7 junio 1996

El veterano profesional reconoce que, al contrario que su compañero Manolo García, él ha fracasado como empresario

Quiebra ‘Diálogo’ el estudio de doblaje de Barcelona fundado por el actor y director Joaquín Díaz

Hechos

En junio de 1996 cerró el estudio de doblaje Diálogo.

"No supe ser empresario"

Joaquín Díaz

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La década de los noventa, que tan malos augurios anunciaba con la muerte de Asunción, continuó por caminos nefastos. Yo me aturdía con viajes, comidas, gas- tos superfluos y vida generosa en compañía de mi nueva pareja. Mi vida privada había dado un giro de ciento ochenta grados. Me dejaba llevar por todos y por todo. Cuanto hice, reconozco que fue culpa mía. Eso no podía más que llevar a un excesivo dispendio y a descuidar la salud. Fruto de todo eso, incluida la mala gestión administrativa en el estudio y las nefastas consecuencias de la huelga, tuve un infarto de miocardio en 1994. Se produjo jugando al tenis. Dejé de fumar. Inicié una vida más tranquila.

Planteada la posibilidad de una suspensión de pagos, estudié llevarla a cabo con mi abogado. Vendiendo el local, pagando el resto de la hipoteca, podía hacer frente al resto de las deudas. Mi abogado veía factible la operación. Solo le hacía dudar una cosa, me preguntó si una vez cerrado Diálogo yo iba a seguir trabajando en la profesión; es decir, si me llamarían los demás estudios. Siento pecar de inmodesto, pero no dudé ni un momento la respuesta. “¡Sí! —le dije— seguiré trabajando, me llamarán de todos los estudios”. Llevamos a cabo la liquidación de Diálogo muy a mi pesar. Debo reconocer que no supe ser empresario. Yo soy actor, director, doblador, artista… Diálogo cerró sus puertas en junio de 1996. Había ter- minado mi sueño de juventud. Me sentí extrañamente liberado de un gran peso, a la vez que me oprimía una tristeza interior.