24 septiembre 1982

Gutiérrez arremete contra Calviño y José Luis Balbín a los que responsabiliza de su veto

TVE programa entrevistas a los candidatos a las elecciones de 1982 excluyendo entre los periodistas que les entrevisten a EL PAÍS y a José Luis Gutiérrez (DIARIO16)

Hechos

El 22 de septiembre de 1982 el Consejo de Administración de RTVE decidió que periodistas podrían entrevistar a los candidatos a las elecciones generales de 1982.

Lecturas

Los periodistas escogidos por el Consejo de Administración de RTVE para entrevistar a cada candidato:

D. FELIPE GONZÁLEZ MÁRQUEZ (PSOE)
– D.  José Oneto Revuelta (Grupo16)
– Dña. Pilar Urbano (ABC)
– D. Enrique Vázquez (Informaciones)
– D. Ramón Pi Torrente (La Vanguardia)

D. LANDELINO LAVILLA (UCD)
– D. Carlos Dávila (ABC)
– D. Jorge del Corral (Agencia Efe)
– Dña. Pilar Cernuda (Agencia Cover)
– D. Germán Álvarez Blanco (Sábado Gráfico)

D. MANUEL FRAGA (COALICIÓN POPULAR)
– D. Pedro Altares (Grupo Zeta)
– Dña. Pilar Narvión (Pueblo)
– D. Pedro Calvo Hernando (Ya)
– D. Julián Lago (Grupo Zeta)

D. ADOLFO SUÁREZ (CDS)
– D. Pablo Sebastián (Grupo Zeta)
– D. José Vicente de Juan (Ya / Hoja del Lunes)
– D. Carlos Luis Álvarez (ABC)
– Dña. Montserrat Roig (La Vanguardia)

SANTIAGO CARRILLO
– D. Francisco López de Pablos (Ya)
– D. Mariano González (Europa Press)
– Dña. Julia Navarro (Pueblo)
– D. Antxon Sarasqueta (Grupo16)

¿RESPONSABLES DEL VETO A GUTIÉRREZ Y EL PAÍS?

 

El Director Adjunto de DIARIO16, D. José Luis Gutiérrez señaló al jefe de programas de TVE, D. José Luis Balbín Meana (director de ‘La Clave’) y al consejero de RTVE a propuesta del PSOE, D. José María Calviño Iglesias, de ser los responsables del veto del Consejo de Administración tanto al Sr. Gutiérrez como a cualquier periodista del diario EL PAÍS.

24 Septiembre 1982

Entrevistas políticas en TVE

EL PAÍS (Director: Juan Luis Cebrián Echarri)

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EN LA mañana del miércoles, el Consejo de Administracción de Radiodifusión y Televisión se reunió para decidir qué periodistas entrevistarían en TVE a los cinco principales líderes políticos de la campaña electoral. Los consejeros de RTVE, representantes de los diversos partidos políticos, cayeron en la debilidad de seleccionar, con arreglo a una lista presentada por el director general del ente, a veinte profesionales de toda la nómina nacional para aquel cometido. Designación empedrada de todos los demonios de las sospechas sobre quién podía parecer «bueno» o «malo» al consejo rector de RTVE, y a los líderes de los partidos que representan.Según todos los datos, la selección se realizó mediante el recurso extraprofesional de vetos políticos y personales a algunos informadores finalmente desechados. Así, los cinco primeros candidatos electorales deberían ser entrevistados en el más importante medio masivo de comunicación del país por los periodistas que decida la conjunción de los partidos representados en Radiotelevisión, y no los medios informativos en los que esos profesionales -a los que tampoco se había consultado previamente- trabajan. Creíamos que la libre información era otra cosa. Porque esto, como poco, es una broma. Embromamiento que puede conducir a que sean los organismos e instituciones sujetos de información quienes designen. a los periodistas que deben informar sobre sus asuntos. Jamás se vio manera tan burda de derribar famas acreditadas o tentar independencias por la vía del halago. «Este me gusta, aquel no; al uno le facilito su trabajo, al otro se lo obstaculizo». «A este le invito, a aquel le veto».

Muy recientemente la oficina de relaciones públicas del Ministerio de Defensa vetó a unos periodistas para cubrir una información militar. Ahora, por vía de elección, los responsables políticos de Radiodifusión y Televisión quieren designar a los entrevistadores electorales del medio. Así las cosas, podemos encontrarnos a las doce menos diez de que las jefaturas de sección de los diarios las nombre cada Ministerio respectivo. En este problema menor -pero indicativo- sólo tenemos que señalar que EL PAIS se ha negado a admitir la selección previa de tres de sus más destacados redactores -entre ellos un subdirector-, independientemente de la alta cualificación de los mismos, por entender que el método empleado conculca los principios básicos de la independencia del periódico y pone en entredicho la profesionalidad del resto de los que trabajan en él. Si Televisión Española quiere que periodistas de EL PAIS comparezcan entrevistando en tiempo electoral a los principales líderes de la nación, dichos periodistas serán designados por el periódico y no por los entrevistados o sus representantes. De otra forma declinamos amablemente la invitación, al tiempo que lamentamos un incidente cuyo origen, planteamiento y objetivos nos resultan totalmente ajenos.

