José Manuel Parada cruza una línea al recordar sin venir a cuento el caso Arny ante Jesús Vázquez, que lo expulsa del plató

Manda ‘webs’. Qué contradicciones. Tan tierno como ponzoñoso se vislumbra todo esto a la vez. ¡Las mujeres y los niños, primero! ¡Sálvese quien pueda! Ahora resulta que no lo ajunta nadie en el patio del recreo de ese colegio privado denominado Telecirco. Ni en la noria desnoriada, tétrico lugar donde recala lo peorcito de cada casa. Pasa José Manuel Parada, de la noche al día, de friqui en horas bajas a Rey de la Telemierda. O sea, de mesías salvador enviado para oxigenar un ‘Supervivientes’ que nació moribundo a supervillano caído en desgracia. Lo lapidan sus propios compañeros. Perro come perro. Y telebasurero devora al mal telebasurero sin piedad, con hambruna atrasada. El ‘monstruo’ de Parada en la parada de los monstruos. ¡El horror!

«Te has metido en terrenos muy pantanosos conmigo y doy por terminada la entrevista. Te tienes que ir. Por donde tú quieras». Ahí es nada. Que vivan el ‘savoir-faire’ y el espíritu tolerante. Se cisca Parada en el plató de Jesús Vázquez y, al sacar del armario apestosos trapos sucios, deja el suelo perdido de mierda. ¡Más madera! ¡Es la guerra! Lanza Parada sobre Jesús un pedrusco del tamaño de Oregón y tan fea acción se vuelve contra él en forma de desprendimiento de rocas. Jimmy, Mila, Jordi ‘Risitas’ González… Tiran todos la piedra y esconden la mano. Machacan el poco prestigio que le quedaba a un caducifolio Parada y lo tachan, ¡manda ‘carallo’!, de homófobo insensato.

«Envidias muchísimo a Jesús Vázquez y no soportas a nadie que esté triunfando en televisión». Tal era la conclusión de una crecidita Mila Ximénez en ‘La noria’ pasada. Y remató con un: «Sacar mierda de un contenedor es lo que tú has hecho con él». Y ahí, precisamente ahí, fue donde se retrataron todos. Golpean mejor estos tertulianos cuando lo hacen en grupo. Sacar mierda de un contenedor. Tiene gracia. ¿No es lo que hacen todos en esa cadena desde aquellos tiempos en que Jesús Gil presentaba un ‘magacín’ desde un jacuzzi repleto de ‘mamachichos’? Sacar mierda y sobrepasarse. Llamar la atención a base de salidas de tono y exabruptos. Como el caso del bueno de Jimmy, que también se subió al carro con un «Le he dicho a Parada que me parece una serpiente» que sonó a sentencia mafiosa.

¿Quién pone los límites en este monumental desatino en que se ha convertido la cadena de Fuencarral? ¿Quién marca el lugar hasta donde se puede llegar? ¿Qué ha hecho Parada que no hagan otros continuamente? ¿Difamar? ¿Insultar? ¿Abroncar? Convertir a estas alturas al ex presentador de ‘Cine de barrio’ en el cabeza de turco de todos los errores telecinqueños no deja de ser un ejercicio de hipocresía tan lamentable como vil. La cagó Parada pasándose de la raya sensacionalista una vez más. Pero no menos que muchos otros ‘colegas’ suyos. Eso sí, lo único que tengo claro es que con actuaciones tan patéticas conseguirán revitalizar, en la gala del próximo jueves, el fallido ‘reality’.  ¡Aun así, a mí que me lo expliquen, por favor! ¿Por qué se comportan así? ¿Por qué continuamente luchan a garrotazos en terrenos pantanosos para subir el puñetero ‘share’ de sus rotundos fracasos?