16 julio 2015
Derrota de los partidarios del pacto con Ciudadanos encabezados por Irene Lozano y Toni Cántó
Andrés Herzog, el candidato de Rosa Díez, se convierte en el nuevo líder de UPyD tras ganas las primarias a otros tres candidatos
Hechos
El 11.07.2015 se celebraron las primarias de Unión Progreso y Democracia (UPyD) en las que D. Andrés Herzog fue elegido nuevo Portavoz del partido.
Lecturas
El 11 de julio de 2015 se celebran las primarias para el liderazgo en el partido político Unión Progreso y Democracia (UPyD) tras la retirada de su fundadora Dña. Rosa Díez González después del desastre que supusieron para la UPyD las últimas elecciones municipales y autonómicas en las que perdieron toda su representación relevante (incluyendo comunidad y ayuntamiento de Madrid).
Para sucederla se presentan dos candidatos a ‘Portavoz’ de UPyD, el mayor cargo ejecutivo en la formación magenta, D. Andrés Herzog Sánchez, que era el adjunto de la Sra. Díez González y aparece como ‘candidato oficial’ y Dña. Irene Lozano Domingo, que aparece como candidata crítica y que cuenta como compañero de candidatura con D. Antonio Cantó García del Moral (‘Toni Cantó’).
El resultado es el siguiente:
⦁ D. Andrés Herzog Sánchez – 802 votos.
⦁ Dña. Irene Lozano Domingo – 745 votos.
El resultado convierte a D. Andrés Herzog Sánchez en nuevo líder de UPyD y candidato de este partido a la presidencia del Gobierno a pesar de que el sector crítico y amplios sectores de su electorado eran partidairos de que UPyD se aliara con Ciudadanos en las elecciones, algo a lo que siempre se opuso la fundadora del partido.
Los perdedores de las primarias abandonan UPyD. El Sr. ‘Toni Cantó’ se pasará a Ciudadanos, mientras que Dña. Irene Lozano Domingo inicia contactos con el PSOE.
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IRENE LOZANO DOMINGO, DERROTADA
Dña. Irene Lozano Domingo, apoyada por el Sr. Toni Cantó, fue el principal rival de los oficialistas por el control de UPyD era partidario de la coalición con Ciudadanos (posición radicalmente contraria a la que la Sra. Lozano había mantenido en el pasado). Durante las semanas previas a la votación denunció haber sido espiada por la dirección y llego a solicitar al comité de disciplina la suspensión de militancia de Dña. Rosa Díez.
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RESULTADOS DE LA VOTACIÓN:
D. Andrés Herzog – 802 votos
Dña. Irene Lozano Domingo – 745 votos
D. José Antonio Rueda – 225 votos
D. Juan Manuel Domínguez – 61 votos
El Análisis
Una victoria de Herzog que sabe a derrota
El 11 de julio de 2015, UPyD celebró unas primarias que, más que decidir un liderazgo, parecieron un capítulo de una telenovela de alto voltaje. Con Rosa Díez anunciando su retirada tras el descalabro en las elecciones municipales y autonómicas, el partido se encontraba en una encrucijada. Los candidatos para sucederla eran Andrés Herzog, el delfín oficialista, y la crítica Irene Lozano, respaldada por el siempre teatral Toni Cantó.
El resultado fue claro: Herzog se impuso con 802 votos frente a los 745 de Lozano. Sin embargo, este no es un triunfo para celebrar con fuegos artificiales. Herzog, apenas conocido fuera de los círculos de UPyD, se enfrenta a una tarea hercúlea para mantener a flote un barco que hace aguas por todos lados.
Por otro lado, Lozano y Cantó, los rebeldes que pedían una alianza con Ciudadanos, han recogido sus bártulos y se han marchado. Cantó ya ha hecho las maletas y se ha unido a Ciudadanos, mientras que Lozano está tanteando el terreno con el PSOE. ¡Vaya panorama!
Los electores de UPyD, viendo el espectáculo, están haciendo fila para subirse al tren naranja de Ciudadanos, dejando a Herzog con un partido que parece una fiesta a la que nadie quiere asistir. Y es que, aunque Herzog haya ganado la batalla interna, la guerra por la relevancia política parece perdida.
En definitiva, estas primarias han dejado claro que en UPyD todos pierden. Herzog hereda un partido fracturado y al borde de la irrelevancia, mientras que los críticos buscan nuevas aventuras políticas, dejando a los fieles de UPyD con un líder que, sin duda, tiene mucho trabajo por delante para convencer a un electorado que se va desangrando hacia otras opciones. La moraleja de esta historia: a veces, ganar no es suficiente para salir victorioso.