13 diciembre 2007

El proyecto corre a cargo de Mansilla, el marido de la presentadora Elena Sánchez

El presidente de RTVE, Luis Fernández, anuncia la venta de las sedes de la televisión pública para unificarlas en un único inmueble y le acusan de pretender un pelotazo

Hechos

El 13 de diciembre de 2007 se hizo público que el presidente de CRTVE, D. Luis Fernández, había mandado una carta a los empleados para explicar la contratación de Pedro Pablo Mansilla.

Lecturas

El 20 de marzo de 2007 Fernández compareció por primera vez en la Comisión de Control del Congreso de los Diputados para anunciar la propuesta estrella de su proyecto: el cambio de sede de RTVE para crear un solo centro de producción, que corrigiese las duplicidades y que incorporase todo el arsenal tecnológico disponible en ese momento para situar el ente a la vanguardia de los medios de comunicación: «Pretendemos integrar todos los servicios en una nueva sede en Madrid acorde con las necesidades y retos de una gran empresa líder de comunicación del siglo XXI (…). Queremos que la nueva sede central sea una obra de arte arquitectónica emblemática, diseñada por un arquitecto español de vanguardia y con gran proyección internacional».

El cambio de sede ya había sido recomendada por Boston Consulting y suponía desprenderse de los distintos inmuebles de Prado del Rey y de Torrespaña (que incluía la torre de transmisiones el Pirulí), sin olvidar el edificio de los Estudios Buñuel y el viejo edificio de Paseo de La Habana (estas últimas no eran propiedad de la CRTVE, dado que, al igual que las antiguas oficinas del NODO, estaban a cargo del Patrimonio del Estado).

Luis Fernández logró el apoyo del nuevo Consejo de Administración para crear la oficina de la nueva sede y, al frente, situó a Pedro Mansilla Izquierdo que, anecdóticamente, era marido de la veterana presentadora de TVE Elena Sánchez Caballero. La clave para entender su nombramiento fue que Mansilla había sido director general de Instituciones Penitenciarias en el Gobierno de Felipe González y llevó a cabo la amortización de las cárceles antiguas y la construcción de nuevos centros penitenciarios, creando una sociedad de capital público que se encargaba de calificar los terrenos de las cárceles que se cerraban, de venderlos y, con esos ingresos, sufragar los costes de los nuevos centros penitenciarios. Ese modelo querían trasladarlo a RTVE.

La misión de Mansilla era, por tanto, concebir un proyecto para obtener todas las eficiencias de gestión posible. Además, aprovechar los beneficios de la amortización y venta de los tres centros de Madrid, que entraban en la operación. Mansilla contrató a Luis Rodríguez-Avial para que se encargase de la elaboración de todos los documentos y proyectos técnicos necesarios para llevar a cabo la recalificación de los suelos de los centros.

La primera voz crítica del proyecto volvía a ser, nuevamente, la del trabajador de TVE comunista José Manuel Martín Medem, que en una carta publicada el 23 de marzo de 2007 en El País consideraba que con la venta de los estudios de Prado del Rey, Buñuel y Torrespaña iban a renunciar a la producción propia (y, a su vez, fomentar a las productoras amigas). Además, ningunearían el esfuerzo que se acababa de hacer en Prado del Rey para integrar un bloque de digitalización. La furia de Martín Medem no era tanto con Fernández y Mansilla por proponerlo, como con los consejeros de UGT y CCOO en la CRTVE por aceptarlo. Pero tampoco se podía negar el mal estado de las viejas instalaciones de la Corporación: los estudios 1, 2 y 3 de Prado del Rey estaban infectados de amianto, el edificio de RNE también tenía aluminosis y los estudios Buñuel, se caían a pedazos.

El 29 de septiembre El País publicó un primer reportaje sobre el tema, con una valoración positiva tanto del proyecto como de la persona responsable, Mansilla, al que definieron como «médico promotor de empresas de índole cultural e impulsor de proyectos de renovación de infraestructuras públicas».

Pero el periódico del Grupo PRISA, que hasta ese momento había dado una cobertura muy favorable de la TVE zapateriana, dio un volantazo en diciembre, coincidiendo con la decisión de Luis Fernández de pujar por la compra de los derechos de la Champions ante Sogecable (del Grupo PRISA). PRISA tenía un fuerte contencioso con Mediapro por los derechos de la Liga de Fútbol, y se encontró con que TVE le abrió otro.

