Luis del Olmo aparta de ONDA CERO al tertuliano Joaquín Navarro Estevan tras una bronca monumental con el ex ministro Ernest Lluch

El periódico EGIN publica un anuario donde figura una cantidad de información estadística considerable acerca del País Vasco, Navarra y el área vasca situada políticamente en Francia. Sin embargo, una parte del anuario está dedicada a opinión dando la impresión de que intenta atraer a personas que no pertenecen al Movimiento de Liberación Vasco (MNLV). Es decir, a personas que no pertecen a Herri Batasuna, KAS o al entorno de ETA. Este año son solamente tres, y dos de ellas presentaron escritos que difícilmente, a no ser por la ubicación, abonan ninguna de las tesis que tiene un nombre tan específicamente parecido a uno que hubo en la España de los años que se extienden desde 1939 hasta 1977.

Una tranquilidad que afortunadamente muchos vascos ni tienen, ni quieren. Debido a que cada vez son más quienes lo hacen público es por lo que el País Vasco está ahora mejor que hace diez años. También porque ETA mata varias veces menos que entonces. Son vascos que no tienen tranquilidad. Citemos tres más: Atutxa [PNV], Buesa [PSE-PSOE] y Mosquera [Unidad Alavesa]. Cuando existieron los GAL tuve responsabilidades por lo que me he explicado desde estas párginas. Si hubiera ocupado el cargo de magistrado juez decano de San Sebastián entre 1981 y 1984 podría saber más y tendría responsabilidades directas en saber. Ahora en 1996 no publicaré en EGIN (no me lo pedirán) mientras no condene por igual todas las muertes o asesinatos; y si publicara, defendería acatar la ley de Leyes. Si fuera juez, aún me sentiría más exigente.

Una sola ‘opinión’ parece escrita como si se fuera miembro del MLNV sin serlo. No hay ni una sola rerencia a ETA, ni a los casi 900 asesinados, ni se condena sus acciones antes de la guerra sucia, durante la guerra sucia o en los diez años en los que la única guerra sucia es la que realiza Euskadi Ta Askatasuna. En el escrito del magistrado Joaquín Navarro Estevan no falta ninguna de las características de EGIN y de Herri Batasuna. Dado que se trata de una publicación absolutamente legal, no hay nada que se pueda achacar a quien publique en ella, pero sorprende en un miembro de la carrera judicial que publique en un ámbito en el que los elogios a ETA son habituales y la falta de condena de sus actuaciones lo habitual. Ante un tema tan vital como es la vida humana incurrir en la actitud silenciosa por parte de un juez no parece lo más prudente.

Puesto a no irritar al MLNV, al que ya no le gusta ni Elkarri, el juez Navarro no evita ni los ataques más duros contra la Constitución y ni añade tan sólo el recordatorio de que hay que acatarla, aunque no se comparta todo. El ciudadano a lo mejor se conformaría con esta actitud. El magistrado se expresa con esta contundencia: «La Constitución incurrió en una esquizofrénia jurídica e institucional que la mutiló como suelo y como vuelo de las libertades colectivas del pueblo vasco, de su identidad y de su autodeterminación». A continuación el estilo del juez se parece más al del populismo más vulgar que a cualquier otro: truhanes, sayones, gorilas «de Estado», héroes y patriotas de toda laya y coturno, camaleones, zafios, pretorianos, etcétera.

Una sola referencia al empresario secuestrado José María Aldaya, de una manera tan larga como cruel, hubiera podido desagradar a EGIN. Parece que precisamente por ello no ha sido incluida. Habla, en cambio, de que está llevando a cabo un ‘exterminio moral de jueces malvados’.

En ningún caso quiero participar en algo tan abyecto, por lo que no he dedicado hasta ahora ningún adjetivo al juez Navarro ni lo voy a utilizar. Solamente quiero destacar que participar en un órgano periodistico hablando únicamente de los GAL no me parece correcto. Y menos un juez. Como tampoco me parecería correcto que se condene a ETA y se olvide la condena correspondiente de los GAL. Y menos en un juez.

¿Le hubieran publicado una doble condena clara? ¿Le hubieran publicado insultos de la más vulgar picaresca aplicados a un Santi Potros? Estamos lejos de aquellos tiempos en los que se afirmaba que los magistrados solamente hablaban a través de sus sentencias, pero no sé si es conveneinte ir tan lejos como es publicar con un tono más vultar y con unos contenidos más duros que los que realiza otro colaborador. Un colaborador que es la cabeza visible, Jon Salaberría, de Jarrai. Un compañero de ‘opinión’ que encabeza una organización a la que en general se le atribuyeron 824 acciones vandálicas en Euskadi el pasado año. Acciones que son actos violentos y que Salaberría considera actos políticos: 118 contra la Ertzaina, 10 contra la Policía Nacional y 8 contra la Guardia Civil.

Por ello, la actitud del juez Navarro Estevan no es valiente, puesto que con estas afirmaciones puede pasear con toda tranquilidad por las calles y alamedas vascas. Quienes escriben condenando a los GAL, pero también a ETA, no pueden hacerlo. Al igual como no se puede ir a una concentración sin escuchar que los identificados con EGIn lancen el conocido ‘ETA mátalos’, 824 acciones vnadalicas no son pocas y el hecho de que el pasado año aumentaron en un 221 por ciento en relación al 1994 resulta un buen sistema para comprobar la absoluta tranquilidad que adquiere el juez Navarro Estevan al escribir con su estilo y con sus ideas.