6º Congreso del PASOC – Alonso Puerta rechaza la hegemonía del PCE en Izquierda Unida y pide que la coalición pacte con el PSOE

El Sexto Congreso del Partido de Acción Socialista, coincidiendo con su decimoquinto aniversario, ha sido la ocasión apropiada para reflexionar sobre la identidad y los principales objetivos del partido, así como sobre su utilidad para representar las convicciones de los afiliados y los intereses de una parte considerable de la población.

Nuestro compromiso de izquierda lo realizamos como componente fundacional y esencial de Izquierda Unida, proyecto político que se ha desarrollado y madurado en los últimos años y que supone el cauce y el exponente de nuestro trabajo institucional. A través de Izquierda Unida y desde nuestra ideología socialista nos enfrentamos a los retos del año 2000: superar los déficits democráticos en el funcionamiento de la democracia representativa, hacer posible la participación de los ciudadanos, ampliar los derechos sociales, acercarse a la sociedad de pleno empleo, realizar la unión política europea y practicar la solidaridad con otras regiones del planeta.

Son objetivos que la izquierda no puede abandonar si quiere seguir manteniendo sus señas de identidad y continuar su papel histórico de aunar la libertad y la igualdad.

LA AGRESION DEL PENSAMIENTO UNICO.- Por todo ello nos preocupa la posición de algunos partidos socialistas y poscomunistas que, obsesionados por superar la caída del comunismo de Estado en 1989, se desplazaron a espacios de centro y rinden tributo al pensamiento económico ultraliberal colocándose de hecho en el campo del no-socialismo. El PASOC mantiene que, frente a las políticas ultraliberales que buscan simplemente el beneficio del capital en el marco de la mundialización de la economía, es preciso plantear con energía la subordinación del mercado a los valores de la democracia, y luchar por la cohesión social que a lo largo del siglo XX se ha intentado alcanzar con el llamado Estado del Bienestar, defendido con uñas y dientes por sindicatos, partidos de izquierda y movimientos sociales.

En el umbral del siglo XXI el expansionismo de los capitales sin fronteras y el reduccionismo de los valores democráticos, expresado intelectualmente por el «pensamiento único», configuran una agresión sin precedentes contra la sociedad democrática que siempre debe articularse a la medida de los seres humanos con sus necesidades y sus ilusiones.

En este difícil panorama los socialistas del PASOC debemos aportar nuestro grano de arena a la construcción de una sociedad solidaria y a la revitalización de las instituciones democráticas. Lo que muchos socialistas no hemos podido realizar en un PSOE contradictorio en sus políticas con las señas de identidad del socialismo y corresponsable en alto grado de las graves deficiencias de esta democracia de baja intensidad, lo hacemos desde un PASOC que no ignora su modestia pero tampoco su capacidad política propia como componente socialista de Izquierda Unida.

Sabemos que en España y en Europa la izquierda alternativa es necesaria pero no suficiente. Las realidades de Francia y también de Italia son un ejemplo de la posibilidad y de la importancia de articular la «izquierda plural».

Son dos modelos bien diferenciados de gobierno de coalición o de mayoría parlamentaria que permiten ofrecer soluciones de izquierda a la sociedad sin poner en riesgo ni la personalidad ni los programas de los diferentes partidos.

EL DEBATE DE LAS 35 HORAS.- Si en España queremos luchar por la sociedad de pleno empleo y, en primera instancia, por una política de empleo, tendremos que hacer un gran debate sobre el reparto del tiempo de trabajo, sobre la viabilidad y necesidad de definir por ley las 35 horas sin pérdida salarial, y esto no podrá conseguirse solamente con los votos de Izquierda Unida; será necesaria la confluencia de todos los que coincidan con esta propuesta.

De ahí la importancia de hacer una gran campaña no sólo para cohesionar a afiliados, simpatizantes y eventuales votantes sino, principalmente, para poner a los partidos y movimientos que se reclaman progresistas y de izquierda frente al reto de aceptar su condición de representantes de la gran base social de la izquierda. Coincidiremos con quienes coincidan con nuestros planteamientos y así seremos una izquierda rigurosa y útil para nuestros representados y para nuestro país.

Alonso Puerta