18 noviembre 1926

El Imperio Británico se transforma en la Commonwealth: Comunidad de Estados soberanos pero aliados a Reino Unido

Hechos

El 18.11.1926 se clausuró la conferencia que dio paso a la creación de la Commonwealth.

Lecturas

Australia, Nueva Zelanda, Irlanda, Canadá y la Unión Sudafricana son los principales Estados de la Commonwealth.

Hacia 1900 el Imperio británico comprendía a más de 300 millones de personas, es decir, aproximadamente la cuarta parte de la población mundial. La decadencia empezó con la pérdida del monopolio industrial británico antes incluso de llegar a finales del siglo XIX. Las ventajas que tenía Reino Unido sobre las potencias continentales, Estados Unidos y Japón desaparecieron con la industrialización de los países.

En 1902 el ministro de las Colonias Joseph Chamberlain desarrolló la idea de un imperio federativo, en cuyo consejo se discutirían las cuestiones de integrantes, pero su patriotismo imperial no llegó a cuajar. Asimismo fracasó el intento de un gran proyecto político económico, basado en aranceles proteccionistas para defender el imperio. Después de la Primera Guerra Mundial, la flota británica tuvo que compartir su predominio mundial con la de Estados Unidos, y Reino Unido se vio obligada a aceptar, en 1922, un acuerdo por el que se comprometía a limtiar sus efectivos navales. Sin embargo, la pérdida del poderío naval británico en la época de entreguerras se vio disimulada por la vuelta de Estados Unidos al aislacionismo y por la incorporación de nuevos territorios al Imperio británico, que llegó a ser el de mayor extensión de la historia.

No obstante, en esos momentos se vivía un grave problema de desempleo, agravado por la situación industrial del país, que precisaba experimentar una profunda reforma. El problema radicaba en que este cambio, imprescindible para la economía británica, no era compatible con el mantenimiento de una hegemonía mundial : los compromisos en ultramar suponían una carga, y se hacía difícil solucionar las aspiraciones independentistas que surgieron en ciertos dominios, sobre todo en la India, siendo los recursos cada vez más escasos. Todo ello generó una situación de sobreexigencia estratégica. Reino Unido era la única gran potencia de aquel momento que tenía compromisos coloniales en todos los continentes. Esto explica tanto su política de pacificación como el intento de impedir el desmoronamiento de su imperio mediante la creación de la Commonwealth.

La metrópoli ya había concedido el estatuto de dominio y la autonomía a las cuatro colonias habitadas por colonos blancos: Canadá (1867), Australia (1901), Nueva Zelanda (1907) y Sudáfrica (1910). Estos estados, miembros de pleno de derecho de la Sociedad de Naciones, consiguieron de facto su soberanía dentro de la Commonwealth of Nations, creada en 1926, según la fórmula de Balfour. El nexo de unión era solamente la Corona, y Reino Unido se guardaba únicamente las competencias en temas de defensa.

LA INDIA SEGUIRÁ SIENDO UNA COLONIA

Gandi1926 A pesar de que el Reino Unido asegura que quiere que todas sus colonias pasen a ser Estados autónomos dentro del Imperio Británico de su Commonwalth, de momento La India, la colonia más grande del mundo, seguirá sin derechos propios. La India se ha convertido en un auténtico quebradero de cabeza para Londres, en especial porque Mahatma Gandhi lidera un grupo de resistencia pacífica para defender la independencia cada vez más fuerte.