15 abril 2024

Es presidente desde la suspensión de Luis Rubiales

La elección de Pedro Rocha como presidente de la Real Federación Española de Fútbol queda bloqueada al ser imputado por sospechas de corrupción

Hechos

El 15 de abril de 2024 el TAD paraliza el nombramiento de D. Pedro Rocha como presidente de la RFEF.

Lecturas

D. Pedro Rocha asumió la presidencia interina al ser destruido D. Luis Rubiales en septiembre de 2023 después de los sucesos de agosto de ese año.

13 Abril 2024

Situación insostenible

Esteban Urreiztieta

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El Juzgado de Instrucción número 4 de Majadahonda acordó ayer cambiar la condición de testigo a la de investigado a Pedro Rocha, que ayer mismo debía ser proclamado único candidato a la presidencia de la Federación Española de Fútbol (RFEF), y acordó suspender su declaración. Rocha fue citado por la juez en el marco del caso Rubiales para que aclarase el grado de conocimiento de las operaciones que se están investigando, entre otras, el traslado de la Supercopa de España a Arabia Saudí a cambio de comisiones millonarias a Gerard Piqué o el amaño de contratos a favor de la constructora Gruconsa, que, según la Guardia Civil, ha estado pagando comisiones a su antecesor en el cargo, Rubiales.

El juzgado consideró que Rocha debía tener conocimiento de los hechos por los que estaba siendo interrogado y decidió variar su condición de testigo a la de investigado, por lo que volverá a citarlo para que comparezca acompañado de abogado. A lo largo de su declaración, que duró 37 minutos, Rocha insistió en que no tenía conocimiento de las preguntas que se le han ido formulando. «Mi cargo era representativo», señaló a la juez cuando le recordó que ocupaba la vicepresidencia económica. En paralelo, repitió en innumerables ocasiones que no sabía «nada». El dirigente subrayó que operaciones como la de Arabia Saudí se le «ocultaron», en alusión al equipo de Rubiales, y se desmarcó de cualquier tipo de responsabilidad.

De los contratos a la constructora Gruconsa también se evadió pese a que, tal y como desveló EL MUNDO, adjudicó un contrato amañado hace sólo un mes a la empresa que pagaba comisiones a Rubiales. Concretamente, 1,3 millones de euros para la reforma de la residencia y las cocinas de la Ciudad del Fútbol. En relación con este contrato, Rocha descargó la responsabilidad en «el técnico de Infraestructuras» y contestó: «Él sabrá por qué lo ha hecho».

Ante la constante negativa a dar explicaciones, el fiscal pidió que se le cambie la condición de inmediato en un tono visiblemente contrariado por las evasivas del declarante. Rocha replicó que no entendía «nada» y la juez le precisó que su condición de investigado era adoptada «por su bien».

La decisión judicial constituye un terremoto en la RFEF, toda vez que Rocha es el nuevo presidente virtual al ser el único candidato capaz de reunir los avales suficientes. Ahora mismo todo es una incógnita en la Ciudad del Fútbol, donde no contaban con este escenario. Rocha había logrado reunir más de 100 avales sobre los casi 140 posibles, lo que había dejado el camino llano para ser proclamado presidente este mismo fin de semana, el lunes como muy tarde.

Los otros aspirantes, entre los que destacaba el periodista Carlos Herrera, no consiguieron obtener esos avales y, por lo tanto, Rocha quedaba como única opción. La única esperanza de sus opostitores para que no sea nombrado es que el TAD (Tribunal de Arbitraje Deportivo) admitiese la inhabilitación que solicitaban varias denuncias. El jueves por la noche se llevaron una decepción, pues ese día no hubo admisión alguna.

Sin embargo ayer, pocos minutos después de la decisión de la jueza Delia Rodrigo, y según informó el opositor Miguel Galán a este periódico, el TAD, ahora sí, le ha abierto expediente sancionador por no haber convocado elecciones durante los seis meses en los que dirigió la Comisión Gestora de la RFEF y por haber asumido funciones que no le correspondían.

Siempre según su versión, el máximo órgano judicial deportivo aceptó ayer la denuncia del propio Galán y dejó a Rocha a un paso de la inhabilitación. Según pudo saber EL MUNDO, si se confirma esta decisión del TAD, el siguiente paso podría ser que el Consejo Superior de Deportes (CSD) se reuniese en las próximas horas para decidir si le inhabilita cautelarmente, hasta el final de la resolución del expediente. Todo depende de la calificación que el TAD otorgue a su conducta: si la falta es «muy grave», el CSD estará legitimado para tomar esa medida tan drástica.

