Mediapro y CANAL PLUS (DIGITAL PLUS) negocian la emisión de La Liga de Fútbol (2012-2015) mientras continúan su litigio

Canal + y Mediapro han alcanzado un acuerdo que permitirá la explotación de los derechos de televisión de la Liga BBVA (Primera División) durante las tres próximas temporadas. La Liga de Fútbol Profesional (LFP), el organismo que agrupa a los clubes de Primera y de Segunda, garantiza el cumplimiento del acuerdo entre ambos operadores.

El pacto, alcanzado con “la intervención determinante” del secretario de Estado para el Deporte, Miguel Cardenal, establece “un modelo viable para la Liga española y presenta un escenario estable y normalizado para los aficionados al fútbol” durante las temporadas 2012-2013, 2013-2014 y 2014-2015, según indicó Canal + por medio de un comunicado

El acuerdo plantea un nuevo escenario en el que Canal + (participado por PRISA, grupo editor de EL PAÍS) posee en exclusiva todos los derechos de la Liga BBVA para la televisión de pago durante las tres próximas temporadas (excepto para la TDT dodne también estará presente Gol T).

Canal + 1 ofrecerá en exclusiva cada fin de semana el mejor encuentro de la jornada en una cita en la que tendrán una presencia destacada los dos grandes de nuestro fútbol, el Real Madrid y el Barcelona. Así, ofrecerá en total 28 encuentros del Madrid o el Barça, incluyendo uno de los clásicos de la Liga 2012-2013.

Cada fin de semana, los restantes encuentros para la televisión de pago (un total de ocho) serán ofrecidos por Canal + Liga, que multiplica su oferta desde esta temporada (de tres a ocho partidos por jornada, siempre con el Madrid o el Barcelona) y ofrecerá el otro clásico liguero de la temporada. Canal + distribuirá a todos los operadores de televisión de pago españoles como ONO e Imagenio (Telefónica).

Gol T, el canal de pago en TDT de Mediapro, emitirá cada semana ocho partidos de la Liga de Primera División, con un partido del Madrid o del Barcelona, como mínimo, por jornada. Además, Gol T emitirá uno de los dos clásicos que cada temporada disputen el Madrid y el Barça.

Mediapro distribuirá también un partido por jornada en televisión en abierto, a través de La Sexta, que se disputará preferentemente los lunes, así como los programas resumen de todos los partidos. En este sentido, el primer encuentro a transmitir será el Zaragoza-Valladolid, que se disputará el próximo lunes a las 23.00, a través del citado canal en abierto.

Asimismo, Mediapro también distribuirá los derechos internacionales de la Liga y la Copa del Rey y se ocupará de la producción de todos los partidos para todos los operadores.

En la consecución del acuerdo ha sido decisiva la intervención del presidente del Consejo Superior de Deportes (CSD), Cardenal, que ha participado en las negociaciones entre los dos operadores, que han tenido lugar en los últimos tres días en la sede del propio CSD en sesiones de mañana y tarde.

Un grupo de 13 clubes de Primera División, denominado G-13 había amenazado con no iniciar la Liga por su profundo desacuerdo con los horarios y el reparto de los derechos, que favorecía a los dos clubes grandes, el Real Madrid y el FC Barcelona.

En la Asamblea de la LFP del pasado martes, los clubes acordaron una tregua para permitir el inicio de la Liga que ahora se confirma como definitiva, ya que la LFP se compromete a garantizar el cumplimiento del acuerdo sellado por los operadores

Se pone también fin a un largo conflicto, la llamada guerra del fútbol, entre Canal + y Mediapro, por la explotación de los derechos, que se ha recrudecido cada verano en las vísperas del inicio de la Liga.

Por otra parte, el Mallorca anunció ayer la firma de un contrato de cesión de los derechos audiovisuales con Canal + para las próximas tres temporadas.

Algunos pueden creer que las desavenencias en la llamada guerra del fútbol, cuya paz se firmó en la madrugada de ayer, responden única o prioritariamente a intereses comerciales de las diversas partes interesadas. Pero ya se ha explicado hasta la saciedad que han sido consecuencia de una intervención del poder político en el mercado, abusiva y dolosa, con el fin de sacar ventaja en la configuración de los grupos mediáticos de nuestro país. Dicho intervencionismo no conoce colores políticos. Primero fue el Partido Popular, en alianza con Izquierda Unida, quien convirtió legalmente al fútbol en cuestión de interés general con el fin de manipular el mercado en beneficio de sus intereses políticos. Luego el Gobierno del PSOE utilizó con inmoral descaro el método del decreto ley para favorecer a los amigos del presidente Zapatero. Dichas actitudes redundaron en perjuicios notables para el propio fútbol y para la ordenación del mercado audiovisual.

Si hace unos días reclamábamos la necesidad de que el Gobierno interviniera para poner orden en el caos generado y que lo hiciera con la neutralidad adecuada, hoy es preciso reconocer la tarea desempeñada al respecto por el secretario de Estado para el Deporte, Miguel Cardenal, que no ha regateado esfuerzos ni tiempo en su tarea de mediador a fin de obtener un resultado satisfactorio para todas las partes interesadas.

Cuando es de veras el bien general lo que se persigue, huyendo del amiguismo y el clientelismo al que estábamos acostumbrados, se demuestra que la acción política es útil y productiva, como en este caso. De todas formas, los sucesos de la semana que acaba han servido para poner de relieve que es precisa una nueva ordenación de la Liga Profesional de Fútbol que contemple los intereses legítimos de todos los clubes, grandes y pequeños, y permita buscar un mayor equilibrio entre los equipos en juego, lo que redundará sin duda en beneficio de la competición y en una mayor satisfacción para los aficionados. Los acuerdos de este fin de semana pueden ser el inicio de una etapa más racional y coherente en el mercado de los derechos televisivos.