Intereconomía airea que el secretario general de UGT, Cándido Méndez, es un cliente habitual de restaurantes caros

Que no enreden. Que no mezclen las churras con las merinas. En ningún momento hemos afirmado que El Chaflán fuera el restaurante de elección de Méndez. Siempre hablamos – información contrastada que repetimos hoy – que allí, en aquel lugar, se celebró en junio un banquete de sindicalistas. Hoy reproducimos nuestra conversación con un ‘maltre’ de Villa Magna y añadimos, naturalmente, más detalles. No estamos en ninguna campaña antisindical, pero, eso sí, opinamos dos cosas: que los comportamientos de sus dirigentes parecen no adecuarse a sus reivindicativas funciones y que el actual sindicalismo es claramente revisable. Estamos en nuestro derecho: ustedes lo piensan, nosotros lo e escribimos.

La ex jefa de informativos de la TVE del tardofelipismo, María Antonia Iglesias, se indignó mucho en ‘La Noria’ sobre una ‘campaña de difamación’ de los medios no afines al Gobierno contra los sindicatos, especialmente porque una ‘cadena minoritaria’ hubiera difundido que Cándido Méndez frecuenta restaurantes no precisamente de menú del día después de que, según ella, lo desmintiera en ese mismo programa. Claro que la palabra de Méndez, ya se sabe, vale más que la del maitre de uno de esos establecimientos. De todas formas, habrá que agradecérselo. Siguiendo su lógica, hemos sido el pivote de un contubernio antisindical. Y eso que somos ‘minoritarios’.