27 Septiembre 1982

CONSEJO DE ADMINISTRACIÓN DE RTVE

José Luis Gutiérrez Suárez

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Hoy, lectores, voy a hablarles del veto con el que TVE me obsequió hace unos días, en los que voluntariamente decidí permanecer silencioso, porque yo detesto el papel de víctima.

La cuestión es muy sencilla. Mi nombre, propuesto por los servicios informativos de TVE para entrevistar a los dirigentes políticos de cara a las próximas elecciones, fue suprimido de un plumazo por el consejo de administración del ente. Las razones dadas por los ocasionales censores parece ser que tienen algo que ver con mi supuesta condición de periodista rasposo, incómodo y aristácrata.

Y es que ésta es, simplemente, lectores, una cuestión de políticos, esa subespecie que menstrúa cada cuatro años, y cuando entran en la fase de celo electoral se vuelven totalmente neuróticos e intratables. Es la gran ceremonia del apareamiento elector-parlamentario, la imprescindible berrea de las urnas. Angelitos míos…

Otra cosa es la cuestión informativa. Ya hemos hablado aquí del error, inmenso error, en el que están cayendo algunos dirigentes del PSOE en esta cuestión, y no por maldad, sino por ignorancia por puro y paleto provincianismo.

Porque, lectores, la información es una sustancia tan delicada y lábil que sólo puede ser manipulada por expertos, esto es, por periodistas. Cuando los políticos entran en este negocio de hacer periódicos, malo. Es como darle a un caballo un matraz con nitroglicerina. Le explota en los cascos.

Pues, bien, José María Calviño, consejero independiente, representante del PSOE en el consejo de TVE, supuesto portavoz del veto contra mi humilde persona habló conmigo un par de veces, muy amable y atento, y me dio toda suerte de explicaciones, negando terminantemente que él hubiera impuesto ningún vento. Yo no tengo por qué dudar de la palabra de Calviño. Lo que ocurre es que yo sé que el veto existió, aunque, eso sí, no hubo la menor frase ofensiva contra mí.

Lo que ocurre es que al PSOE se está adhiriendo ahora toda una serie de detritus televisivos como el antiguo fascista José Luis Balbín. Yo recuerdo ahora cuando Balbín estaba de corresponsal que José Luis Graullera quiso procesarle por un sucísimo asunto de facturas desaparecido y dineros públicos y sólo los buenos oficios de Luis Ángel de la Viuda impidieron el procesamiento. Casualmente Balbín es íntimo amigo del caballero Calviño, con el que se paseó en yate este verano por aguas ibicencas.

Pero cada uno tiene los amigos que quiere. Lo que ocurre es que Calviño, el hombre, pues tampoco está para muchos trotes ¿verdad? El otro día, con todo el lío de mi veto, dijo alguna que otra bobada.

Por ejemplo: acusó a Juan Luis Cebrián, director del diario EL PAÍS, de conculcar las sagradas reglas de la libertad de expresión. Y después, para justificar el veto – que él llama selección – pues recurrió en la radio a uno de esos argumentos de tuercebotas, señalando que quién me creía yo, que otros brillantes periodistas habían sido excluidos y no habían dicho nada. Es decir, que Calviño no ha entendido nada.

Y es que el bueno de José María, que es un gallego resbaladizo y de paso franquista mutante – fue el hombre de confianza de Adolfo Suárez cuando éste era Director General del electrodoméstico – no está el muchacho acostumbrado al fluir libérrimo de la prensa democrática. Ya aprenderá. Hablaremos de él más detenidamente y de su matrimonio morganático con Alfonso Guerra.

Y ya que estamos repartiendo fontanedas vamos a aprovechar para hablar un poco de Paco Ordóñez.

Últimamente, lectores, un ordoñista me envía deliciosos telegramas anónimos que no es que me molesten – tengo una saca llena de heces postales procedentes del a ultraderecha – pero es que tengo la mesa llena de papeles y no me cabe uno más.

De modo que Paco, te diré lo que voy a hacer. Mira, en ese cajón de aquí tengo entre otras cosas unas fotitos tuyas ¿sí? Cada vez que me llegue un telegrama anónimo saco una de ellas, ¿sí? En esta que tengo aquí, por ejemplo, aparece Paco Ordóñez, luchando contra la dictadura, muy peinadito, arrodilladito, como en una comunión, con un crucifijo, diciendo aquello de… “Juro Fidelidad y respeto a los Principios del Movimiento Nacional y lealtad al Caudillo de España, Francisco Franco… ¿Sí? ¡Calentitaaas…!