El 4 de diciembre El País declaró la guerra a la nueva CRTVE con un reportaje titulado: «RTVE encarga a Mediapro que distribuya sus canales en América», en el que se presentó a Luis Fernández como un agente de las productoras amigas de Imagina. Fernández ordenó al director de Informativos, Fran Llorente, una réplica para el día después. Este, que sintonizaba bien con Fernández, emitió sendas piezas en el Tele- diario 1, de Ana Blanco, y en el Telediario 2, de Lorenzo Milá, en las que se acusaba a El País de dar datos falsos y de negarse a publicar su carta de réplica. En los ocho años de TVE aznarista nunca se atrevieron a usar minutos de emisión para defenderse de los ataques de la prensa. Enric Sopena y María Antonia Iglesias sí lo hicieron.

El 6 de diciembre El País volvió al ataque contra TVE. Esta vez el objetivo fue Pablo Mansilla. El periodista Francisco Mercado (que se hizo popular en redes sociales en 2016 por publicar en OkDiario la exclusiva de la supuesta cuenta en Granadinas de Pablo Iglesias) publicó un reportaje en el que el mismo Mansilla, que tres meses atrás era presentado como un médico impulsor de proyectos culturales, pasó a ser definido por el mismo periódico como un polémico empresario inmobiliario designado a dedo por Fernández, con controvertido pasado y del que se dejaba caer la idea de que podía tener intereses alternativos en el proyecto, deslizando la idea de un pelotazo. Mansilla mandó una carta a El País aclarando que no deseaba polemizar, pero sí garantizar la transparencia en el proceso.

El periodista de PRISA Miguel Ángel Aguilar publicó dos piezas en El Siglo, el 14 y el 21 de enero de 2008, donde deslizó la idea del pe- lotazo y se dio la futura ubicación de la nueva sede única de la CRTVE, en la zona de La Mina del Cazador, en Aravaca. Acertaba Aguilar en que esa zona fue estudiada, pero le faltó decir que fue descartada. La zona elegida fue una finca perteneciente al Ministerio de Defensa, sita en unos terrenos lindantes con la Ciudad de la Imagen, que formaba parte de la operación Campamento. El acuerdo para iniciar el proyecto entre la oficina y la ministra de Defensa, Carme Chacón (esposa de Miguel Barroso), se firmó a finales de 2008.

Paralelamente, la RTVE de Luis Fernández anunció el 11 de julio que se había hecho con los derechos de la Champions League para la televisión pública. La ira de PRISA fue contundente: «¡Con el dinero de todos!», se indignaba el editorial de El País. «¡Esto no es deporte, es una decisión política!», protestaron en Noticias Cuatro. «Muestra de despilfarro, amiguismo y competencia desleal!», rugían los boletines de la Cadena SER.

Los buitres de los alrededores estaban convencidos de que en esa operación inmobiliaria se debía cocer algún pelotazo, equiparable a los atribuidos a Florentino Pérez. Sabían que en la oficina de la nueva sede de Mansilla se presentaban empresas financieras e inmobiliarias de primerísimo nivel para interesarse por el proyecto. El procedimiento acordado por Fernández y Mansilla para la enajenación de los bienes fue el del concurso público, de acuerdo con la valoración realizada por las tasadoras independientes de los terrenos (los Estudios Buñuel se situaron por encima de los 100 millones de euros).Y para evitar que nadie pen-sara que podía haber ningún plan de plus a los negociadores, Fernández y Mansilla establecieron que la totalidad de los ingresos obtenidos de las ventas de los antiguos edificios serían dedicados a la construcción del nuevo centro. La única ganancia económica personal que tenía Mansilla en el proyecto era un nada despreciable sueldo que le asignaron como director de aquella oficina.

Dado que la tormenta económica, que estaba a punto de llegar, y el desplome inmobiliario se llevaron por delante el proyecto de la nue- va sede, especular sobre qué beneficios podría haber supuesto para la CRTVE es un callejón sin salida, como también lo es imaginar cómo hubiera podido cambiar RTVE con una nueva sede.

