28 julio 1996

Humillante derrota para Nueva Izquierda y Los Verdes por quedar por detrás de la candidatura del Colectivo Andaluz de Izquierdas

10ª Asamblea de Izquierda Unida en Andalucía – Antonio Romero logra ser elegido nuevo líder frente a dos rivales

Hechos

  • El 28.07.1996 la X Asamblea de Izquierda Unida – Los Verdes – Convocatoria por Andalucía designó a D. Antonio Romero nuevo Coordinador regional.

Lecturas

El 28 de julio de 1996 se celebra la VI asamblea de Izquierda Unida en Andalucía (comunidad donde se presenta como Izquierda Unida Los Verdes-Convocatoria por Andalucía) tras la dimisión en abril de su hasta ahora coordinador general D. Luis Carlos Rejón Gieb por los malos resultados de las últimas autonómicas. El Sr. Rejón Gieb representa dentro de IULV-CA el sector más agresivo hacia el PSOE junto con Dña. Concha Caballero Cubillo y el alcalde de Marinaleda D. Juan Manuel Sánchez Gordillo, alcalde de Marinaleda.

El resultado de la votación para elegir al nuevo coordinador general fue el siguiente:

  • Antonio Romero Ruiz (PCE) – 312 votos.
  • Antonio Morillas Rodríguez (Colectivo Andaluz de la Izquierda) – 68 votos.
  • Francisco Garrido (PDNI + Los Verdes) – 45 votos.

Con este resultado la dirección de Izquierda Unida en Andalucía seguirá fiel al Sr. Anguita. Llama la atención la candidatura del actor Sr. Morillas Rodríguez que quedó por delante de la del ecologista D. Francisco Garrido, que se presentaba respaldado por el PDNI, el partido del sector ‘Nueva Izquierda’.

CANDIDATOS A COORDINADOR GENERAL DE IZQUIERDA UNIDA – LOS VERDES – CONVOCATORIA POR ANDALUCÍA:

antonio_romero D. Antonio Romero –  66,8% de los votos de los compromisarios.

antonio_morillasIandaluza D. Antonio Morillas – 14,5% de los votos de los compromisarios

francisco_garrido D. Francisco Garrido – 9,6% de los votos de los compromisarios

LAS FAMILIAS

La lista de D. Antonio Romero contaba con el apoyo más importante: el del Partido Comunista de España en Andalucía (PCA), al que además podía sumarse el apoyo de los otros principales partidos de IU menos el PDNI, es decir: el Partido de Acción Socialista (PASOC) y la Candidatura Unitaria de Trabajadores del Sr. Sánchez Gordillo (CUT), de poco peso político, pero mucho moral.

La lista de D. Francisco Garrido, el líder de Los Verdes en Andalucía, contaba con el apoyo del Partido Demócrata de la Nueva Izquierda (PDNI) que en Andalucía lideraba D. Jerónimo Andreu y era la más partidaria a pactos con el PSOE.

Mientras que la inesperada candidatura del Sr. Morillas representaba a un nuevo sector, más radical izquierdista, que se denominaba Colectivo Andaluz de Izquierdas.

29 Julio 1998

El jardinero de la «casa común»

Leer

Ya tiene lo que quería. Antonio Romero había asimilado mal su fracaso en la lucha por la alcaldía de Málaga -lo de «alcalde moral» fue una de las mayores estulticias oídas últimamente en la muy estúpida política andaluza- y necesitaba algo más de cancha para lucir una talla política que, pese a su superficialidad y a su evidente tendencia a la precipitación verbal, nadie puede negarle. La ha obtenido, aún a costa de desafiar el designio interno del mismísimo Anguita, por la vía -bien leninista- de ganarle por la mano. Antes de que el califa abriese la boca, Romero y Felipe Alcaraz utilizaron los viejos recursos del aparato comunista para crear, a trancas y barrancas, las «condiciones objetivas» de un asalto al poder. Poco importaba que ese poder fuera el maltrecho palacio de invierno de Izquierda Unida en Andalucía; en todo caso, se trataba de una experiencia piloto que bien puede valer la pena. El que pueda entender, que entienda.

La asamblea andaluza de Izquierda Unida tiene tres vencedores claros: el propio Romero, que pasa de «alcalde moral» a coordinador real y bien puede acabar siendo también alcalde de verdad si alcanza un pacto con los ahora cercanos socialistas; Felipe Alcaraz, auténtico muñidor de la operación, que refuerza su control desde el aparato del PCA, aleja a Luis Carlos Rejón del puente de mando y de paso -hay amores que matan-, liquida el posible ascenso de su ex compañera Concha Caballero; y Sánchez Gordillo, el alcalde de Marinaleda, que ha conseguido un poder interno que ni soñaba alcanzar antes de la crisis, convirtiéndose en verdadera bisagra.

Los perdedores, amén del propio Luis Carlos Rejón, que ya lo era cuando tuvo que dimitir, son la mentada Concha Caballero, las minorías -Los Verdes y Nueva Izquierda están ya más fuera que dentro de la coalición- y acaso el propio Anguita, que, puesto en evidencia en su propio terreno, queda ya al alcance de cualquier atrevimiento en sus numerosos frentes críticos abiertos por todo el Estado.

También, claro, ha perdido una política, la del alejamiento del Partido Socialista como fórmula para recuperar la identidad y evitar la abducción hacia la casa común de la izquierda.

A partir de ahora, se mire como se mire, Izquierda Unida-Convocatoria por Andalucía va a estar de nuevo pendiente como un satélite del movimiento socialista. El jardinero de la casa común está ya podando los ramajes de la entrada.