14 mayo 2002

Antonio Basagoiti García-Tuñón será el nuevo presidente de la compañía

Muere el presidente de Unión Fenosa, Victoriano Reinoso

Lecturas

D. Antonio Basagoiti García-Tuñón será el nuevo presidente de la compañía controlada por el Banco Santander Central Hispano

14 Mayo 2002

La última carrera de un visionario

Julián González

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Victoriano Reinoso tenía siempre en sus conversaciones privadas una frase de Ovidio, cuando decía en gallego: «O no comenzar una cosa, o llevarla a término». Este gallego de pura cepa nació en Negreira (A Coruña) se ha marchado sin poder acabar su mejor trabajo, iniciado hace poco más de un mes como presidente de Unión Fenosa en sustitución de José María Amusátegui. El SCH, máximo accionista de la empresa eléctrica, le había entregado los mandos y le había dado todo su apoyo. Ni tan siquiera le ha dado tiempo de darnos esa primera entrevista que los plumillas como le encantaba llamarnos deseamos conseguir siempre. Tu equipo de asesores, Victoriano, me repetía continuamente que te comprendiéramos, que primero tenías que ordenar las cosas.

Lamento no haber podido mantener esa entrevista que otras veces disfruté. A buen seguro, Victoriano, que habrías criticado al Gobierno por su actual política de apoyo al gas, por no acometer las reformas que el sector eléctrico necesita, recordando a la vez que hay que subir las tarifas eléctricas para que las compañías puedan invertir en nuevos proyectos y que Francia debe abrir sus puertas al mercado eléctrico español. Victoriano Reinoso vivió siempre defendiendo a la empresa, peleándose por los grandes clientes y por los pequeños, y merece un gran aplauso por la generosidad y la capacidad que en todo momento ha demostrado.

Reinoso, ingeniero de Caminos, 53 años, acababa de ratificar a todo su equipo directivo en la empresa (a Honorato López Isla, Elías Velasco, Ernesto Mata, José María Arraiza, Juan Luis López Cardenete…) y se disponía a poner en marcha su nuevo proyecto para consolidar a Unión Fenosa como la tercera pata eléctrica del sector. Un repentino ataque al corazón a las 16.00 horas de ayer, cuando descansaba en un hotel a la espera de entrevistarse con el presidente de la Xunta de Galicia, Manuel Fraga le dejó parado el reloj de la vida.

Vehemente y amante de defender con garra sus argumentos, su lema era que «la marcha de la empresa depende siempre de las personas» y que «hay que estar al margen de las cuestiones políticas».Hábil negociador y acostumbrado a moverse entre los pasillos del antiguo Ministerio de Industria, jamás se ha declarado partidario de ningún Gobierno. Ni con el PSOE ni tampoco con el PP. Por eso nunca se arrugó cuando tuvo que defender los intereses de Unión Fenosa.

Esos impulsos por defender la empresa le dieron más de un disgusto.La negativa del ministro de Economía, Rodrigo Rato, a que Unión Fenosa pudiera lanzar una OPA sobre Hidrocantábrico le costó una dura polémica con Economía porque se le cerraban las puertas para que Fenosa compitiera con Iberdrola y Endesa. Tampoco logró convencer al ex presidente de Hidrocantábrico, Martín González del Valle, para que las dos sociedades se fusionasen. No sólo recibió la negativa de González del Valle, sino que tuvo que escuchar la famosa frase del barón de Grado que decía: «Mi copa es pequeña, pero prefiero seguir bebiendo en ella». Hay quien afirma que los asturianos tenían tanto miedo de poder caer en manos de Fenosa que, cuando se frustró la operación, acudieron en peregrinación a Covadonga para dar las gracias.

Tampoco se arredó cuando el presidente de Repsol YPF, Alfonso Cortina, intentó hacerse con el control de Iberdrola. En ese momento dijo que si a Unión Fenosa no se le permitió entrar en Cantábrico, a Repsol tampoco se le podía consentir que invadiera la segunda eléctrica del país.

Victoriano Reinoso llevaba 30 años en la compañía eléctrica que nació de la fusión de Unión Eléctrica Madrileña y Fenosa (Galicia).Pese a su veteranía en la empresa, era uno de los jóvenes cachorros del sector eléctrico, tras la marcha de José María Amusátegui y de Rodolfo Martín Villa. El e Iñigo de Oriol eran los dos históricos del kilovatio y quienes, en estos momentos, marcaban las directrices con la Administración. Reinoso y De Oriol eran además los dos candidatos a ocupar la presidencia de la patronal Unesa.

Julián Trincado, fallecido hace apenas dos años, lo crió a su imagen y lo llevó a la cima de la compañía. Ambos lograron sanear la empresa cuando, tras el parón nuclear de los años 80, la compañía se había metido en unas enormes deudas y apenas si generaba liquidez para amortizar sus enormes inversiones. El reparto de activos eléctricos y una selectiva ingeniería financiera sirvieron para sacar a flote la empresa.

Su trayectoria en el sector eléctrico arrancó en 1972 en Unión Eléctrica Madrileña, desde donde ingresa un año más tarde en Fenosa como ingeniero adjunto al director general. A partir de ahí, desarrolla su actividad en todas las áreas operativas de la compañía hasta que en 1983, siendo presidente Julián Trincado, le nombra director general y, seis años más tarde, consejero delegado. La jubilación de Trincado y la llegada de José María Amusátegui le convierten en la mano derecha del nuevo presidente.

