DIARIO16, dirigido por Juan Tomás de Salas, denuncia que ‘El Sindicato del Crímen’ quiere cerrarle y pide dinero a sus lectores

Este chico tiene un poder inaudito en esta España PP. El director de EL MUNDO se cree – y lo escribió – que José María Aznar ganó las elecciones gracias a él- (En esta casa, al contrario, creemos que el PP ganó tres años más tarde de lo que tocaba, gracias a la ferocidad del ataque de EL MUNDO contra el PSOE). Pero lo malo no es que Pedro José Ramírez se crea la comadrona de José María Aznar, lo malo es que Aznar se lo crea una parte del Gobierno se lo crea y el señor Miguel Ángel Rodríguez, zar de la Comunicación, se lo crea. Eso es lo verdaderamente malo, y lo que está dotando al director de EL MUNDO de un inaudito poder y una soberbia excesiva.

El exceso de poder lo pagamos nosotros. Y el exceso de soberbia le lleva a chocar cada mañana con un poderoso detrás de otro, en una operación de carambola múltiple que recuerda al billar americano. Hoy es Jesús Polanco, el presidente de PRISA y CANAL PLUS, pero Antonio Asensio tampoco se libra si se le ocurre cambiar el pie, o Jordi Pujol o el ministro Serra o cualquier banquero (excepto Mario Conde, claro) o el primer magistrado que no quiera obedecer a piejuntillas en el caso GAL-CESID. La soberbia le ciega los ojos y los múltiples mandobles de Pedro José mantienen al establishment español aterrorizado.

Montado en la chepa de dos jueces estrella [Garzón y Liaño], del virrey de los espías [Perote] y del caco de los banqueros [Mario Conde], el Gran Director zahiere, humilla, encarcela y destroza a quien se le ponga por delante de su fulgurante carrera hacia el poder, más bien PPoder. Porque con el PP, el Gran Director llegó al sumun de su poder.

Y ese poder sí que lo pagamos nosotros. Apoyándose en el secretario de Comunicación, Miguel Ángel Rodríguez, el Gran Director ordena que se tomen todas las medidas oficiales, para acabar con el Grupo16. Calificándonos de ‘elementos desesperados, estrafalarios y marginales del mundo de la Prensa” (ver El Íncubo, sección fija de nuestra última página), el Gran Director ha ordenado a Rodríguez tres cosas: ni una quita para nuestra suspensión ni un crédito oficial para nuestro suspensión, ni un crédito oficial para nuestro reflotamiento, ni un aval de Ruiz Gallardón para lo mismo. Y el señor Rodríguez obedece como un niño. Y Gallardón también Por ahora, obedecen (lo bueno del caso es que cuando salgamos solos de nuestros problemas – y estamos saliendo como fieras – no nos fallará la memoria y recordaremos bien a nuestros amigos y a nuestros no amigos. Ya lo verán).

La televisión digital es el otro terreno donde el poder y la soberbia del Gran Director ha estallado en estos días. No contento con su enorme influencia sobre la televisión pública – vía Rodríguez, claro – nuestro Gran Hombre quiere participar en la televisión digital que pilotaba el secretario de Estado de Comunicación. Al fallar la operación ‘cerco a Polanco’ y saltar por los aires la TeleRodríguez digital, nuestro Gran Hombre dictó los 20 mandamientos al Gobierno del PP (ver EL MUNDO del 30 de diciembre de 1996).

Y el Gobierno los cumplió al pie de la letra, y hasta con creces. La última escaramuza ocurrió en el último Consejo de Ministros cuando el Gobierno trató de dinamitar el codificador de la plataforma. Asensio-Polanco-TV3. Parece que gana el Gran Director. ¿Cómo serán tan ciegos los Rodríguez?

El periodista y promotor inmobiliario Antonio Herrero lanzó ayer un ataque sin precedentes contra DIARIO16. El publicista de la COPE pidió que se niegue a este periódico el levantamiento de la suspensión de pagos que, de acuerdo con la legislación vigente, ha solicitado. Según Herrero, el diario debería ir ‘en buena lógica a la quiebra’ y pedir ‘responsabilidades a quienes lo han administrado’.