23 Marzo 2007

La 'bombonera'

José Manuel Martín Medem

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Confirmado: la reforma de Zapatero desembocará en una RTVE bonsai. Producirá bombones ilustrados para adornar el escenario de la radiotelevisión comercial pero no la alimentación de fibra informativa imprescindible para la buena digestión de la democracia. El presidente Fernández ha anunciado la construcción de la bombonera: una nueva sede emblemática para agrupar los reducidos recursos de RTVE. Venderán Prado del Rey, Torrespaña y los Estudios Buñuel para pagar un nuevo edificio «notablemente más pequeño», «una obra de arte arquitectónica que simbolice el compromiso de RTVE con la modernidad».

Prescindir de Prado del Rey y de los Estudios Buñuel significa renunciar a la producción de programas, estableciendo como definitivo el negocio de las empresas que se benefician de la contratación externa. Vender Torrespaña es absurdo porque se acaba de inaugurar un nuevo edificio y se está instalando la digitalización de los Servicios Informativos de TVE. Si a RTVE le amputan más de la mitad de la plantilla y la producción de programas para TVE y reducen drásticamente la dimensión de RNE y la proyección internacional de la radiotelevisión pública, lo que queda cabe holgadamente en Torrespaña.

Y además: serán necesarios dos o tres años para construir la nueva sede e instalar en ella a la TVE jibarizada y a la RNE raquítica. La operación podría ser rematada por un Gobierno del PP. ¡La descojonación total!.

29 Septiembre 2007

Mansilla busca 100.000 metros para ubicar la nueva RTVE

EL PAÍS (Director: Javier Moreno)

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Aún no se sabe dónde estarán ni cómo serán las nuevas instalaciones de Radiotelevisión Española, pero sí quién va a dirigir la operación. El presidente del Corporación estatal, Luis Fernández, se lo encargó ayer a Pedro Pablo Mansilla, de 53 años y médico. Mansilla ha promovido empresas de índole cultural y en la Administración ha impulsado distintos proyectos de renovación de infraestructuras públicas. En el ámbito de la creación de proyectos urbanísticos en el campo privado ha desarrollado, entre otros, el destinado a ser la sede de la Librería Fuentetaja, cuya sociedad él gestiona.

En el campo político Mansilla fue director del Gabinete del ministro de Sanidad, Ernest Lluch, y director de Alta Inspección del citado ministerio, desde 1982 hasta 1990. Y director general de Instituciones Penitenciarias, de 1990 a 1994. En ese periodo puso en marcha el plan de amortización de centros penitenciarios, para renovar y modernizar las cárceles españolas.

Su misión es crear una nueva sede que unifique los distintos establecimientos de RTVE en la capital de España. La condición para poner en marcha este proyecto es rentabilizar al máximo las principales sedes patrimoniales de la corporación: la de Prado del Rey, que cubre casi doscientos mil metros cuadrados, Torrespaña (El Pirulí), que tiene alrededor de 26.000 metros cuadrados, y los Estudios Buñuel, con 21.000 metros cuadrados, en el Paseo de La Habana, donde comenzó su historia Radiotelevisión Española.

La idea, expresada en diversas ocasiones por el presidente, Luis Fernández, es hacer un edificio singular, que prepare la radio y la televisión estatales «para el mundo digital» y actualice los medios tecnológicos de dicha compañía.

Luis Fernández guarda celosamente el nuevo emplazamiento. EL PAÍS ha sabido, no obstante, que tendrá alrededor de 100.000 metros cuadrados. Será, como adelantó Fernández en el Congreso de los Diputados al anunciar la venta de los actuales inmuebles, «un edificio emblemático del que nos podamos sentir orgullosos tanto los trabajadores de RTVE como el conjunto de los ciudadanos». El presidente de la Corporación ha comunicado tanto al ayuntamiento de Pozuelo, donde está la principal de las sedes de RTVE, como a la Comunidad y al Ayuntamiento de Madrid la designación de Mansilla.

06 Diciembre 2007

Un promotor, ex cargo del PSOE, dirige la gran operación inmobiliaria de RTVE

Francisco Mercado

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Luis Fernández no informó a los consejeros de los negocios de Pedro Mansilla

Pedro Pablo Mansilla, ex alto cargo del PSOE y promotor inmobiliario en la actualidad, ha sido contratado a dedo para dirigir la macrooperación urbanística de la venta de las propiedades inmobiliarias de RTVE en Madrid -200.000 del millón de metros cuadrados que posee- y la compra de solares para su nueva sede. Mansilla figura como responsable o accionista de una veintena de sociedades en su mayoría inmobiliarias, según el registro mercantil. Varias de ellas han realizado proyectos en la Comunidad de Madrid y tienen como sede central el municipio de Pozuelo, donde se asientan las principales instalaciones de RTVE, cuya venta forzará una recalificación urbanística en una de las zonas más caras y privilegiadas de España.

