2 mayo 1983

El bipartidismo se impone en la capital andaluza

Elecciones Sevilla 1983 – El PSOE arrasa con Manuel del Valle mientras que el PSA se desintegra

Hechos

  • PSOE- 19 concejales
  • AP-PDP-UL- 10 concejales
  • PCE- 2 concejales
  • PSA- 0 concejales

Lecturas

Las anteriores elecciones fueron 1979.

Las siguientes elecciones serán en 1987. 

El 8 de mayo de 1983 se celebraron las elecciones municipales democráticas al ayuntamiento de Sevilla.

Los resultados son los siguientes:

  • PSOE (D. Manuel del Valle Arévalo) – 19 concejales.
  • AP (D. Pedro Albert Lasierra) – 10 concejales.
  • PCE (D. Javier Aristu Mondragón) – 2 concejales.

El resultado supone un triunfo absoluto para el candidato del PSOE, D. Manuel del Valle Arévalo, que gobernará con mayoría absoluta y una derrota total para el PSA, el partido que ahora gobernaba con el andalucista D. Luis Uruñuela Sánchez. Su candidato D. Miguel Ángel González de la Puenta no ha logrado ni un solo edil por lo que no estarán presentes.

Tampobo el CDS, con D. Ramón Espejo como candidato, ha logrado representación.

Partido Socialista Obrero Español

Manuel del Valle

19 concejales

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D. Manuel del Valle se convirtió en alcalde de Sevilla tras su amplio triunfo con mayoría absoluta en las municipales de 1983. De las tres formaciones que formaron el ‘Pacto de Sevilla’ (PSOE, PSA y PCE) era el PSOE el que lo había rentabilizado, absorbiendo todo el voto del PSA y parte del de el PCE.

Alianza Popular - Partido Demócrata Popular

Pedro Albert Lasierra

10 concejales

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El candidato de AP era el empresario D. Pedro Albert (que había sido considerado del sector franquista aperturista) que hizo coalición con el PDP (democristiano) que en Andalucía lideraba D. Javier Arenas. El Sr. Albert aseguró que le había perjudicado electoralmente un rumor de que si no ganaba la alcaldía se retiraría de la política y aseguró que cumpliría sus cuatro años en la oposición.

Partido Comunista de España

Javier Aristu Mondragón

2 concejales

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No tuvo demasiada suerte el candidato comunista al lograr sólo un tercio de los concejales que logró el PCE en 1979. A la caída influyó la crisis del PCE andaluz, de hecho el Sr. Aristu entró en el ayuntamiento para reemplazar a Dña. Amparo Rubianes (que se pasaría al PSOE).

El Sr. Aristu mostró tener un gran humor cuando, en una fiesta en el ayuntamiento seis meses después se le concedió «el premio Fraga por su colaboración en la caída del marxismo en Sevilla» y lo aceptó jocosamente.

Partido Socialista Andaluz - Partido Andalucista

Miguel Ángel González de la Puente

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Sin lugar a dudas el mayor derrotado aquella noche. Pasar de ser la formación que gobierna Sevilla, a quedar fuera del ayuntamiento era un trago difícil de aceptar. El alcalde D. Luis Uruñuela, del PSA, había optado por no presentarse a reelección dejándole la candidatura a su segundo, D. Miguel Ángel González de la Puente.

El Sr. González de la Puente aseguró durante toda la campaña que el motivo porque el alcalde Uruñuela no se presentaba a reelección era porque quería concentrarse en encabezar el PSA para la Junta de Andalucía, pero para la opinión publicada estaba claro que no se presentaba a reelección por los humillantes resultados que preveía.

Centro Democrático y Social

Ramón Espejo

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Ante la desaparición de la UCD, era el CDS del Duque de Suárez, que en Sevilla lideraba D. Ramón Espejo y Pérez, el que quería recoger ese voto centrista que en 1979 había ido a las arcas de UCD. Se equivocó. UCD mantenía gran recelo en el voto andaluz por su negativa a apoyar en referendum el Estatuto de Autonomía y el voto centrista de 1979 fue directo en 1983 a la cesta de los franquistas de AP.

El Análisis

LA CAPITAL DEL GRANERO DE VOTOS SOCIALISTA

JF Lamata

La elecciones municipales en Sevilla tenían una especial significación, no sólo por el hecho de que fuera una de las capitales de provincia más importante de España, también influía que era la ciudad de los líderes nacionales del partido hegemónico del momento, D. Felipe González y D. Alfonso Guerra, del PSOE. Andalucía eran una de las comunidades que más diputados aportaban al Congreso, y el triunfo del PSOE en las generales de 1982 en Andalucía, Catalunya, Madrid y Comunidad Valenciana había sido clave para que el PSOE aplastara de tal manera con sus 202 escaños. La diferencia es que con el paso de los años las otras tres comunidades irían evolucionando electoralmente, pero Andalucía se convertiría en el fiel granero de votos del PSOE en España. Y Sevilla era la capital de ese granero.

J. F. Lamata