6 enero 1989

1.800 pesetas por el contrato 'La forja de un rebelde'

La Directora de RTVE, Pilar Miró Romero, acusada de haber favorecido a su novio Mario Camus García por la revista TRIBUNA de Julián Lago San José

Hechos

  • En enero de 1989 la revista TRIBUNA que dirigía D. Julián Lago aseguró que RTVE estaba otorgado contratos al realizador D. Mario Camus, al que identificaba como el ‘compañero sentimental’ de la Directora General de RTVE, Dña. Pilar Miró Romero.

Lecturas

06 Enero 1989

Escándalo en torno a un contrato de mil ochocientos millones de pesetas

ABC (Director: Luis María Anson)

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La denuncia realizada en la revista TRIBUNA por el periodista Julián Lago según la cual la directora general de RTVE, Pilar Miró, firmó un contrato de 1.800 millones de pesetas para que Mario Camus realice una nueva serie televisiva, amenaza con convertirse en un escándalo de grandes proporciones. Escribía Julián Lago dirigiéndose a la señora Miró: «¿que culpa tienes tú de que el director de cine Mario Camus (en el centro), al que se le otorgó una serie de 1.800 millones, conviva bajo tu mismo techo?». Si se confirma la relación sentimental de la directora general con el realizador y se demuestra la existencia del contrato, la opinión pública estaría ante uno de los más espectaculares casos de nepotismo de la moderna historia política española. El diputado de AP Luis Ramallo está realizando una exhaustiva investigaión del caso y se propone exigir las responsabilidades pertinentes. «Firmar un contrato de 1.800 millones de pesetas en favor de su novio es un escándalo que perjudica la imagen del PSOE», ha declarado a ABC un destacado dirigente socialista.

08 Enero 1989

Pilar Miró se defiende contra Julián Lago de la acusación de nepotismo

Jesús Martín Martínez (Director de TVE)

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Ha aparecido en su periódico el de enero en las págians de actualidad gráfica lo que se describe como denuncia relaizada en la revista TRIBUNA por el periodista Julián LAgo, según la cual la directora general de RTVE, Pilar Miró, firmó un contrato de 1.800 millones de pesetas para que Mario Camus realice una serie televisiva.

Esa noticia es absolutamente falsa y éstos son los hechos, si se refieren a la producción ‘La forja de un rebelde’, que dirige Mario Camus.

En fecha 12 de diciembre de 1986 fue presentado el proyecto de la serie por la productora Félix Tusell-Estela Films en la Dirección de Producción Externa de TVE S. A. En dicho proyecto la productora designa a Mario Camus como director.

El 16 de febrero de 1987 se aprubea el proyecto en la Comisión de Dirección de Producción Externa, compuesta por el director de Producción Externa, subdirector de Contenidos, jefe de Servicio de Producciones Asociadas y Financiadas, jefe de Servicio de Coproducciones, jefe de Servicio de Festivales y Coordinación de Proyectos de Producción Externa. La aprobación del proyecto es el resultado de los informes emitidos por la Subdirección de Contenidos (En este caso, tres personas distintas).

El 6 de julio de 1987 se firma el contrato de elaboración de los seis guiones de una hora y media de duración, adquisición y cesión de derechos.

En reunión de Producción Externa de 7 de enero de 1988, la Subdirección de Contenidos informa los guiones favorablemente.

El 3 de febrero se firma contrato con Félix Tusell-Estela Films para la preparación del proyecto.
Se da el visto bueno al proyecto definitivo, en reunión de la Dirección de Producción Externa de fecha 18 de mayo de 1988.

Se firma el contrato de producción por administración con fecha 6 de julio de 1988 con un presupuesto de 1.778.995.901 pesetas.

En enero de 1989 se han producido dos capítulos y comenzado el tercero.

Por lo tanto, no se ha firmado una nueva serie por 1.800 millones con Mario Camus. La directora general no ha firmado nada. Ha sido el director de TVE S. A., como administrador único de la sociedad quien firmó los contratos, nunca con Mario Camus, sino con el productor Félix Tusell – hermano de un asiduo colaborador de su periódico y otros diarios, el historiador y catedrático Javier Tusell – Dichos contratos son el resultado de una decisión en la que intervinieron por lo menos nueve personas y son informados por la Dirección de Comercialización y por el abogado del Estado don José Luis del Castillo. La Intervención Delegada de Hacienda no denuncia en este tiempo ninguna irregularidad. Mario Camus firma su contrato de director de la serie con el productor Félix Tusell-Estela Films, que es el que lo presenta a TVE S. A., dicho contrato asigna a Mario Camus la cantidad de 2.777.777 pesetas por hora de producción (en su anterior película, no producida por TVE. S. A. su contrato ascendió ocho millones de pesetas) Mario Camus, director con suficiente prestigio tanto nacional como internacional, empezó a colaborar en TVE S. A. en el año 1968 con títulos supongo recordados por usted como ‘Cuéntos y leyendas’, ‘Si las piedras hablaran’, ‘Curro Jiménez’, ‘Los camioneros’, ‘Fortunata y Jacinta’, ‘Los desastres de la guerra’, ‘Paisaje con figuras’, ‘La colmena’ – por la que obtuvo el Oso de Oro en el Festival de Berlín de 1982 – ‘los Santos inocentes’ – con premio en el Festival de Cannes del año 1934.