Mansilla fue nombrado personalmente por el presidente de RTVE, Luis Fernández, con quien afirma mantener amistad desde hace años. El ex alto cargo socialista y ahora promotor inmobiliario no ve ninguna «incompatibilidad jurídica» entre sus negocios inmobiliarios y el cargo de libre designación que ha aceptado desempeñar para RTVE. «No tengo ninguna intención de aprovecharme de esta operación, como no lo he hecho durante toda mi vida en la Administración Pública», proclama.

Pistoletazo de salida

Mansilla se dedicó a la actividad privada inmobiliaria tras su paso por la Dirección General de Prisiones, donde diseñó el plan para cerrar 40 cárceles, y construir 19 nuevas prisiones.

RTVE sólo prevé inicialmente sacar a la venta 200.000 metros cuadrados (véase gráfico) del millón que posee en Madrid.

La finalidad es doble: concentrar en una sola sede más eficiente todas las instalaciones que posee en Madrid y hacer caja para sanear las cuentas.

Varios consejeros de RTVE consultados por este periódico temen que esta operación, a la que sólo se ha opuesto formalmente el PP, sea el pistoletazo de una de las mayores operaciones inmobiliarias de suelo público de los últimos tiempos.

Mansilla asegura que el proceso está en fase muy incipiente, que las instituciones (Ayuntamientos de Madrid, Pozuelo y Comunidad) le están ofreciendo terrenos alternativos, que el suelo que venderá RTVE costará mucho más que el que compre el ente público, y que, cree, al final, se hará por un sistema de subasta.

Lo sorprendente para todos los consejeros consultados por este diario es que el presidente de RTVE haya nombrado a dedo para esta macrooperación inmobiliaria a un amigo suyo y promotor privado en lugar de acudir a las empresas que tiene el Estado para vender suelo (Segipsa) o al jefe de patrimonio de RTVE. Pese a estar muy bien relacionado con históricos ex dirigentes socialistas madrileños como José Acosta (ex presidente del partido en Madrid durante muchos años) o Jesús Espelosín (ex concejal de Urbanismo de la capital con el PSOE), no se le considera en absoluto un hombre del partido, ni del Gobierno. Sólo es de la máxima confianza de Fernández, cuya versión ha solicitado este diario sin éxito desde el pasado martes.

Fernández repartió un currículo de Mansilla que omitía su perfil inmobiliario. Tampoco informó que cesó como gestor público en 1994 después de que se airearan presuntas anomalías en su labor:

Mansilla encargó a los presos de Ocaña que construyeran muebles para su chalé particular. En su defensa, alegó que «pagó religiosamente» el trabajo realizado por los reclusos. Este diario ha consultado con varios consejeros de RTVE: todos desconocían su dedicación privada al negocio inmobiliario con sede en el corazón de la operación, Pozuelo, y con intereses y operaciones en diversos municipios de de Madrid.

Pedro Pablo Mansilla puede coincidir en sus trabajos para gestionar la compraventa de suelo para RTVE con clientes con los que haya tenido relaciones anteriores como promotor inmobiliario.

08 Diciembre 2007

Puntualización

Miguel Somovilla

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Acerca de la noticia sobre RTVE y la operación inmobiliaria que publicaron ayer [por anteayer] en su diario [Un promotor, ex cargo del PSOE, dirige la gran operación inmobiliaria de RTVE], deseo puntualizar lo siguiente.

De los dos titulares de la información, uno de ellos es completamente falso. Luis Fernández sí informó a los consejeros de que Pedro Pablo Mansilla es promotor urbanístico, consultor, editor y productor cultural. Lo hizo, además, en dos ocasiones, el 2 de septiembre y verbalmente, en la sesión ordinaria del día 5 de septiembre del propio Consejo. Es más – aunque no menos insólito – fue EL PAÍS el primer medio que dio esta noticia (29 de septiembre de 2007) y ya señalaba entonces algunos detalles de la trayectoria profesional de Pedro Pablo Mansilla: «Ha promovido» decía este periódico, «empresas de índole cultural y en la Administración ha impulsado distintos proyectos de renovación de Infraestructuras públicas. En el ámbito de la creación de proyectos urbanísticos en el campo privado ha desarrollado, entre otros, el destinado a ser la sede de la Librería Fuentetaja cuya sociedad él gestiona».

