2 septiembre 1988

El periodista cesado se había enfrentado a su hermano, el Director de Informativos y a la propia Directora General por la emisión de un discurso íntegro de Felipe González

La directora de RTVE, Pilar Miró, destituye a Luis de Benito como presentador y director del telediario de TVE

Hechos

El 1.09.1988 la Directora General de RTVE, Dña. Pilar Miró, despidió al director del Telediario, D. Luis de Benito por discrepancias sobre el contenido del telediario.

Lecturas

La Directora General de RTVE Pilar Miró Romero despidió a Luis de Benito Torrente como presentador del Telediario tras desobedecerle sobre la emisión de un discurso del presidente del Gobierno D. Felipe González Márquez. El despido fue respaldado por el Director de Informativos, Julio de Benito Torrente (hermano del cesado). El periódico El País de D. Juan Luis Cebrián Echarri se posicionó editorialmente contra Luis de Benito Torrente mientras que ABC de D. Luis María Anson Oliart y El Independiente de Pablo Sebastián Bueno se posicionaron a su favor.

LOS RESPONSABLES DEL DESPIDO:

miro_benito  Dña Pilar Miró (Directora General de RTVE) y D. Julio de Benito (Director de Informativos de TVE).

Miro_Benito   La revista progresista EL INDEPENDIENTE, dirigida por D. Pablo Sebastián, informó del despido en portada..

 

03 Septiembre 1988

Ministerio de televisión y turismo

ABC (Director: Luis María Anson)

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03 Septiembre 1988

Pilar Miró debe dar una explicación

DIARIO16 (Director: Pedro J. Ramírez)

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Todo indica que ha habido motivaciones políticas en el desencadenamiento de la crisis que sacude estos días los servicios informativos de TVE. La sospecha de que la imagen de Felipe González está en el centro del conflicto, que ha originado los primeros ceses y dimisiones, se va abriendo paso sin que nadie aclare convincentemente la situación.

Parece que Luis de Bento cesó como director y presentador del segundo telediario por incumplir las órdenes expresas de Pilar Miró, que quería dedicar el 29 de julio veinte de los treinta minutos de dicho espacio a la conferencia de Prensa del presidente González, en la que abordó problemas delicados para su Gobierno, como los casos Amedo y el GAL. La directora general dio órdenes, por lo visto, de que se emitieran treinta minutos de dicha rueda de Prensa en el ‘Informe Semanal’ del día siguiente. Esto habría obligado a dimitir a Martínez Reverte.

No es bueno que se extienda la sospecha de que los cambios en TVE – y se supone que en RNE – suceden más por motivos políticos que por razones estrictamente profesionales. Pilar Miró – una gran profesional – sabe que su misión al frente del más poderoso medio público de comunicación no consiste precisamente en cuidar la imagen de Felipe González. Por eso debería aclarar convincentemente lo ocurrido.

05 Septiembre 1988

Un tardío descubrimiento

EL PAÍS (Directo: Juan Luis Cebrián)

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Hay tormenta en los informativos de Televisión Española. La destitución de Luis de Benito como director y presentador del telediario de la tarde se encuentra en el foco de la conmoción. Repentinamente elevado a la categoría de héroe de la libertad de expresión por quienes más lo denigraron hasta ayer mismo, el periodista descubre ahora, como quien se cae del caballo, camino de Damasco, que en el monopolio televisivo existen presiones del poder.La lluvia existía mucho antes de que Luis de Benito encontrase mojado el patio de su casa: afirmar a estas alturas que los telediarios son gubernamentalistas no es descubrir la pólvora. El ex director del informativo de la tarde se siente ofendido porque se diga que su programa ha perdido audiencia. Ciertamente, la ha perdido, pero, incluso si la hubiera mantenido, no por ello la calidad del producto habría estado garantizada.

Los informativos de la televisión pública siguen estando, como siempre, al servicio del que manda. Lamentablemente para Luis de Benito, el descenso de interés fue particularmente apreciable en el telediario que se emite a las 20.30. Y en punto a progubernamentalismo, lo menos que puede decirse es que el telediario de la tarde no le ha ido a la zaga a cualquier otro.

El cambio de director de un telediario figura entre las competencias de la directora general, aunque no puede dejar de llamar la atención que la crisis se haya producido en ausencia del director de informativos, Julio de Benito, hermano del destituido y autor de su nombramiento. Las intervenciones de la directora general para que se dé o deje de dar determinada entrevista con el presidente del Gobierno no son en absoluto sorprendentes. TVE, hoy como ayer, es más un aparato de propaganda que un medio informativo.

Mientras el monopolio televisivo funcione como funciona, las reglas del juego están clarísimas, y ningún profesional puede llamarse a engaño al respecto. Trabajar en Televisión supone estar a lo que decida su director, que es nombrado por el Gobierno. Entonces, cabe preguntar, ¿para qué sirve el Consejo de Administración de RTVE, teóricamente concebido para velar por los principios de imparcialidad y pluralismo? Pues para nada. Al menos mientras, traicionando el espíritu y la letra del Estatuto de RTVE, sus componentes no sean elegidos en función de sus «relevantes méritos profesionales», sino de su militancia política y fidelidad a la causa.

Lo de ahora es una anécdota, pero viene a recordar cuáles son los males de fondo de nuestra televisión. Esperar pluralismo, autonomía profesional e imparcialidad de un medio que actúa en régimen de monopolio, y que influye decisivamente en la formación de la opinión, es pedir peras al olmo. Que a su sombra florezcan pequeños nepotismos, luchas por parcelas de poder, rencillas personales no es sino el efecto de una estructura viciada desde el origen.