Con objetivo de cerrar DIARIO16, Herrero realizó un llamamiento a los acreedores del periódico para que se opongan a realizar las quitas que se proponen para proceder al levantamiento de la suspensión con una evidente mala intención, el empresario-locutor citó a todos los bancos, a la agencia EFE, a la Telefónica y al Estado para exigirles que cierren filas en contra de DIARIO16 y cotribuyan así a la muerte de la cabecera.

Con su tradicional manera de informar, Herrero también intentó intranquilizar a los trabajadores de esta empresa anunciando una próxima limpia, previa a la venta del periódico a un tercero, que no identificó.

Herrero acusó a DIARIO16 de denunciar a troche y moche a unos y a otros, de publicar ‘bazofia todos los días’ y de hacer ‘el trabajo sucio a PRISA’. El gran Insultador del Reino, conocido por calificar de ‘hez de mierda’ a profesionales de la talla de Iñaki Gabilondo, Concha García Campoy, Julia Otero o Carlos Llamas, se rasga las vestiduras por ‘lo que nos van a costar a todos los españoles las bromas e insultos de DIARIO16’.

En un momento de su iracunda y malintencionada alocución radiofónica, el amigo de Jesús Gil, cuyos apaños urbanísticos han sido rechazados por todos los partidos políticos de Marbella (incluído el PP), revela a las claras sus auténticas motivaciones. Asegura que Juan Tomás de Salas ‘anda por ahí investigando créditos ajenos’. Acabáramos: lo que ha puesto más allá de los nervios al constructor ha sido la denuncia de su pelotazo a costa de los ciudadanos de Marbella. Lo que le ha molestado es el ejercicio libre del periodismo y que se pongna en la picota las corruptelas de quienes predican transparencia para los demás y quieren opacidad para sí mismos.

Especial mención merece su amenaza intolerable contra el BCH y su presidente José María Amusátegui, le pide explicaciones públicas de por qué ha dado créditos a este periódico (debe ser nuevo en el mundo de la comunicación). Item más, el taimado desinformador se pregunta si van a perdonar a todos los que tienen créditos con el banco.

El bronquista Herrero encontró apoyo en sus secuaces – pagados, por supuesto – Pablo Sebastián, Manuel Martín Ferrand y Pedro José Ramírez. Aurorita profesa un odio visceral a todo lo que huela a socialismo (perdón, a felipismo) y, como cree, con supina ignorancia o mala fe, que este periódico se hace en Ferraz y Gobelas, arremete a muerte contra DIARIO16. Die que sirve de arma arrojadiza contra otros profesionales y que no defiende la verdad (¿sólo hay una verdad, la suya?)

Ferrand, gran aficionado a los 4×4 dice que ‘la responsabilidad última en DIARIO16 es de los bancos y principalmente del BCH”. De nuevo la coacción y la amenaza contra Amusátegui. Cabe señalar que esos dos publicistas nunca criticaron la situación empresarial del periódico ni al BCH cuando consideraban que la línea de DIARIO16 estaba más de acuerdo con sus intereses.

Y, por último, el más cínico del ‘Sindicato del Crimen’, Pedro José. Con su habitual hipocresía dijo que le resultaba ‘muy doloroso’ hablar del periódico que había dirigido (pues que no hable, es muy fácil). Para después pedir que ‘todos sean tratados por igual y que ‘si los bancos perdonan, que perdonen a todos’: No sabíamos que EL MUNDO hubiera presentado suspensión de pagos, algo que no pasará mientras Conde siga siendo multimillonario.

En resumen, se trata de un ataque sin precedentes en el periodismo español. Por primera vez, un grupo de periodistas comandados en esta ocasión por un colérico Antonio Herrero pillado con las manos en la masa en Marbella, exige el cierre de un diario de la competencia, invocando la libertad de mercado. Ellos saben perfectamente que las condiciones del levantamiento de la suspensión de pagos que solicita DIARIO16 son completamente razonables. Conocen casos anteriores en las quitas no se han hecho al 80 por 100, sino casi al 100 por 100. Son plenamente conscientes de que un medio de comunicación no es una fábrica de tornillos y que el cierre de un diario es un drama para todos los que aman la libertad. Y, porque saben todo esto, quieren condenarnos al silencio.