Miguel Somovilla.

Director de Comunicación RTVE.

11 Diciembre 2007

Precisiones

Pedro Pablo Mansilla Izquierdo

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He leído con atención la información que publicó EL PAÍS el 6 de diciembre [Un promotor, ex cargo del PSOE, dirige la gran operación inmobiliaria de RTVE]. (…) En la información de referencia se han deslizado diversos errores importantes. Por ejemplo, no tengo empresas inmobiliarias en Pozuelo, sino que tengo mi domicilio particular en dicho término; no me ha sido atribuida la responsabilidad de vender directamente terrenos de la Corporación, sino de proponer al Consejo las alternativas más adecuadas para que dicho órgano decida definitivamente. (…)

En todo caso, no es mi propósito rectificar tales errores, ni enriquecer o precisar lo que se cuenta en la información sobre mi currículo empresarial que, desde luego, es bastante más matizado, porque no creo que merezca el menor interés de sus lectores.

Sólo deseo destacar dos extremos de mi personalidad profesional: no existe en mi trayectoria ni una sola mácula que me condicione para el encargo que me ha hecho la Corporación RTVE; y, segundo, nadie tiene derecho a pensar que el Proyecto Nueva Sede vaya a hacerse de modo torcido o con vulneración de los intereses públicos.

Sin embargo, esta carta me ha parecido pertinente a los solos efectos de compartir con las informaciones publicadas la circunstancia cierta de que el traslado de sede de RTVE es una operación inmobiliaria importante (del nivel de otras bien conocidas ejecutadas en Madrid en los últimos años) y, siendo así, es necesario plantearla desde el principio con la mayor transparencia a efectos de asegurar el total respeto a los intereses generales y el apartamiento completo de cualquier interés privado injustificable.

13 Diciembre 2007

El presidente de RTVE justifica la designación a dedo de Mansilla

Luis Fernández

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El Consejo de Administración de RTVE abordará en su próxima reunión, prevista para el día 20, las gestiones llevadas a cabo para la construcción de una nueva sede y de los contratos de la Corporación con determinadas productoras. Varios consejeros han manifestado su intención de preguntar al presidente de RTVE, Luis Fernández, sobre estos dos asuntos, justo después de que EL PAÍS publicara sendas informaciones tituladas RTVE encarga a Mediapro que distribuya sus canales en América (4 de diciembre) y Un promotor, ex cargo del PSOE, dirige la gran operación inmobiliaria de RTVE (6 de diciembre).

Al hilo de estas noticias, el presidente de RTVE ha remitido una carta a toda la plantilla -fechada el pasado martes- en la que justifica el nombramiento a dedo de Pedro Pablo Mansilla (sin citarle expresamente) como responsable de la denominada Oficina Técnica de la Nueva Sede.

La empresa audiovisual equiparó el pasado julio este proyecto con el que llevaron a cabo grandes corporaciones como Santander, BBVA, Telefónica o Repsol para la concentración de sus actividades en un edificio. Y de paso, decía el documento, la obtención de plusvalías.

Fernández explica ahora a los trabajadores que la construcción de la nueva sede es necesaria por razones de «eficiencia, austeridad, modernización y servicio público» y agrega que esta operación ha sido «limpiamente concebida» en interés de RTVE. «Imputar hipotéticas y futuras especulaciones urbanísticas, operaciones económicas de ventaja o ilegalidades de cualquier clase es, ante todo, una arbitrariedad que no merece ser calificada de información periodística y que debería ser desterrada de la práctica de cualquier medio de información serio».

Fernández dice querer salir al paso «del ataque que la Corporación ha recibido desde el periódico EL PAÍS». Se queja de que tales informaciones «han falseado la realidad». EL PAÍS dio cuenta de que Mansilla, que había ocupado altos cargos con el PSOE, figura como responsable o accionista de una veintena de sociedades, en su mayoría inmobiliarias. Mansilla dijo no ver «incompatibilidad jurídica» entre sus negocios inmobiliarios y la dirección de la gran operación urbanística que se teje alrededor de Prado del Rey, Torrespaña y los Estudios Buñuel.

