Jesús Cacho Cortés despedido como director de EL CONFIDENCIAL y reemplazado por Ignacio García Cardero

Titania Compañía Editorial, editora de las cabeceras digitales El Confidencial, Cotizalia y Vanitatis, ha nombrado nuevo director de El Confidencial a Nacho Cardero (36), que sustituye en el puesto a Jesús Cacho (67), que venía ejerciendo dicha responsabilidad desde el año siguiente a la fundación del periódico en 2001.

Cardero ocupaba hasta ahora una de las dos subdirecciones de El Confidencial, siendo el responsable de la planificación informativa, la gestión diaria y la coordinación de los distintos contenidos que este diario ofrece cada día a sus lectores. Una dirección operativa que ahora se ve reconocida de forma explícita.

Con su nombramiento, El Confidencial aborda un imprescindible relevo generacional, necesario para afrontar con renovado ímpetu su segunda década de existencia. Cambian las personas pero no los principios que inspiraron el proyecto desde su fundación: la regeneración de España a través de la denuncia y de una información independiente, crítica, veraz y de alcance. Una labor en la que Jesús Cacho -que continuará como accionista- ha sido esencial.

Nacho Cardero se incorporó a EC en 2003, después de haber trabajado en El Mundo y haber sido jefe de Economía en La Clave.

Carlos Sánchez, Director Adjunto

Carlos Sánchez, hasta ahora subdirector de El Confidencial, es nombrado Director Adjunto del diario con responsabilidad en el área de la información económica y política. Su dilatada experiencia profesional y su amplio conocimiento del mundo político, económico y empresarial español, encuentran así un nuevo marco de desarrollo en el ámbito de esta remodelación organizativa. Carlos Sánchez ha formado parte de los equipos fundacionales de El Mundo y El Globo, y ha trabajado en RNE y Expansión.

La estructura profesional del resto de las cabeceras no sufre cambios. Alberto Artero y Paloma Barrientos seguirán como directores de Cotizalia y Vanitatis, mientras que José Félix Díaz coordinará, como hasta ahora, la sección de Deportes.

Se inicia de este modo una nueva etapa que tiene como objetivo situar a El Confidencial y sus distintas cabeceras como líderes de la información online en España a través de la incorporación de nuevas secciones y contenidos, el refuerzo en cantidad y calidad del número de colaboradores y la constante incorporación de talento.

El equipo de profesionales de El Confidencial, Cotizalia y Vanitatis lamenta profundamente la marcha de Jesús Cacho, por lo que representaba en el proyecto y por el ejemplo que con su trabajo ha demostrado durante los años que ha ejercido como referente del diario. Estamos seguros de que esta nueva etapa profundizará en los principios de libertad e independencia que han regido durante esta década.

Jesús Cacho, director y fundador de El Confidencial.com, ha sido destituido por José Antonio Sánchez, Editor y Consejero Delegado de Titania, la empresa que publica este medio digital. Nacho Cardero, que hasta el momento ocupaba una de las dos subdirecciones, toma la dirección del medio.

Cardero era el responsable de la planificación informativa, la gestión diaria y la coordinación de los distintos contenidos del medio. Carlos Sánchez, el otro subdirector, pasa a ser Director Adjunto con responsabilidad en el área la información económica y política.

Los motivos de la destitución, según ha podido confirmar elEconomista, han sido las diferencias irreconciliables entre Jesús Cacho y José Antonio Sánchez. Además, según relatan fuentes cercanas al medio, las relaciones entre Jesús Cacho y ‘McCoy’ -Alberto Artero- eran tensas.

Al parecer, Artero, director de Cotizalia y Director General de Titania, ponía cortapisas y obstaculizaba algunas de las informaciones de Cacho, que fundó El Confidencial en 2001 junto a José Antonio Sánchez y Antonio Casado.

Florentino, tras la salida de Cacho

Cacho controla casi un 30% del capital de la editora, pero se ha quedado en minoría al conseguir José Antonio Sánchez un ‘núcleo’ de poder estable que aglutina más del 50%, tal y como confirma también El Mundo. Los socios minoritarios, entre los que se encuentra el propio Alberto Artero, habrían aumentado su participación en la editora digital durante los últimos meses.

Con todo, el verdadero origen de este movimiento corporativo obedecería, según fuentes consultadas por elEconomista, a la eterna lucha de Cacho por intentar ejercer el periodismo ajeno presiones económicas y políticas.

Así, tras su destitución se encontraría el embate de pesos pesados del panorama empresarial como Florentino Pérez, presidente de ACS. Los feroces ataques de Cacho y el consiguiente enojo del empresario han sido cruciales y definitivos en esta historia.

Además, las mismas fuentes añaden que otros conocidos empresarios como Los Albertos también habrían presionado para lograr la salida de Cacho. Más lejanamente, el ex presidente del Gobierno, José María Aznar, a quien Cacho llamaba Franquito de manera recurrente en sus artículos, también habría ejercido su cuota de presión.