«Vengo muy tranquilo, y a colaborar con la Justicia en lo que pueda», decía Rocha a los periodistas que se agolpaban a las puertas de los Juzgados de Majadahonda a primera hora de la mañana. Poco más de una hora después, no estaba nada sonriente y buscaba explicaciones en su entorno, que de momento no ha sido capaz de dárselas. Él mismo sabe que la situación es completamente insostenible.

16 Abril 2024

Situación terminal en la RFEF

EL PAÍS (Directora: Pepa Bueno)

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El expediente a Pedro Rocha, ya imputado por una jueza, acentúa las sospechas sobre la Federación Española de Fútbol

Demasiados años de desgobierno interno y de falta de vigilancia externa han llevado a la Real Federación Española de Fútbol (RFEF) a una situación terminal. El último capítulo llegó el viernes, cuando la jueza que investiga algunos contratos de la entidad por supuestos delitos de corrupción, administración desleal y pertenencia a organización criminal imputase a Pedro Rocha, máximo dirigente del fútbol español. Rocha se había convertido esa misma mañana en virtual nuevo presidente de la RFEF al ser el único candidato con los avales necesarios. Iba a ser proclamado ayer, pero su nombramiento ha quedado paralizado al admitirse una impugnación del presidente del centro nacional de entrenadores Cenafe, Miguel Galán.

La RFEF —una entidad privada con funciones públicas— es la imagen de España en el mayor espectáculo de masas del mundo. En 2030 tendrá encima los ojos del planeta en el segundo Mundial que organiza en 48 años. Ni España como país, ni todos los profesionales del deporte, ni los millones de aficionados merecen que la actuación de los dirigentes federativos enturbie dicha imagen.

En menos de siete años los tres últimos responsables del fútbol español —Ángel María Villar, Luis Rubiales y el propio Rocha— han sido o están siendo investigados por delitos de corrupción durante sus mandatos. Por ahora la imputación solo pretende asegurar los derechos del investigado, que goza de la presunción de inocencia. Pedro Rocha fue vicepresidente económico de Rubiales desde octubre de 2020 y su sucesor interino cuando aquel dimitió en medio del escándalo internacional motivado por el beso no consentido a Jennifer Hermoso en la final de Sídney. Dados los cargos que ocupaba, despertó serias dudas que declarase a la jueza su completo desconocimiento de los contratos investigados y que se presentase como una figura solo “representativa”. Fueron esas evasivas las que llevaron a la Fiscalía Anticorrupción a pedir que se cambiase su condición de testigo por la de imputado.
En estos meses de interinidad, Rocha ha apartado de sus puestos a varios altos cargos vinculados a esta causa o al caso Jenni Hermoso. Ante su propia imputación, en cambio, recalca que defenderá sus derechos “hasta el final”, respuesta que recuerda al numantinismo con el que su antecesor intentó aferrarse a la presidencia hasta que su situación se volvió insostenible. Para tratar de atajar el esperpento federativo, el Tribunal Administrativo del Deporte (TAD) expedientó ayer a Rocha por no convocar las elecciones en su momento y extralimitarse en sus funciones en la gestora que se hizo cargo de la Federación tras la renuncia de Rubiales. Ese expediente —por falta muy grave — puede suponer su inhabilitación, lo que frustraría sus aspiraciones presidenciales.
Pedro Rocha aduce que respaldaron su candidatura 107 de los 138 avales posibles. La cifra muestra más bien que la regeneración de la gestión del fútbol en España no puede venir de unas estructuras internas bajo sospecha. El Consejo Superior de Deportes (CSD) tiene sobre la mesa el expediente del TAD y analiza sus próximos pasos. A la vez, ha reactivado las gestiones con la FIFA, que podrían desembocar en una intervención de la RFEF, tutela que nadie desea pero que puede resultar inevitable. El presidente del CSD —y exministro de Deporte—, José Manuel Rodríguez Uribes, comparece hoy en el Congreso. La ocasión es inmejorable para plantear un compromiso inequívoco de que las irregularidades en la Federación Española de Fútbol tocan a su fin.