La creación de la Oficina Técnica del Proyecto de Nueva Sede, acordada por el Consejo de Administración de RTVE, es un órgano «sin personalidad» dependiente directamente del presidente. Paralelamente, se constituyó una Comisión de Seguimiento del Proyecto de Nueva sede integrada por cuatro consejeros. El acuerdo adoptado por el consejo especificaba que el director de la Oficina comparecería ante dicha comisión al menos una vez al mes para informar de la marcha de los trabajos y negociaciones. Sin embargo, fuentes del consejo aseguran que la comisión sólo se ha reunido una vez, el día de su constitución.

Fernández aprovecha también la misiva para defenderse de las acusaciones de «supuesto favoritismo» hacia determinados grupos de comunicación. EL PAÍS informó de la cesión que hizo RTVE a una empresa filial de Mediapro (accionista de La Sexta y productora del programa de TVE-1 España directo) de la distribución en América del Canal Internacional y del informativo 24 Horas. Un portavoz de RTVE esgrimió razones de «ahorro económico y mejora de la gestión» para rescindir los contratos comerciales con los anteriores adjudicatarios.

Ante la pregunta de la diputada del PP Macarena Montesinos en el Pleno del Congreso para saber si el Gobierno había tenido algo que ver la cesión de la exclusiva a Mediapro, el vicepresidente segundo, Pedro Solbes, contestó: «La ley establece de forma muy clara cuál es el sistema de toma de decisiones en TVE y desde luego, al Gobierno no le corresponde ninguna decisión». Solbes sugirió a Montesinos que trasladara la pregunta al presidente de la Corporación, que «sin duda le dará las razones técnicas de las decisiones».

14 Enero 2018

La Mina del Cazador (1)

Miguel Ángel Aguilar

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La Mina del Cazador, en Aravaca, aparece como el único suelo disponible en Madrid para la reubicación de RTVE.

Érase una vez una Corporación de RTVE nacida de la Ley promovida por el Gobierno del presidente José Luis Rodríguez Zapatero mediante la cual quedaba exonerada de todas las deudas después de haber visto aligerada su plantilla laboral por un amplio Expediente de Regulación de Empleo (ERE).

En aquel tiempo los padres de Pulgarcito, que vivían en un bosque, apenas podían subsistir como leñadores. Había mucho desconcierto en todo el contorno porque la definición del servicio público era confusa en la Ley, abusiva en el llamado ‘mandato marco’ y quedaba aplazada en buena parte a cuanto dijera el contrato programa pendiente de redactarse, mientras que la legislatura actual llegaba a su término inexorable.

Al mismo tiempo, la Bella Durmiente parecía perdida sin recuperación posible de su encantamiento cuando acertó a pasar por aquella espesura de inextricables tramas administrativas un príncipe que quedó maravillado de la hermosa figura. Así que descabalgando besó a la muchacha, que en ese momento recuperó la vida. Entonces, la invitó a subir a la grupa de su montura y la condujo al Palacio del Congreso de los Diputados en la carrera de San Jerónimo, donde como por maravilla hubo consenso excepcional entre el Grupo Parlamentario Popular para el nombramiento de Luis Fernández como presidente de la recién nacida Corporación.

Una vez en su castillo de Prado del Rey, el presidente ya poseído de su cargo quiso hacer inventario y comprobó que sus dominios incluían hectáreas y hectáreas en El Pirulí, Aravaca, Pozuelo, Arganda, Paseo de La Habana y tantos y tantos otros. Entones se acordó del poeta Rubén Darío y se preguntó: ¿Cómo habrá en Oriente, manos y coronas, tronos para tantos? También se cruzó por su mente la figura de Luther King y como él exclamó aquello de I Have a dream. Añadir valor era un caso de conciencia.

Se trata de evitar que las suculentas parcelas urbanísticas pudieran convertirse en calabazas, como se contaba que había sucedido con la carroza de la Cenicienta desatenta con el horario. De otros reinos poderosos como el del Real Madrid Club de Fútbol en Valdeberas, el del Banco de Santander en Boadilla del Monte, o el de Telefónica en Las Tablas, le llegaban al presidente noticias de la edificación de prodigiosas Ciudades Corporativas, que sustituían las sedes dispersas de sus antiguas instalaciones generando además espléndidas plusvalías.

Dispuesto a seguir por esa admirable senda llamó a un operador urbanístico de toda su confianza, Pedro Pablo Mansilla, a quien le señaló los ejemplos anteriores y le dijo que buscara suelo para un nuevo emplazamiento de las modernas instalaciones que ambicionaba levantar en aras siempre de la mayor economía y eficiencia y para el mayor contento de todos. Entonces Mansilla, sabedor de sus responsabilidades, mandó llamar a Luis Rodríguez Avial para elegirle gestor de la operación urbanística de reubicación de la Corporación RTVE.