Hay, además, una razón de peso para el levantamiento de la suspensión de pagos. Si el periódico cerrara, los acreedores lo perderían todo y al Estado le costaría más. Como va a salir adelante, cobrarán el 20 por 100.

El mismo día que se conifrmó que Miguel Ángel Rodríguez mintió y que amenazó a Asensio, la COPE (¿Qué tienen que decir a todo esto los obipos?, ¿están de acuerdo con que 300 profesionales se vayan al paro?) lanzó otro brutal atque contra la libertad de expresión. A Polanco y Cebrián los han llevado a los tribunales, a Asensio le han aplicado la técnica de Al Capone, a DIARIO16 lo que quieren cerrar. Casualmente, DIARIO16 y EL PAÍS fueron los diarios emblemáticos de la transición y los que defendieron a capa y espada la Constitución el nefasto 23-F. Sin embargo, el Gobierno todavía está a tiempo de reconducir la situación. Para ello, debe desembarazarse de los elementos indeseables de quienes amenazan y de aquellos que quieren mandar en este país sin haber pasado por las urnas. Esa sí que sería la segunda transición que prometió Aznar.

Para finalizar esta perla de Herrero: ‘Siguen teniendo teléfono ¿por qué?’ También quiere que nos lo corten.

Cuando hace ocho meses cogí de nuevo las riendas del Grupo16esta casa estaba a punto de cerrarse. Tres años de ineficacia y estupideces nos habían conducido al final. La huelga indefinida era inminente ante el impago completo de salarios.

Me rebelé contra este inicuo final y el personal de esta casa en Asamblea aceptó mi plan para intentar salvar entre todos este mítico Grupo16 que tanto ha hecho por nuestra convivencia en libertad. Con ayuda de créditos blandos de la Comunidad de Madrid el plan era perfectamente viable. Y la Comunidad los prometió, la Asamblea de Madrid los votó por unanimidad, y hasta la Secretaría de Estado de Comunicación nos prometió modestos créditos del ICO y estudiar quitas fuertes de nuestras deudas. Todo palabras.

La sombra de Pedro Jota Ramírez planeaba como un cuervo amenazador sobre todas estas negociaciones. EL Gobierno del PP no ocultaba en sus conversaciones conmigo su miedo a que EL MUNDO bloqueara todos sus planes de ayuda. Y Pedro Jota lo logró.

En un ataque sin precedentes contra Alberto Ruiz Gallardón, desde las páginas de EL MUNDOy las ondas episcopales de la COPE, Pedro Jota logró lo que quería: que el presidente de Madrid recibiera instrucciones tajantes de la cúpula de su partido par anegarnos el aval votado por la asamblea. (Un consejero de Ruiz Gallardón me lo explicó con nombres y señales el 15 de enero).

Al mismo tiempo logró lo inaudito. Ni el presidente Aznar accedió a recibirme, ni contestarme, cuando pedí una entrevista de cortesía al asumir la dirección de DIARIO16, ni el secretario de Estado de Comunicación se dignaba a contestar a mis innumerables llamadas para tratar del reflotamiento del Grupo16. La comunicación con el Gobierno quedó rota, las ayudas ofrecidas se evaporaron, y tuvimos que andar así los de esta Casa más solos que la una para tratar de salvarnos.

Y lo logramos. Con sacrificios enormes, el personal firmó un expediente de regulación de empleo que redujo nuestros gastos de manera drástica. Y cortamos también todo tipo de otros gastos para equilibrar estas cuentas sin ayuda alguna.

Pagar la nómina era un milagro mensual, y no siempre lo lográbamos. Pero el personal aguantaba sacrificio tras sacrificio porque creía que al final esta Casa nuestra saldría adelante. Y así ocurrió muy pronto con las revistas: CAMBIO16 y ‘Motor16’ se equilibraron prácticamente a principios de año.

Pero en DIARIO16 aún nos quedan meses de dureza y dificultad por delante. Teóricamente deberíamos haber entrado en equilibrio en el primer trimestre, pero la caída de la publicidad nos afectó. (Con la publicidad del año pasado, ya estaríamos prácticamente sin pérdidas). Seguimos esforzándonos todos. Unidos como una piña. Sin ninguna ayuda. Solos como los herejes.