Jesús Martín Martínez (Director de TVE)

15 Enero 1989

Pilar Miró, que estás en los cielos

Julián Lago San José

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No pensaba, admirada por imperterrita Pilar, volver a elogiar tu encomiable gestión, subvenciones por aquí, regalitos por allá, al frente de Prado del Rey, que después de tu majestuoso paso por el debería de llamarse, en agradecimiento a tus servicios, Prado de la Revina. De la Reina Miró, claro. Porque tú, por no sé qué extrañas influencias, estableciste en aquella casa una auténtica Corte absolutista con validos pajes y edecanes.

No pensaba, digo, salir al paso. Sobre todo porque te has ido ya, aunque lo hayas hecho a regañadientes. Pero yo, que no me paso por ahí a la opinión pública, no puedo por menos de aceptar la amable invtación que, desde las páginas de ABC, me ha cursado tu director de Televisión, Jesús Martín, lo cual, por otra parte, no sabes cómo os lo agradezco a los dos.

Porque, al fin, habéis reconocido, tanto monta-monta tanto, lo que hasta el momento manteníais de tapadillo: que a la serie ‘La forja de un rebelde’, dirigida por tu actual compañero sentimental, Mario Camus, le asignasteis la fruslería de 1.800 millones de pesetas, que ya hemos empezado a pagar entre todos los españoles. Qué menos podíamos hacer por tu felicidad, querida Pilar.

Méritos profesionales de Camus aparte, la carta-réplica de Martín en el diario de Luis María Anson no es sino la justificación de lo injustificable: la confirmación del abuso nepótico que has dado a los dineros públicos. Aunque parece que todavía no te has enterado de que Televisión Española no era una finca particular tuya, desde la que no podías satisfacer tus personales compromisos. ¿Te has enterado o no? Como tampoco lo es de tu sucesor, Luis Solana, de quien espero que no incorpore también la tecnolgoía punta de sobrecarga de líneas a la pequeña pantalla.

Ya sé que otros dirigentes socialistas han hecho, también, de su capa un sayo. En eso te doy la razón, ya vez. Pero ¿ese es tu único argumento exculpatorio? Lo tuyo, comrpéndelo, Pilar, clama al cielo, a ese cielo al que tú enviaste cinematográfiamente a Gary Cooper. Te has ido de Televisión, ahí está lo más grave del asunto, convencida de que lo que has hecho es lo normal.

Pues, no. Lo que has hecho no es lo normal. Pero yo no te pido explicaciones. Que a quien se las tendrás que dar es a los Tribunales de Justicia. Porque algo habrás de decirles sobre la polémica auditoría de la Intervención de Hacienda. No sólo sobre la que parcialmente, repito parcialmente, se publicó, sino sobre la otra. La que está en curso, que ésa sí es una auditoría de infarto. Aunque lo que no me puedo creer es eso. Que, después del escándalo, te hayas dedicado, tú o Jesús Martín, que es igual, a firmar a toda prisa contratos millonarios, a pesar de que buena parte de ellos hayan sido informados negativamente por José Luis Castillo, abgado del Estado en el ente.

Ni me puedo creer algo que me cuentan de muy buena fuente. Que exista un precontrato, celosamente guardado por Jesús Martín, a favor de tu compañero Mario Camus, como asesor de la serie El Quijote por una cifra para ti talismántica: 2.127.215 pesetas, que coincide exactamente, ya es causalidad, con la cantidad que te has visto obligada a reintegrar a la tesorería del Ente para normalizar, dentro de lo que cabe, tus gastos injustificados hasta julio del 87. ?Verdad, Pilar, que eso sí es una maledicencia?

