10 junio 1987
El PSOE recupera la segunda posición
Elecciones Córdoba 1987 – Izquierda Unida mantiene la alcaldía con Herminio Trigo como ‘sucesor’ de Julio Anguita
Hechos
- IU- 10 concejales
- PSOE- 9 concejales
- AP- 7 concejales
- CDS – 1 concejal
Lecturas
El 10 de junio de 1987 se celebraron las elecciones municipales democráticas en Córdoba. D. Julio Anguita González dejó la alcaldía en 1986 para pasar a ser candidato de Izquierda Unida a la presidencia de la Junta de Andalucía y su sucesor D. Herminio Trigo Aguilar es quien encabeza en esta ocasión la candidatura del PCE (ahora integrado en Izquierda Unida). El resultado es el siguiente:
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- Izquierda Unida (D. Herminio Trigo Aguilar) – 10 concejales.
- PSOE (D. José Miguel Salinas Moya) – 9 concejales.
- AP – 7 concejales
- CDS (D. Antonio Moral Muñoz) – 1 concejal.
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De esta manera D. Herminio Trigo Aguilar no ha logrado retener la mayoría absoluta que heredó del Sr. Anguita González, el ‘califa rojo’ pero podrá seguir siendo alcalde de Córdoba, que seguirá siendo ‘Córdoba, la roja’.
Izquierda Unida
10 concejales
No consiguió mantener la mayoría absoluta de D. Julio Anguita aunque seguiría siendo el más votado, pero necesitaría negociar el apoyo o la abstención del PSOE si quería sacar adelante sus propuestas.
Partido Socialista Obrero Español
9 concejales
El Sr. Salinas era un genuino peso pesado del PSOE andaluz, había sido Vicepresidente de la Junta de Andalucía en el Gobierno del Sr. Fernández de la Borbolla. Consiguió que el PSOE se recuperara algo de la caída de 1983 y quedar por delante de AP, pero se quedó lejos de gobernar.
Centro Democrático y Social
1 concejal
Los centristas lograron colarse con un único concejal en el ayuntamiento en unos comicios en los que el CDS estaba en el alza en toda España.
El Análisis
D. Julio Anguita se había convertido en uno de los alcaldes más queridos de toda la historia de Córdoba, para el Partido Comunista, que atravesaba una travesía del desierto, estaba claro que si querían levantar cabeza necesitaban potenciar a aquel que había sabido lo que otros no: cómo conseguir votos. El ‘califa’ recibió el encargo de montar la estructura para que el PCE fuera una fuerza de referencia en Andalucía y el Sr. Anguita tuvo que dejar la alcaldía cordobesa para montar ‘Convocatoria por Andalucía’ (lo que más tarde sería Izquierda Unida – LV – CA) y ser su candidato a la presidencia de la Junta de Andalucía en las elecciones autonómicas en 1986. El Sr. Trigo pues, tenía que comerse el difícil marrón de reemplazar a alguien del ‘calibre’ del Sr. Anguita. Su comienzo no era el mejor posible, perdía la mayoría absoluta, aunque tampoco se le puede negar el mérito de repetir como más votado. Pronto empezaría a rumorearse sobre discrepancias entre el alcalde y su antecesor, en especial a raíz de sus distintas visiones en el fuerte debate interno sobre el futuro del Partido Comunista una vez se produce la caía del muro de Berlín y la caída de los regímenes comunistas en la Europa de Este.
J. F. Lamata