¿Nuevo proyecto de Jesús Cacho?

Como publica el El Confidencial en una nota, Jesús Cacho conserva sus acciones de la editora. Sin embargo, el periodista tiene la intención de vender su participación aunque los actuales accionistas no aceptan su propuesta y no acceden a la compra.

Aun así, no es descartable que Cacho siga escribiendo con relativa frecuencia en el medio como publica Alberto Artero en su Twitter. «Es accionista importante del soporte. Lo lógico y lo deseable sería que sí pero está todo muy reciente», ha señalado.

Pero tras su salida de El Confidencial, Jesús Cacho podría aventurarse a lanzar un nuevo proyecto, un rumor que viene de lejos pero que podría ganar peso a la vista de los acontecimientos. Artero ha hecho referencia a esto en su Twitter señalando que «el proyecto y el equipo de El Confidencial siguen intactos. Si al final se pierde talento habrá que suplirlo con trabajo. Es una apuesta de futuro», señaló.

El último párrafo del comunicado

Por su parte, cabe destacar que en el último párrafo del comunicado hecho público por El Confidencial se deja entrever la disconformidad que la medida ha supuesto en la plantilla. «El equipo de profesionales de El Confidencial, Cotizalia y Vanitatis lamenta profundamente la marcha de Jesús Cacho, por lo que representaba en el proyecto y por el ejemplo que con su trabajo ha demostrado durante los años que ha ejercido como referente del diario», reza el escrito.

«Estamos seguros de que esta nueva etapa profundizará en los principios de libertad e independencia que han regido durante esta década», sentencia la nota.

asta ahora se había mordido la lengua pero finalmente se ha decidido a hablar tras su  salida. El ex director de El Confidencial, Jesús Cacho, cree que es un gran éxito editorial pero que peligra como medio independiente.

«Ha sido como si me hubieran robado la cartera en mi propia casa»

Estas declaraciones las ha efectuado este miércoles 6 de julio de 2011 durante un curso organizado por Economía Digital. El veterano periodista ha asegurado que su salida el pasado mes de marzo de El Confidencial se produjo con «una carta de despido mal redactada».

«Después de irme, un señor que tuvo mucho que ver en mi salida  le hizo un lavado de imagen a Botín»

Cacho recuerda así cómo fue su polémica salida:

«Es una ‘parajoda’ (sic) que yo esté hablando aquí del éxito de la prensa digital tras mi salida de El Confidencial. Nosotros éramos dos socios fundadores (se refiere a él y José Antonio Sánchez). Mi socio un día sin avisarme sindicó la mayoría accionarial y se hizo con el 57% de las acciones y eso significó mi salida de El Confidencial«.

«Habíamos logrado una extraña simbiosis en un medio pequeño que fue casi un milagro. Con mi salida El Confidencial queda huérfano de ideología. Ahí no hay talento para darle un fin a ese medio. Allí hay buenos periodistas porque los he fichado yo pero los que no hay es dirección, hay errores de bulto en la manera de enfocar las noticias o titular».

«La persona que escribió la carta de despido estaba mal redactada. Los periodistas cada vez escriben peor. Me sentó como si me hubieran robado la cartera en mi propia casa. Estoy en mi mejor momento profesional, quiero decir cosas, por lo tanto no puedo perder el tiempo en odiar a nadie. Sigo siendo dueño del 30% y no he podido llegar a un acuerdo con ellos»

Algo muy doloroso para él («es una desgracia») tras dedicarse en cuerpo y alma a este proyecto:

«Detrás de El Confidencial había una pequeña empresa que es Titania Editorial cuya misión era que nuestros números estén en negro y no en rojo. Unos señores se dedican a buscar información y otros señores buscan que esa empresa sea rentable. Y mi socio lo hizo muy bien. El modelo de El Confidencial fue la honradez y la austeridad. Su director no tenía chófer ni secretaria»

Respecto a la nueva etapa que ha iniciado el periódico del que fue director, no tiene expectativas muy positivas:

«Ahora está huérfano de ideología. Lo que ahora no hay es dirección. Y se notan errores de bulto en la manera de enfocar las noticias y de titular. Además existe un divorcio entre el director in pectore en la sombra, que acabará con El Confidencial, y la redacción»

Es una referencia, tal y como apunta el medio que ha recogido sus declaraciones, a Alberto Artero, del que se asegura que está tomando una gran cuota de poder dentro de la redacción.