Tampoco entiendo otro cosa tuya. Que, además de los malditos 2.127.215 pesetas, hayas entregado otro segundo talón a la tesorería del Ente hasta completar exactamente un total de 3.904.443 pesetas, cuando aún nadie te lo había reclamado. Pura generosidad la tuya. O que quieres curarte en salud, a fin de cubrir el resto de gastos injustificados, todavía sin conocer, que corresponderían hasta el pasado 12 de enero, que, sin duda, para ti habrá sido el Día más largo. Una duda: ¿has incorporado a ese ingreso-sorpresa las interminable facturas de flores que, de Bourguignon casi a diario, salían para tus íntimos? Porque algunos, me entero, con ellas van a poner una floristería. Yo, no, claro. Que a mí, desde luego, no me ha llegado ni un mal cactus.

A lo que íbamos. Mira, Pilar: tu subordinado no niega en ABC el tono de la cuestión. Los datos. No. A falta de razones. Martín-sí señor ha intentado en vano excusar tu actitud con matices puramente burocráticos. Que si el contrato no lo firmaste personalmente tú. Faltaría más. Que si había un comité de selección para asignar los millones. Faltaría menos. ¿Qué quieres que te diga?
Seamos justos. Efectivamente, el contrato de marras no llevaba tu rúbrica. Baladí argucia la de Martín. Sin entrar en detalles del férreo control que tú mantenías sobre la Casa de la Pradera, ¿te imaginas pongo por caso que yo me inhibiera de la decisiones del director adjunto de esta revista? ¿A que no? La rúbrica era, por supuesto, del susodicho Jesús Marín, quién, por cierto, en su descargo de conciencia, podría haber contado que el también se gastó un millón de pesetas en decorar su despacho. Eso sí, el suyo sin vestidor, obviamente.

Agradecido que es el hombre con los detalles que has tenido con él. No me refiero ya al sobresueldo navideño, 750.000 pesetas, que le diste el pasado año, sin autorización alguna del Consejo de Administración. Ni a las 400.000 de este año, que, también sin autorización, aunque a libradas por la pagadura del Ente, no sé si Martín se habrá atrevido a retirar finamente. No porque no lo considere justo, porque hay lealtades que, desde luego, no tienne precio. Sino porque dos personas, de escrupulosidad intachable, se han negado taxivamente o recibir similar dádiva: el asesor jurídico, José Luis Castillo, y la interventora de Hacienda, Angustias Marugán.

Pero antes, querida Pilar, me gustaría que me hicieras una aclaración, si puedes por supuesto. ¿Cómo es que Martín ha firmado un contrato tan cuantioso como el de ‘La Forja de un rebelde’? ¿Cómo ha podido firmar otros no menos millonarios? Porque, según la disposición general 3/85, del 1 de julio de 1985, el director de Televisión Española tenía un límite ‘de cien millones de pesetas, conforme el Estatuto Social de TVE’ en sus atribuciones económicas, ¿acaso tú le otorgase poderes ilimitados? Si así fuera, ¿en qué disposición general, de igual rango, han quedado derogados los anteriores poderes y recogidos los actuales?

Sin olvidar otras menudencias. También Jesús Martín contrató con International Network Group S. A., la serie Amores difíciles, sobre siete cuentos de García Márquez, con una incomprensible cláusula de pegote: como contrapartida, García Márquez cedió los derechos de otro cuento suyo. El rastro de tu sangre en la nieve, para llevar a cabo un proyecto televisivo o cinematográfico. Leo textualmente: «En el plazo máximo de cuatro año y con la condición expresa de que su dirección la realice doña Pilar Miró Romero». Es decir, tú.

Claro, también dirás, como Martín, que antes de autorizarse las series han de pasar previamente por un comité que preside Antonio Pzuelo, otro íntimo tuyo, que es el director de Producción Externa de Prado del Rey, tras una meteórica carrera. Tan meteórica que no hace tanto era un simple auxiliar de caja de la serie Verano Azul, del Mercero, sobre cuya actuación hay un interesantísimo dossier que te facilitaré próximamente, por si te parece bien adjuntario al tuyo.

Te lanzo un reto: muéstrame el libro de actas de concesiones y certificaciones, digo libro, en que, numeradas y protocolizadas como es norma en cualquier organismo público, consten los acuerdos del referido comité. Anda, dame el gusto de desmentirme. Dime la verdad, Pilar: a qué te vas del Ente sin mala conciencia. Después de todo, ¿qué tiene de reprobable que un subordinado tuyo haya sido generoso con tus amiguetes, empezando por tu amor del alma, Mario Camus? ¿O que García Márquez haya impuesto, para cuando quedará en paro político, a la directora general como realizadora de uno de sus cuentos? Aunque para cuento fascinante, Pilar, el que podrías llevar a la pantalla sobre tu experiencia en Prado del Rey. Sería, sin duda, un éxito de taquilla, te lo aseguro.

Julián Lago