Ha sido siempre el brazo armado de Amusátegui y su principal valedor de los grandes proyectos de la empresa. Gracias a su gestión y al buen olfato por las inversiones, Unión Fenosa fue una de las primeras eléctricas que apostaron por la diversificación y la internacionalización. Su úlima gran apuesta ha sido el gas.Los cerca de 3.000 millones de euros que la empresa iba a emplear en la adquisición de Hidrocantábrico los destinó a la compra de gas en Egipto. Una de sus últimas declaraciones se refirieron a que estaban dispuestos a entrar en el capital de Enagas, pero no a cualquier precio.

Aparte de su enorme lucha por el crecimiento de la empresa, Victoriano Reinoso ha tenido que soportar los ataques hostiles de sus competidores.Por su situación financiera y su cuota de mercado controla cerca de un 17% la compañía ha sido siempre objeto de deseo de varias empresas europeas RWE, EON y ha estado siempre en las quinielas para ser absorbida. Sin embargo, el apoyo recibido por parte del Santander Central Hispano, han servido para mantener su independencia.

La marcha de Victoriano Reinoso no cabe duda de que va a suponer un enorme vacío en el sector eléctrico. Hace dos años, recibió en Montreal (Canadá) el premio Edison, uno de los galardones más prestigiosos de la industria eléctrica mundial. Amaba los caballos, la pintura y la música.

Deja mujer y dos hijos.

14 Mayo 2002

Retrato de un caballero sobre fondo de tristeza

Pilar Cambra

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Una muerte súbita: el galope imparable y letal de un corazón probablemente muy grande, muy entregado… Una cabalgada funesta de su sangre sobre un corcel negro, tan distintos de esos caballos fuertes y dóciles sobre los que recorría los campos gallegos y que criaba en su cuadra de Madrid… Ayer, sin darle tiempo a cumplir los 54 años la fecha era el próximo 9 de julio , un infarto de miocardio mató a Victoriano Reinoso y Reino, presidente de Unión Fenosa desde el muy reciente 22 de marzo. Sus últimas imágenes son como las de siempre, como las que recuerdo de él desde hace tiempo, ligeramente distintas porque las canas se iban hospedando en sus sienes: pero el mismo porte sereno, atildado y tranquilo; la misma sonrisa apacible…

Cada vida es diferente a todas y cada muerte también lo es. El fallecimiento de Victoriano Reinoso fue como un hueco negro abierto en una tarde en la que no parecía ocurrir nada verdaderamente decisivo… Salvo que él, Reinoso, dejaba el vacío de un caballero en un mundo, el económico, que nunca anda sobrado de señoríos, de hombres de lealtad constante y brío emprendedor.

No es sólo que Victoriano Reinoso haya muerto muy joven, demasiado joven; que deje luto imperecedero en su mujer y en ese hijo que le seleccionaba novelas interesantes y películas imprescindibles…Con ser tanto, no es sólo eso: es, además, que ya van quedando menos trayectorias profesionales ejemplares como la suya y que se sentirá el vacío de su cordialidad humanista en muchos puestos.

Gallego, muy gallego era Reinoso «empresario del año» de aquella su región natal en el año 2002, según nombramiento de Actualidad Económica; doctor Honoris Causa por la Universidad de Vigo : con casa en Negreira, en A Coruña, donde nació y aún y siempre le gustaba perderse entre montañas y bosques… Gallego, con sabor agridulce de morriñas,

era el vino blanco dorado, con reflejos de sol entre lluvia fina que criaba y regalaba con generosidad… Gallego era su talante pacífico y obstinado…

Hijo del abogado coruñés Antonio Reinoso Mariño en un rincón bien abrigado del alma guardaba el hijo las nostalgias de las largas caminatas de caza con él, por León y Palencia, a codornices y perdices , Victoriano Reinoso y Reino era ingeniero de Caminos, Canales y Puertos por la Escuela de Madrid y máster por el IESE.A los 25 años ya tenía puestas boca arriba las palmas de sus manos creadoras pintoras de abstracciones bien medidas, meditadas para recibir tarea… Tras un paso fugaz por empresas constructoras, en 1973 ingresa en la que ya sería para siempre su casa: en la entonces Fenosa, como adjunto al director general; su papel fue decisivo en la fusión, en 1982, con Unión Eléctrica; en 1983 se convierte en director general de Unión Eléctrica Fenosa; luego, vicepresidente y consejero delegado de Unión Fenosa; casi ayer, presidente de la eléctrica. Y ayer… Ayer la muerte de un caballero listo y amable, trabajador enconado el tiempo le daba hasta para tres desayunos de trabajo; ordenados: en el primero tomaba zumo; en el segundo, café; en el tercero, agua , exigente la falta de rigor, la frivolidad lo sacaban de sus bien equilibradas casillas y siempre comprensivo con su gente, que era mucha y lo quería bien.

Deseaba lo anunció en su toma de posesión como presidente «seguir avanzando con igual ritmo y tesón en la senda del crecimiento»; su objetivo, recogido en el Plan Millenium, era duplicar el beneficio de Unión Fenosa en los próximos cuatro años. Porque Victoriano Reinoso jamás dormitó en el sillón del éxito: «Si algo lleva mucho tiempo haciéndose de una forma decía esa es ya razón suficiente para cambiarlo». Ahora, ya en la verdadera Paz, Victoriano Reinoso pintará nubes para Dios…

Se sentirá el vacío de su cordialidad humanista en muchos puestos, en muchos corazones