29 enero 2010

Ignacio González llamó personalmente a los presidentes de INTERECONOMÍA o LIBERTAD DIGITAL para 'que echasen tierra' sobre el incidente

Esperanza Aguirre Gil de Biedma celebra que en Caja Madrid nombre consejero a Ruben Cruz (Izquierda Unida) quitándoselo ‘al hijoputa’

Hechos

  • En enero de 2010 la Cadena SER difundió una palabras de Dña. Esperanza Aguirre Gil de Biedma en las que se congratulaba de que el Consejo de Caja Madrid hubiera dado un puesto al dirigente de Izquierda Unida D. Rubén Cruz a cambio de ‘quitárselo’ al hijoputa.

Lecturas

El 29 de enero de 2010 los micrófonos de la Cadena SER recogieron un comentario de Dña. Esperanza Aguirre Gil de Biedma, presidenta de la Comunidad de Madrid a su vicepresidente D. Ignacio González González. “Creo que nosotros hemos tenido la inmensa suerte de poderle dar un puesto a Izquierda Unida quitándosela al hijoputa”.

Era referencia al reparto de consejeros en Caja Madrid entre los consejeros dependientes del PP de la Comunidad comandados por la Sra. Aguirre Gil de Biedma y los consejeros afines al PP del ayuntamiento que lidera D. Alberto Ruiz Gallardón. En la última negociación el PP acordó sacar el consejo al consejero D. Fernando Serrano Antón (afín al Sr. Ruiz Gallardón) y meter en su lugar a D. Rubén Cruz, de Izquierda Unida.

Por lo que al aludir que le ‘han quitado un puesto al hijoputa’ quedaba la duda si tal adjetivo iba para el Sr. Serrano Antón o para el Sr. Ruiz Gallardón.

07 Febrero 2010

La politización de las Cajas, esa es la cuestión

Luis María Anson

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Mi querido hijoputa

Ignacio González apremió a los presidentes de medios pródigamente subvencionados por él con el dinero de todos los madrileños, para que echasen tierra sobre los micrófonos abiertos que sorprendieron a Esperanza Aguirre. Algún columnista ha llegado a decir para disculparla que hasta la Familia Real es más hablada. Pero el rechazo al lenguaje de los tacos se quedó anticuado. Hace sesenta años una señora decente no podía decir hijoputa ni cabrón, tampoco tetas ni bragas. Hoy hasta las adolescentes de la más alta sociedad incluyen esas expresiones, también los viejos tacos de camionero en sus conversaciones habituales.

Ni el lenguaje de Esperanza le importa a nadie ni tampoco que te aludiera a ti, mi querido hijoputa, pues todo el mundo sabe que en el PP madrileño las espaldas cachicuernas siguen en alto sobre todo tras la goleada que Rodrigo Rato metió en las escuadras de Ignacio González.

Lo importante de este pasaje a micrófono abierto es la demostración pública de que las Cajas, en lugar de ser instituciones al servicio de los ahorradores, se gobiernan según los intereses de los políticos. Incluso líderes o lideresesas que presumen de liberales intervienen en ellas hasta la náusea. Y si, gracias a las exigencias de Luis Ángel Rojo y a la buena gestión, los bancos españoles han sorteado la crisis sin escándalos ni quiebras, las Cajas se mueven de forma precaria salvo excepciones como La Caixa en la que Isidro Fainé ha hecho, está haciendo, una formidable gestión independiente.

La politización de las Cajas, mi querido hijoputa, es la cuestión, el fundo de la cuestión, no el lenguaje rahez de Esperanza Aguirre o las diatribas internas del PP madrileño con la que tanto nos entretenéis a todos.

Luis María Anson