19 octubre 2014

Évole defiende el relato 'fifty-fifty'

Jorde Évole emite un ‘Salvados’ en el que el líder de ERC, Oriol Junqueras, es entrevistado por una familia de andaluces de izquierdas

20 Octubre 2014

Oriol Junqueras por sevillanas

Ángel Sánchez Harguindey

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'Salvados' regresó con el líder de Esquerra compartiendo mesa con una familia sevillana

Después de una semana torrencial de autopromoción y sinergia en todos los programas del grupo Atresmedia, llegó la nueva temporada de Salvados con un imaginativo Oriol Junqueras por sevillanas, más o menos, es decir, llevar al profesor, alcalde, diputado y presidente de Esquerra a comprobar si Sevilla tiene un color especial.

Lo del color no se aclaró, lo de que la familia Parejo —sus anfitriones— lo tienen claro, fue evidente. Mantuvieron aperitivo, comida y charla amigable, con educación. Naturalmente, el espectador pudo sacar sus propias conclusiones. La primera de todas es que Junqueras no sabe utilizar el sacacorchos, dato que puede parecer baladí pero que insinúa su poca relación con las faenas domésticas. En eso, todo hay que decirlo, los varones Parejo tampoco demostraron mucha solidaridad a la hora de poner y servir la mesa.

La segunda conclusión es que el líder independentista vende una moto que sólo los muy creyentes se atreverían simplemente a probar. Nos habla desde Brigadoon y no desde Sant Vicenç dels Horts, localidad de la que es alcalde. Contemplar el vídeo propagandístico de Esquerra en el que todo será maravilloso cuando Cataluña sea independiente y escucharle afirmar que, por ejemplo, TV3 no tiene una posición tendenciosa en lo referente a la consulta, o que a España y a Catalauña les irá económicamente mejor separados que unidos es, probablemente, la boutade más divertida desde El perro andaluz, con perdón de Buñuel y Dalí.

La gracia se acaba cuando Évole le pregunta que por qué se está puteando a Javier Cercas a raiz de haber publicado un inteligente artículo en EL PAÍS en contra del independentismo. El líder, sin que se la caigan los anillos, replica que «me extraña mucho» y «no lo sabía», claro que también reconoce a uno de los Parejo cuando le pregunta si se ha informado correctamente al pueblo catalán de los pro y contra de la independencia que ni se ha planteado la posiblidad de que la independencia empeore la situación de Cataluña. Es decir, que no se ha informado de los contra.

La tercera conclusión la abanderó la matriarca del clan, la muy heterodoxa, radical y jubilada doña Eugenia que, como los grandes artistas, demostró que a mayor edad, mayor libertad. Para la abuela de la familia resulta evidente que la inacción del Gobierno de Rajoy ha favorecido el auge del independentismo, tesis suscrita por el presidente de Esquerra. De igual modo se podría afirmar que el descarado gremialismo de los partidos políticos ha potenciado el éxito de Podemos. Y sí, efectivamente, Sevilla tiene un color especial: el del sentido común.

22 Octubre 2014

People

David Trueba

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¿Quién es la gente? A esta pregunta trató de responder Jordi Évole en su programa

La canción Viva la gente fue un himno optimista y euforizante. Nacida con el título de Up the People, pretendía animar a la muchachada tras la devastadora depresión emocional que supuso la Segunda Guerra Mundial. Con versiones en todos los idiomas, fue arrinconada por cursi cuando se descubrió que por mucho cantar alegres y dando palmas, la gente, en cada pueblo y lugar, era aplastada por prioridades más urgentes de otra gente. Pero la gente, como concepto, está de regreso. El pasado domingo, los líderes de Podemos llenaron una plaza de toros sin autobuses organizados ni bocadillos pagados, con mucha gente a favor de gente. El cartel del combate se resume en La Gente vs. La Casta.

El Partido Republicano en Estados Unidos es conocido por las siglas GOP, que significan Gobierno de la Gente, es decir, que la apelación a la gente no resulta novedosa en política. Ni en el mundo del espectáculo, donde el cariño del público justifica todas las atrocidades. Las televisiones llevan mucho tiempo amparando su programación en algo que consideran incuestionable. Le dan a la gente lo que la gente pide. Y cada vez que alguien dice que la programación da asco o tal programa es innoble, la respuesta consiste en explicar que eso es lo que la gente quiere. Así que la gente no da abasto para satisfacer todas las necesidades que tienen los demás de la gente.

Pero ¿quién es la gente? A esta pregunta trató de responder el domingo Jordi Évole en su programa. Llevó a Oriol Junqueras, el político mejor situado para ser el próximo presidente en Cataluña, a la casa de una familia sevillana, que interpretó de maravilla el papel de gente. Tanto, que daban ganas de votar a la señora Eugenia. Pero esa es quizá la clave, la gente nunca se presenta a las elecciones. Sino que se presentan partidos y programas de gobierno y la gente se subdivide en una expresión compleja y medible de por dónde va la gente. Y así se deconstruye a la gente para formar un Parlamento, donde las invocaciones a la gente son permanentes, pero al final se vota diputado a diputado. Conclusión: viva la gente, la hay donde quiera que vas, y es lo que nos gusta más.