30 septiembre 1989

Cierra el periódico LA ECONOMÍA16 tras fracasar en su intento de entrar en el mercado de la prensa económica compitiendo con CINCO DÍAS, EXPANSIÓN y LA GACETA DE LOS NEGOCIOS

Hechos

El 30 de septiembre de 1989 sale el último número del periódico LA ECONOMÍA16.

Lecturas

En abril de 1989 el presidente del Grupo16 (INPULSA) D. Juan Tomás de Salas, había decidido entrar en el sector de la prensa económica creando la empresa filial INFIESA para que editara el periódico LA ECONOMÍA16. Al frente de este proyecto estaban D. Carlos Díaz Güell como su director, D. Enrique Badía Liberal como editor (cargo que simultaneaba con el de director de DIARIO16) y D. Carlos Díaz Güell (cargo que simultaneaba con el de director de CAMBIO16). Como presidente de LA ECONOMÍA16 (de INFIESA) figuró el exministro D. Carlos Bustelo, principal asesor de D. Juan Tomás de Salas en los sucesos de 1989, hasta su ruptura con el Sr. Salas hace unas semanas, cuando fue reemplazado por D. Luis Blasco.

Cinco meses después de su salida LA ECONOMÍA16 ha cerrado por quiebra, al no poder penetrar en un mercado donde competía con otros tres periódicos: el CINCO DÍAS (del grupo Mercado, ahora también participado por el Grupo PRISA), el EXPANSIÓN (del Grupo Recoletos) y LA GACETA DE LOS NEGOCIOS (del Grupo Zeta). De los cuatro, LA ECONOMÍA16 era el más débil financieramente hablando.

30 Septiembre 1989

LA HORA DEL ADIÓS

El Editor (Juan Tomás de Salas)

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El pasado mes de abril salía a la calle LA ECONOMÍA. Hoy, apenas seis meses después, este periódico se despide ‘sie die’ de sus lectores, con la satisfacción de haber puesto durante veinticinco semanas un producto serio, riguroso y de calidad al alcance del lector. Pero, en una economía libre, el veredicto final corresponde al mercado y, en nuestra línea de seriedad informativa, debemos reconocer que las expectativas iniciales no se han cumplido en cuanto a difusión. El mercado de periódicos especializados en temas económicos se han revelado sumamente estrecho, hasta el punto de que la concurrencia de cuatro diarios no ha logrado ensancharlo; al revés de la tendencia observada en el resto de los países de la C. E.

Varios miles de lectores y los principales anunciantes del país han reconocido la calidad y el rigor de LA ECONOMÍA. Pero la persistencia de un proyecto informativo debe estar basada en su rentabilidad económica como único medio de preservar su independencia y objetividad. De igual manera, el Grupo16 mantiene su criterio de guardar una posición accionarial mayoritaria en todas sus publicaciones y es contrario a permitir presencias de capital ajeno que puedan condicionar su independencia profesional. La combinación de estos principios, no siempre comprendidos desde el exterior, ha sido determinante a la hora de adoptar una decisión siempre dolroosa dedicada a la información.

En la hora de este adiós. INFIESA, sociedad editora de las publicaciones económicas del Grupo, reitera su voluntad de proseguir en el desarrollo de una línea de información económica y financiera veraz, objetiva y de calidad, ya concretada en Boletín de Bolsa 16, Inversión y España Económica.

Y con la gratitud a los lectores y anunciantes que han apoyado la breve pero intensa andadura de LA ECONOMÍA, hace patente el reconocimiento del consejo de Administración de la sociedad editora y la presidencia del Grupo al equipo de profesionales que, con su esfuerzo, dedicación y valía profesional, han hecho posible la existencia de un producto al que sólo cabe objetarle una posible inadecuación concurrencial en tiempo y oportunidad, pero cuya valía y rigor han sido unánimemente reconocidos incluso por sus más directos competidores.

30 Septiembre 1980

No pudo ser

Carlos Díaz Güell

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Éste, querido lector, es el úlltimo ejemplar que se publica de LA ECONOMÍA. Y esta notiia, sin duda, la última uqe hubéramos deseado escribir.

El cierre de un diario es un triste acontecimiento por cuanto suponer ocrtar la posibilidad de transmitir a la sociedad todo un mundo de ideas, sensaciones, proyectos y actividades cuyos protagonistas no son otros que los propios miembros de la sociedad a los que nos dirigimos.

Dicho esto, el cierre de un periódico no debe ser más grave ni doloroso que el cierre de cualquier otra actividad empresarial, aunque quizá en este negocio se ponga más sentimiento personal y el producto que día a día ve la luz sea considerado por todos cuantos contribuímos a hacerlo como algo íntima y especialmente nuestro.

Durante algo más de cinco meses, un pequeño-gran grupo de profesionales ha mantenido con fidelidad, ilusión y un enorme esfuerzo un serio y único compromiso con la verdad y la responsabilidad en un intento de ofrecer a los lectores interesados en la información económica un producto nuevo que pudiera tener cabida en el mercado español de prensa diaria. Y esos esfuerzos se han visto recompensados con creces por los miles de lectores que diariamente durante estos meses nos han leído y nos han preferido en un sector extraordinariamente competitivo y para demostrarlo ahí están los resultados del Estudio General de Medios. Pero son las leyes del mercado – las mismas que durante 154 números hemos defendido – las que dictaminan la permanencia o no de un producto, y así en el cierre de este periódico han confluido elementos vitales para el desarrollo futuro del entramado de una empresa.

No pudo ser, aunque seguiremos creyendo en el futuro expansivo de la información económica en España hasta que ésta alcace cotas similares a las que tienen otros países de nuestro entorno comunitario, de la misma forma que creemos en las posibilidades de futuro del periodismo económico serio y riguroso como el que hemos intentado ofrecer diariamente a nuestros lectores, aunque en ocasiones hayamos podido cometer más de un error por lo que nos duelen prendas y pedimos disculpas.

Nuestra salida, el 4 de abril, configuró un escenario compuesto por cuatro periódicos eocnómicos y a partir de ahí se abrió la más dura competencia que posiblemente haya vivido la prensa española en los últimos años. Nosotros nos vamos con la convicción de haber hecho un buen trabajo como profesionales de la informaicón. Ahí quedan otros tres colegas matutinos en dura pugna. Desde esta última línea sólo nos resta desearles a todos suerte.