar de la rectitud moral de los miembros del tribunal vinculando su decisión -tres a favor de la absolución y dos en contra- a sus supuestas o reales simpatías políticas o inclinaciones ideológicas. Retirada por el propio ministerio fiscal la acusación de cohecho -ningún pago atípico en forma de dinero o bienes de otro tipo ha podido ser detectado-, era muy difficil que prosperase la de prevaricación (dictar a sabiendas una resolución injusta) al faltarle el móvil económico.

En todo caso, la decisión absolutoria de los jueces es un acto jurídico; nada menos, pero nada más. Barreiro ha sido exonerado de culpabilidad pena¡ en la concesión de lotería instantánea de Galicia. Pero esta limpieza no tiene por qué suponer un certificado de buena conducta sobre los aspectos políticos y administrativos de la concesión. Algunos de los hechos que el propio tribunal admite dejan entrever el grado de irresponsabilidad con que se ejercía el poder. ¿De qué otro modo podría calificarse el hecho de conceder la explotación del juego a una sociedad que no estaba legalmente constituida y que ni siquiera tenía inscrito el nombre comercial? Tras su absolución, hay que rechazar que Barreíro fuera un delincuente, pero queda la duda de si no fue un pésimo administrador.

Por lo demás, no sería bueno utilizar la sentencia para blanquear retrospectivamente viciosas prácticas de la política gallega en la época en que Barreiro ocupó el cargo de vicepresidente del Gobierno alíancista de Fernández Albor. Como tampoco lo sería echar mano ahora de la absolución para lustrar a posteriori la oscura alianza de los socialistas gallegos con el principal hombre de un Gobierno al que reiteradamente habían tachado de foco de corrupción.