1 marzo 1994

Reportaje de EL PAÍS contra la COPE, sus gestores, sus accionistas y sus profesionales ¿Patinazo?

Hechos

El 18.03.1994 el diario EL PAÍS publicó un amplio reportaje contra la Cadena COPE. El 24.03.1994 tuvo que publicar una rectificación.

Lecturas

En un reportaje firmado con el seudónimo ‘Javier Martín’ publicado en El País del 18 de marzo de 1994 se asegura que la COPE tiene pérdidas de 1.500 millones y que hay problemas internos y descontento del locutor Antonio Herrero Lima y directivos como Jose María Loizaga, Rafael de Benito, Jorge Planas y José Andrés Hernández Vicente. El País tendrá que publicar el 24 de marzo cinco cartas de rectificación de cinco de los citados.

El artículo que escribió don Javier Martín en EL PAÍS, fecha marzo de 1994:

La red de emisoras de la COPE registró en el ejercicio de 1993 unas perdidas de unos 1.500 millones de pesetas. (…) A mediados de 1992 la  Conferencia   Episcopal  se  vio  forzada  a  ceder la exclusiva de la publicidad a la empresa de Eugenio Galdón (GEPSA). (…) A José María Loizaga,  presidente  de Mercapital [9% de la COPE] le horroriza la radio: “La COPE me parece estridente y de una considerable falta de rigor” (…) Loizaga  lleva   dos   años   sin   ver   el   rendimiento  de  su inversión. (…) Jorge Planas, uno de sus colaboradores en GEPSA (…) reconoce que todas las empresas de Galdón viven gracias a GEPSA. (…) La audiencia de la COPE depende absolutamente de sus estrellas José María García y don Antonio Herrero, (…) a primeros de febrero Antonio Herrero motó en cólera porque su caché era muy inferior al de García y, en cambio, tenía más audiencia. Hernández [director de la COPE] no niega la trifulca: “Esas cosas son normales, en cuanto sondeos cada uno se agarra al que más le conviene y se pican”. (D. Javier Martín, EL PAÍS, 18-3-1994)

Aquel artículo motivó una cadena de réplicas de practicamente todos los citados publicadas el 24 de marzo:

• El Consejo de Administración de la sociedad aún no ha formulado las cuentas correspondientes de 1993, (…) el resultado fijado en la información no es más que un puro ejercicio de imaginación. (…) Es falso que la Conferencia Episcopal se viera forzada a ceder la exclusiva de la publicidad de la COPE a GEPSA (…) es falso que se haya producido ninguna discrepancia entre los Sres. García y Herrero. No he pronunciado las expresiones que al entrecomillar se me atribuyen. (D. José Andrés Hernández Vicente, director de la COPE)

• Es falso que GEPSA forzara a la Conferencia Episcopal, como ustedes insinúan, a cederle la exclusiva publicitaria. Es falso que GEPSA sea “la empresa de Eugenio Galdón”. El Sr. Galdón es accionista minoritario. Es falso que Jorge Planas sea colaborador de GEPSA. (D. Rafael de Benito, presidente de GEPSA)

• Es falso que me parezca COPE “estridente y de una considerable falta de rigor”. Es falso que Mercapital lleve dos años sin ver rendimientos a la inversión en COPE sencillamente porque ésta todavía no hace un año que se realizó. (D. José María Loizaga, presidente de Mercapital)

• Es falso que yo haya dicho o dejado entre ver que “todas las empresas de Galdón viven gracias a GEPSA” Es falso que yo sea un “colaborador” en GEPSA (D. Jorge Planas, director Muntiel)

• Nunca he protagonizado ninguna trifulca con don José María García. Es mentira que haya solicitado ningún incremento para mi contrato (…). Miente su periódico. (D. Antonio Herrero, locutor de la COPE)

De acuerdo con  las cartas de desmentidos el artículo de EL PAÍS no había dado ni una. ¿De  dónde había sacado los datos si la empresa todavía hecho balance? ¿Cómo podía decir que Mercapital llevaba dos años sin ver rendimientos si no hacía ni un año que había entrado? ¿De dónde había sacado la información de GEPSA si incluso el supuesto colaborador, Sr. Planas, negaba haberla dado e incluso tener nada que ver con la empresa en cuestión? ¿Cómo el Sr. Martín publicó un articulo que parecía obra de don Stephen Glass? Quizá les arrastraba una posible animadversión por la COPE, que se hacía patente en un anuncio de “El larguero” de la SER que representaba como nazis a la competencia. EL MUNDO, ABC y DIARIO16 denunciaron aquel anuncio.

26 Marzo 1994

¿Rumor o Falso?

Álvaro López Alonso

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«Es falso». Esta rotunda afirmación, seguida de su lógico corolario de denuncia puntual de la falsedad, nunca había sido tan repetidamente publicada en un periódico español, tal y como ocurriera en EL PAÍS el pasado jueves 24.

Exactamente 18 veces en apenas columna y media, alguna más que aquellos famosos ‘puedo prometer y prometo’ de Adolfo Suárez, que al parecer le escribió el periodista Fernando Ónega, y que de nada sirvió al futuro del entonces líder de la UCD, uno de cuyos hombres de entonces, el centrista Salvador Sánchez Terán, presidente ahora de la COPE, ha mantenido su tradicional elegancia, situándose al margen de esta desagradable batalla.

Los ‘falsos’ en cuestión eran respuesta organizada a una información publicada por el citado diario, información firmada por Javier Martín, en la que se señalaban las penurias de los resultados de la Cadena de Ondas Populares, COPE, en un amplio despliegue, junto al que se incluían los beneficios de la Cadena SER, propiedad de PRISA.

A tenor de los desmentidos, tal información puede ser incluida en el Guiness con todos los honores.

La negación tantas veces repetida estaba firmada por José Vicente Hernández, director general de la cadena; por Rafael de Benito, presidente de la agencia exclusivista de la publicidad de la COPE y, en el pasado, uno de los responsables de la publicidad de la SER, por José María Loizaga, presidente de Mercapital, empresa propietaria de casi el 10% de las acciones de la COPE y, por Jordi Plana, director general de Multitel, quien también estuvo en su día en la cadena radiofónica de PRISA. Parece un ajuste de cuentas.

El único rectificante que no utilizaba el adjetivo era Antonio Herrero, quien prefería emplear el ‘es mentira’ para igualmente descalificar la información aludida.

José María García y Eugenio Galdón, también los dos antiguos trabajadores de la SER y también ‘implicados’ en la información de EL PAÍS, pasaron ampliamente del tema.

Esta rectificación masiva a una información, al parecer y hasta que no haya ‘contradesmentido’, absolutamente incierta, se imbrica en la guerra desarrollada entre SER y COPE, de la que ha sido relevante muestra el famoso anuncio del fanatismo en él que se trataba de descalificar una forma de hacer información en beneficio de otra que, paradójicamente, cuenta con la mitad de oyentes que la descalificada.

Un bonito embrollo, aderezado el pasado martes con la publicación del anuncio en este diario, en burda maniobra desarticulada en un mincomentario publicado justo sobre la parte no fanática dle anuncio.

La publicidad, debieran saberlo los autores del desaguisado, nunca puede ser engañosa pues el consumidor – en este caso de información – se deja manejar hasta cierto punto, a Dios gracias.