Jiménez Losantos (DIARIO16) reprocha a Fernando Savater que se metiera con el PSOE vasco por los GAL en el programa de Tola en TVE

Sale Txiki Benegas en la tele – delante de una indocumentada que confunde Apala con Pertur, Caín con Abel – y ya está otra vez la sangre saltándonos a la cara por dentro y por fuera. Ya está el terror donde siempre estuvo: delante de las pistolas. Ya está otra vez el compatriota vasco, que horror, poniéndonos entre su frontera y nuestra trinchera. Y ya está uno, otra vez, dispuesto a cometer un error político y a decir, por ejemplo, que si fuera vasco votaría socialista.

El lector desprevenido debe saber que la historia de mi vida es la de mis errores políticos. Cuando estar en el PCE eran cuatro años a la sombra, yo estaba en el PCE. Cuando slairse de la izquierda establecida era condenarse al descrédito y la marginación intelectual, yo me salí de esa izquierda. Cuando acudir al I Congreso de Cultura Catalana, en la clandestinidad, era estar dispuesto a pasar de Montserrat a la cárcel Modelo sin traducción simultánea, ahí estaba yo. Y cuando hubo que denunciar el asimilismo pujolista y el travestismo político-lingüístico del PSC y el PSUC, también estaba allí metiendo la pata. Así hasta ahora, con los pro soviéticos que me llaman fascista en este mismo periódico, porque algún consuelo había que tener tanto error mío.

Así que no voy a reprocharle al compatriota Benegas sus errores de antaño. Sobre todo después de ver en el programa del presidente Tola y el vicepresidente Guerra al apologeta Savater – menos apolo que jeta – tratando de bobos o de terroristas de Estado a Benegas, Damborenea y compañía, esos que cometen el ‘error político’ de partirse la cara por defender la bandera española, total un trapo. Yo me siento en la obligación moral de equivocarme junto a esos vascos sin salida, con más viudas que votos. Porque frente a la frase – naturalmente francesa – ‘peor que un crimen, es un error’, siempre preferiré el error al crimen.

Federico Jiménez Losantos