(En el capítulo siguiente contaremos cómo apareció el único suelo existente en Madrid – La Mina del Cazador – en Aravaca – que no resulta ser de protección especial, ni tampoco está calificado para uso alguno, distinguido bajo la figura exclusiva de No Urbanizable Común (NUC), según consta en la Revisión del Plan General de Ordenación Urbana de Madrid).

Miguel Ángel Aguilar

21 Enero 2018

La Mina del Cazador (y 2)

Miguel Ángel Aguilar

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Resumen de lo publicado: en la primera parte de este cuento vimos cómo fue creada por Ley una corporación de RTVE exonerada de todas las deudas que había acumulado su predecesor el Ente Público RTVE y con una plantilla reducida en 5.400 empleados merced a un prodigioso Expediente de Regulación de Empleo. Vimos también como ni la Ley de la Corporación, ni el Mandato Marco de RTVE aclararon en qué consiste la versión de servicio público ni cuáles son sus límites. Luego seguimos los pasos de Pulgarcito, la Bella Durmiente y el Príncipe que la despertó de su encantamiento y la condujo a su castillo de Prado del Rey. El relato se deteneía en el momento que aparece el Gato con Botas dispuesto a engrandecer a su señor el marqués de Caravás).

Así que apareció el único suelo existente en el municipio de Madrid – La Mirada del Cazador, en Aravaca – que ni es de protección especial ni está calificado para uso alguno, distinguido bajo la figura exclusiva de No Urbanizable Común (NUC), según consta en la última Revisión del Plan General de Ordenación Urbana de Madrid (PGOUM). Se trata de un terreno que tiene unas 50 hectáreas en el municipio de Madrid y otras tantas en el colindante municipio de Pozuelo. Sus propietarios son las familias de Pilar Sanfiz Sanz y de Alfonso Sierra Iceta, representados a estos efectos por el abogado Pedro Argüelles Alcolea, nada que ver con Pedro Argüelles Salaverría.

Entonces el Gato con Botas, decidido a engrandecer a su señor el marqués de Caravás acarició la idea de vender el castillo de Prado del Rey y otras posesiones urbanas de la Corporación RTVE como el Pirulí en O´Donnell, las instalaciones de Paseo de la Habana, la de los Estudios Buñuel, las de Aravaca y Arganda para su desarrollo inmobiliario y con una parte de esas plusvalías adquirir La Mina del Cazador y edificar la nueva sede de RTVE constituyendo con el resto unas magníficas reservas. Para llevar a cabo ese gran designio el señor del Castillo pensó en un operador urbanístico experimentado, su buen amigo Pedro Pablo Mansilla, que estaría asistido por Luis Rodríguez Avial, antiguo gerente de Urbanismo y gran conocedor también de esos vericuetos.

El proyecto del cuento presentaba dificultades. Por una parte el suelo de La Mirada del Cazador tendría que dejar de ser NUC, lo cual requeriría una modificación puntual de la última revisión del PGOUM y además para que salieran las cuentas con la holgura deseable sería necesaria la recalificación de Prado del Rey, cuestión que es competencia del Ayuntamiento de Pozuelo de Alarcón. Ese Ayuntamiento en principio no parece estar por la labor y la revisión puntual aludida más arriba precisaría de gestiones de alta intensidad. El Príncipe y la Bella Durmiente se la prometían muy felices y pensaban que lo celebrarían comiendo perdices, ahora que seguía abierta la vedad pero la convocatoria de elecciones generales para el 9 de marzo dejaba los planes en suspenso por que nadie en el reino quería tomar decisiones que después fueran juzgadas inconvenientes.

Mientras tanto de los reinos vecinos como Francia llegaban noticias de planes sobre las televisiones públicas pensados sobre la eliminación de la publicidad a la usanza de la británica BBC y en Bruselas, capital de la Unión Europea, avanzaban ideas de mayor exigencia sobre el servicio público de las televisiones estatales. Otra cosa es que por la ratonera de las Comunidades Autónomas siguieran entrando ofertas fuera de control que dañaban las cosechas del Príncipe y de su esposa la Bella Durmiente. Continuará.

Miguel Ángel Aguilar