22 Septiembre 1988

Flagrante contradicción

ABC (Director: Luis María Anson)

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Con claridad, la directora general de Radio Televisión Española, Pilar Miró, ha reconocido que dio instrucciones para el tratamiento informativo y el minutaje de la rueda de Prensa del presidente del Gobierno, en la que habló sobre el asunto de los GAL, y ha señalado que destituyó al responsable del Telediario-2, Luis de Benito, por incumplir dichas instrucciones. Pensamos que la directora general de Radio Televisión Española tiene derecho, como cualquier empresario, a que la orientación general de los telediarios sea la que ella decida. A lo que no tiene derecho es a interferir en la dirección profesional del telediario, dando, sobre asuntos concretos, órdenes que corresponden al director de éste. En todo caso, lo que ayer dijo Pilar Miró está en flagrante contradicción con la explicación que dio en su momento de que la destitución de Luis de Benito no tenía implicaciones políticas. Naturalmente que las tenía, porque se trataba de las palabras de don Felipe González, del tiempo que se les iba a dedicar y de la audiencia de que iban a gozar en un asunto como el de los GAL. Si eso no es política, que Pilar Miró aclare qué entiende que tal cosa.

Cuando ya nada es urgente (Memorias)

Pedro Piqueras

2025

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El paso de RNE a TVE fue lo que viví con más gobio . 1988 era el año de mi llegada a la televisión pública, en concreto fue el 3 de octubre. Aquel día me desperté con un titular en el diario EL PAÍS «Ojalá se fundan los plomos esta tarde en Torrespaña», con el que expresaba mis sentimientos ante el debut. Me había entrevistado José Miguel Contreras, quein con esa frase puso en evidencia el miedo al primer día en pantalla, en realidad, el miedo al fracaso. Lo de los plomos se lo dije fuera de la entrevista, pero le pareció un buen titular y lo utilizó. La verdad es que había llegado a la televisión sin que ese trabajo estuviera en mi carta de peticiones al futuro y ahí me encontraba, al borde de la fama y de todo lo que eso pudiera conllevar. Para mí el problema era aparecer en pantalla, no la edición de un informativo.
Televisión Española había dado pasos muy importantes y no era una televisión – en la era Miró – con ningún tipo de complejos. Lo peor era enfrentarme a la cámara cuando, además, venía precedido de una polémica que no había tenido demasiado en cuenta: el cese de mi predecesor Luis de Benito, tras una bronca descomunal con la directora general por la duración de una entrevista a Felipe González. Ella quería más tiempo… y él la hizo más corta. Pregunté directamente a Pilar por el asunto; me preocupaba tener un problema por cuestiones editoriales. Ella intentó tranquilizarme con un «no volverá a pasar, era una cuestión de caracteres. No era el primer choque que teníamos», dijo.

– El presidente es ajeno a esta cuestión que es puramente personal, entre Luis y yo.

El asunto me preocupaba. «A ver donde me he metido», me decía a mí mismo. Luis, además, había sido compañero mío en RNE, donde hacía un magnífico programa informativo a primera hora de la mañana, un clásico: España a las 8.

Las relaciones con Pilar fueron, sin embargo, absolutamente normales. No hubo mayores tensiones entre nosotros en los pocos meses que estuvimos juntos. Teníamos reuniones semanales en las que participaban, entre otros, los responsables de Informativos, julio de Benito y Eduardo Alonso, también Jesús Martín, director de TVE, Jesús Hermida… y algunos más. Eran encuentros en los que Pilar Miró llegaba a preguntar uno a uno qué es lo que haríamos en cada una de las situaciones que se producían… Dáabamos nuestra opinión y luego ella tomaba las decisiones de acuerdo con su modo de pensar y hacer. Erau n mundo nuevo para mí.

Rodríguez Sahagún, desde el CDS, elevó una queja pública en el Parlamento porque, según decía «habiamos hecho desaparecer a Adolfo Suárez de los informativos». Dio la casualidad de que ese día el expresidente centrista dio una rueda de prensa importante y pedí que se hiciera una información con varias de sus declaraciones. No debí decir, sin embargo, lo que dije cuando terminó el vídeo: «Ahí tienen una información muy completa de lo dicho por el expresidente… Como ven el Sr. Suárez aparece en Televisión Española». Algo que sentó fatal a Rodríguez Sahagún, que emitió una queja a la directora general. Nueva llamada y nuevo aprendizaje.

D. Luis de Benito se había convertido en presentador estrella del principal Telediario de TVE tras la llegada de Dña. Pilar Miró a la Dirección General de RTVE en 1986. Esta situación duró hasta su despido fulminante en septiembre de 1988. El motivo era por no haber emitido una rueda de prensa de D. Felipe González de la forma en que quería el director de Informativos, D. Julio de Benito (su hermano) y la Directora General de RTVE, Dña. Pilar Miró.  Se producía, por tanto, un problema similar al que causó la destitución de D. Luis Mariñas como presentador del Telediario tres años antes con D. José María Calviño como Director General de RTVE.

El Análisis

INCOMPRENSIBLE LOCURA

JF Lamata

Un despido fulminante, aún siendo totalmente lícito que una Directora General de RTVE y el director de Informativos cambien al presentador/editor del Telediario, nunca es lo más recomendable de cara a la imagen de crisis que da. A parte de lo original de que uno de los directivos que apoyó el despido fuera hermano del despedido.

Aunque a la oposición política le gustara levantar la bandera de los motivos políticos, no deja de ser habitual que un jefe despida a un subalterno si desobedece una orden. El problema es el motivo esa insubordinación se producía tras una orden que un gran número de profesionales se hubiera negado acatar, que era la emisión íntegra de un discurso del Presidente del Gobierno… ¡de 30 minutos de duración!’. Que la Sra. Miró fuera felipista y quisiera favorecer al presidente del Gobierno, pero tiene que haber límites.

J. F. Lamata