25 febrero 2006

Jorge Valdano arremete contra el entrenador portugués José Mourinho desde sus columnas en el diario MARCA

Hechos

El artículo ‘El método Mouri’ publicado por D. Jorge Valdano el 25.2.2006 fue uno de los artículos que escribió el ex entrenador y ex director deportivo del Real Madrid sobre D. José Mourinho.

05 Mayo 2005

Tan distintos y tan iguales

Jorge Valdano

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A Benítez y Mourinho la vida les ha cruzado en desafíos de gran difusión mediática. Por eso se miran con una inevitable desconfianza. Pero, aunque la puesta en escena es casi opuesta, tienen dos relevantes puntos en común:hambre atrasada de gloria y el gusto por tenerlo todo bajo control. Puntos en común relacionados con un hecho trascendente: ninguno de los dos fue jugador de alto nivel. eso les ha hecho concentrar toda su vanidad en la tarea de entrenar, lo que explica el hambre atrasada de gloria. El deseo de control tiene otra profundidad. Creo que quien no tuvo talento para jugar no cree lo suficiente en el talento del jugador, en la capacidad para improvisar soluciones. En definitiva: son el tipo de entrenadores que ellos mismo hubieran necesitado tener para haber llegado a jugar profesionalmente.

25 Febrero 2006

El método Mouri

Jorge Valdano

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Me cae bien la pose de maldito de Mourinho, pero eso no signitica que crea en su inocencia. Pienso que el pésimo estado del terreno de Stamford Bridge era su plan ‘A’. El ‘B’ fue embarrar también la rueda de prensa posterior al partido, acusando a Lionel Messi de hacer teatro en la jugada donde resultó expulsado Del Horno. ¿Habla eso mal de Mourinho? Sí. ¿Habla eso mal del fútbol? No. Al revés, si este juego es una metáfora de la vida, la trampa no hace más que demostrarlo. ¿Quién dijo que la vida esté hecha sólo de mérito? ¿Quién dijo que en la vida la trampa encuentra siempre el límite de la justicia? Lo bueno del Barcelona fue confirmarnos que, a veces, el mérito le gana a la trampa. Y brillantemente.

04 Noviembre 2006

Un mito moderno

Jorge Valdano

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Mourinho arrastró sus rodillas sobre la hierba del Nou Camp para gritar el gol del empate al Barcelona con pasión de delantero centro, no de entrenador. De hecho, le robó el escenario y la foto a Drogba, que solo había marcado el gol. En cambio, Mourinho había llegado al encuentro con una interesante historia a cuestas. De traductor humillado a temible estratega, ha logrado cultivar una imagen de hombre en la que convive un guapo, un ganador y un provocador. Pocos negocios hay mejores que el de hacer coincidir, en una misma persona, todo lo bueno y todo lo malo. Mourinho atrajo durante todo el partido los insultos de ochenta mil aficionados y, en medio de ese clima asfixiante, llegó el gol de la perfecta venganza. Una auténtica oportunidad de oro para alimentar el mito de ganador maldito.

03 Mayo 2008

Un intruso pedagógico

Jorge Valdano

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Tiene cara de nada, dice pocas cosas, en los partidos pasa desapercibido… Como Avram Grant no vende una escoba, el periodismo no sabe qué hacer con él. De momento, ha decidido que tiene suerte y con eso explican el suceso del Chelsea, por primera vez en una final de Champions League. Me interesa este Don Nadie venido repentinamente a más porque ha traído al fútbol la victud de la desmitificación. Como el peso del resultado sobre la percepción es aplastante, con la victoria del Chelsea sobre el Liverpool, Grant se pasó por la piedra en una sola noche el fútbol científico de Benítez y el poderoso carisma de Mourinho. ¿A que parece estúpido? Pues lo es. Pero no lo es menos atribuir a los entrenadores más poder desequilibrante que a los jugadores, sólo porque tienen fuerza mediática. En el mundo de los juegos, como en el de las artes, la academia debe tener un límite. Si permitimos el excesivo intervencionismo de los entrenadores, eliminaremos toda idea de felicidad, en los jugadores primero y en los espectadores después. (…)Entre el Chelsea y el Barça no hay mucha diferencia técnica (aún desde estilos distintos), pero sí de compromiso. El Chelsea fue construido por la billetera de Abramovich y la fuerte personalidad de Mourinho (…), pero si mantiene la vigencia a pesar de los cambios en la dirección es por el hambre de gloria de gente como Terry, Carvalho, Lampard, Ballack, Drogba… Cuando una plantilla está formada por jugadores emblemáticos que transmiten a las jóvenes la honestidad, responsabilidad y valentía propia de los buenos profesionales, todo es más fácil.

06 Septiembre 2008

La mirada

Jorge Valdano

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Empató Mourinho y perdió Guardiola. Es increíble cómo la actualidad concentra la atención en determinados individuos. El Inter o el Barça son clubes con sus presidentes, directivos, empleados, jugadores y millones de aficionados. Pero cuando el periodismo apunta a un personaje, hacia ahí va la mirada de la opinión pública. Milagros de la percepción. Mourinho es un carisma andante que no se sabe muy bien lo que representa, pero la fuerza de su imagen es imprescindible para los medios. Lo de Guardiola es distinto. Simboliza una idea que algunos defendemos (como bendita) y otros atacan (como maldita), suficiente carga energética para producir una bomba informativa. Cuando empieza el partido, el entrenador es un pobre tipo que pone su cargo en manos de los jugadores. Creerle dueños del resultado no es más que una ilusión… que vende periódicos.