29 octubre 1890

Sus fundadores serán Felipe Ducazcal y Augusto Suárez de Figueroa

Nace el periódico EL HERALDO DE MADRID llamado a ser el órgano de expresión del político José Canalejas

Hechos

El 29.10.1890 se publicó el primer número del periódico EL HERALDO DE MADRID.

A los lectores

EL HERALDO DE MADRID (Director: Augusto Suárez de Figueroa)

29-10-1890

Leer

Venimos en un momento en que la libertad está asegurada en España.

Todo lo que puede garantizar el derecho individual y colectivo, ha tomado forma de ley.

Los conservadores mismos no se asustan de la libertad y al gobernar con ella, han comprendido que es más fácil el ejercicio del poder tolerando, que reprimido.

Ya no existen problemas políticos desde que se han restablecido, con prudentes modificaciones, las leyes revolucionarias.

La Reina Regente ilumina el trono con el nimbo misterioso de sus virtudes.

Para coronar su obra de paz, no falta sino abrir los brazos y considerar como hermanos a todos los que viven en la emigración, desde D. Manuel Ruiz Zorrilla, al último soldado de Albuera.

Pero si los problemas políticos han acabado puede decirse que no han empezado aún, los económicos y sociales. El país comprende y con razón que los españoles que durante veinte años gobiernan, han tenido no menos buena fe que desgracia.

Los intereses materiales, en sus manos  han ido de mal en peor y su deplorable administración ha sido causa del empobrecimiento y miseria de España.

Le han enseñado al país sus derechos; pero no han desarrollado sus intereses.

Una gran masa de españoles cree que ya es peligroso tenerlos al frente de los negocios públicos; otra permanece indiferente; la más pequeña, compuesta de deudos, paniaguados y parásitos, los defiende.

La pobreza de nuestro Erario y antiguas desdichas han menguado la cifra de nuestros buques. Es preciso hacer barcos.

A su lado nos tendrá todo el que piense así.

Respecto del personal, seremos imparciales.

Tendremos aplausos para los individuos de la marina triunfante, pero nuestra simpatía y nuestro corazón están con la marina militante, porque consideramos más heroica la vida del mar, que la del Ministerio.

Y con eso concluimos pidiendo a nuestros compañeros de la prensa un poco de cortesía a cambio del profundo respeto e inmenso cariño con que hemos de tratarles.