«Hay murallas chinas en el periodismo. La vocación de competir por la exclusiva y no dejarse llevar por la presión de los anunciantes. Yo jamás he ido a ver a un anunciante. Desconocía quiénes eran mis anunciantes «

«Los periodistas nos hemos bajado los pantalones y hemos renunciado a hacer información en libertad. Hemos perdido credibilidad porque contamos medias verdades. Acaba de producirse un escándalo como el de Botín, un señor que ha sido cogido con las manos en la masa, y no lo hemos contado. Por eso las cuentas de resultados de los medios cada vez son más ruinosas»

FALTA DE PERIODISMO LIBRE

Cacho ha insistido en que el gran peligro al que se enfrenta la prensa digital es la presión publicitaria y la falta de información libre de la que presume haber hecho en la fundación de El Confidencial:

«En España ningún medio, ni siquiera El Confidencial, es libre. La falta de independencia es el cáncer de la prensa en este país. Para luchar contra esto, a los siete periodistas importantes les hicimos un plan para que cobraran un salario anual íntegro porque se habían dejado el espinazo trabajando. Es honesto que esos señores participen de los beneficios. Esto te permite tener más libertad con los anunciantes»

«Hemos renunciado hace tiempo a enfrentarnos a los poderosos. El periodismo no se puede salvar solo. Los periodistas somos igual de malos que los médicos o los barrenderos. La crisis periodística es reflejo de la crisis del país que no es sólo económica sino de sistema. La Constitución del ’78 se ha quedado pequeña»

TAMBIÉN ATACA A LIBERTAD DIGITAL

En dicho curso online en el que ha participado Cacho, también ha tenido oportunidad de hablar de otros medios de la competencia, como Libertad Digital:

«Medios potentes en Internet como Libertad Digital se limitan a coger noticias de agencias y darles la vuelta en clave de derecha extrema.»

Este metodo de trabajo, asegura, era diferente al que él intentó aplicar en El Confidencial:

«En El Confidencial había mucha presión que la imprimía porque la clave es la información propia, independiente, hacer periodismo, salir a la calle, esa fue la vocación de El Confidencial dado que la mayoría de los digitales hacen ‘copia y pega’.»

«Cuando un medio de comunicación como Prisa se mete en aventuras por importe de 5.000 millones de euros indica que ha caído en el mismo pecado que el que estás denunciando el ladrillado. Por lo tanto, dependes de los bancos y del Gobierno. Y por lo tanto ya no vas a contar ni la cuarta parte de lo que sabes. Si Botín decidiera ejecutar lo que le debe Prisa, lo cierra mañana. Eso explica la crisis terminal de los medios de comunicación»

Respecto a su futuro, Jesús Cacho, que aún mantiene el 30 por ciento de las acciones de El Confidencial, ha asegurado que está en su cenit profesional y que tiene muchas ganas de «explicar cosas».

Periodista Digital ya avanzó que se encuentra preparando un nuevo proyecto mientras se dilucida judicialmente su salida de El Confidencial debido a las discrepancias con el editor y el consejero delegado de Titania Compañía Editorial.

Intencionadamente o no, la ampliación de capital de Titania Compañía Editorial (Elconfidencial.com) ponía al periodista Jesús Cacho entre la espada y la pared. O acudí a la llamada de un diario que dirigió durante 10 años, del que se fue tras acusar a su antiguo socio de tenderle una trmapa y del que actualmente conserva un 30% de las acciones o vería diluida su participación. Pero el planetino guardaba un as en la manga. No sólo no acudió a la ampliación, sino que todo indica que el asunto llegará a los tribunales. «Mis abogados están estudiando la posibilidad de impugnar el último consejo y la ampliación de capital», explica Cacho.

En ElConfidencial están expectantes. Tras conocer la noticia dan la callada por respuesta. «No queremos hablar de este asunto porque está juzgado», asegura un portavoz. El pasado 22 de junio, el consejo de administración de Titania aprobaba una ampliación de capital de 795.900 euros. Jesús Cacho no acudía a la ampliación de capital y José Antonio Sánchez, ‘Totoyo’, ganaba poder en el consejo de administración de la editora. Jesús Cacho abandonó ElConfidencial.com cuando el consejo de la compañía decidió prescindir de él como director. Pocos meses después, desde su nuevo diario, el digital Vozpopuli.com, detallaba la operación de la que había sido víctima, y cuyo reultado fue la toma de control por parte de José Antonio Sánchez.

Batalla judicial.

Actualmente Cacho y Titania mantienen otra disputa en los juzgados. Se trata de una demanda por despido improcedente interpueta por el periodista cuando fue cesado como director. Por su parte, la editora anunció medidas legales  cuando lanzó Vozpopuli.com, al considerar que entraba en incompatibilidad al tratarse de un negocio de similares características.

ElConfidencial.com registró en 2010 su peor resultado, con 199.826 euros de beneficio, frente a los 373.332 euros de 2009. El sector espera conocer los resultados de 2011, el primer año con Cacho alejado del puente de mando, aunque la editora no ha presentado todavía sus cuentas en el registro mercantil.