Y en eso llega el momento de levantar la suspensión de pagos. La gran asignatura pendiente. La condición sine qua non para recuperar la normalidad empresarial perdida hace tres o cuatro años.

Las pérdidas serias de DIARIO16 empezaron cuando, con la ayuda inestimable de Mario Conde, salió de nuestras entrañas un competidor, EL MUNDO, de Pedro Jota que empezó a pelear contra nosotros con nuestras propias armas – se llevó decenas de nuestros mejores hombres – en nuestro terreno – se llevó casi íntegro el departamento de publicidad – y con ingentes cantidades de dinero ajeno y condial. Tuvimos que incrementar nuestros gastos para plantarle cara, empezaron las pérdidas, pero paramos a EL MUNDO durante dos años. Vendiendo doscientas mil ejemplares diarios capeamos el temporal.

La crisis publicitaria de los años 92 y 93 agravó nuestras pérdidas y llegó un momento en que tuve que retirarme y vender mis acciones y mi obra por una peseta – con unas humillaciones gratuitas que ya contaré algún día – a cambio de que un equipo nuevo, mejor relacionado con la banca, garantizase el futuro del Grupo16 y de sus trabajadores.

Desgraciadamente no fue así. De ineficacia en estupidez, los años de mi ausencia no sólo no sirvieron para acabar con nuestras pérdidas sino que nos condujeron a la crisis total. Las ventas se desplomaron y el pasivo creció de forma logarítmica. Los supuestos salvadores del Grupo16 a punto estuvieron de enterrarlo.

En septiembre pasado cogí de nuevo la antorcha medio apagada y, con la ayuda de nuestra gente entusiasta, salieron del hoyo las revistas y DIARIO16 empezó a flotar hacia arriba. Sin ayuda de ningún tipo, enfocamos el levantamiento de la suspensión de pagos con una esperanza recreida.

Aquí estamos, a dos días de la hora de la verdad. El Gobierno simplemente no se pone al teléfono. Pero hasta ayer teníamos garantizadas las quitas de la banca y otros grandes acreedores privados. Y ayer atacó la COPE con todo el ‘Sindicato del Crímen’ a la cabeza. Querían quebrarnos. Si los grandes chantajistas de la escena nacional aterrorizan a nuestros acreedores, esta Casa tendrá que cerrar.

Y ocurrirá lo siguiente. Nuestros acreedores no cobrarán nada, ni siquiera el 20 por ciento de su deuda que le ofrecemos. Es poco, pero no podemos pagar más. Y el Estado no sólo no recuperará el 20 por ciento que ofrecemos, no sólo perderá el cien por cien, sino que tendrá que sufragar el paro de las tescientas personas del Grupo16 qu queden en la calle. Pésimo negocio para los españoles. Además de la angustia y humillación de centenares de familias.

El Banesto nos costó a los españoles centenares de miles de millones. Pero se salvó. Fesa-ENfersa y otras mil empresas fueron ayudadas a salir de su crisis. ¿Por qué nosotros no? ¿Por qué lo ordena Pedro Jota y la COPE y un Gobierno pusilánime se deja gobernar por el ‘Sindicato del Crimen’?

Primero atacaron a Asensio y a Polanco, ahora quieren acabar con nosotros. ¿Cuándo terminará esta pesadilla? Ningún país sano puede construirse sobre los cadáveres apilados de los símbolos de su libertad.

Necesitamos su ayuda, querido lector, para seguir vivos, seguir criticando los abusos del poder, seguir festejando a nuestros héroes civiles y seguir construyendo un país. Ayúdenos, si puede y lo cree conveniente. Cuando pudimos, nosotros le ayudaos también a usted. Para que no gane el sectarismo y la violencia, échenos una mano, lector amigo.

Juan Tomás de Salas.

Durante años, la única prensa democrática que se hacía en España se imprimía a multicopista. En ella hizo su aprendizaje Juan Tomás de Salas antes de exiliarse en Colombia, de donde volvió con un proyecto de revista que vería la luz a comienzos de los setenta y que fue desde entonces una referencia común para todos los sectores democráticos españoles. El guarismo 16 que identificó a aquel semanario – CAMBIO16– se convirtió en un símbolo generacional más que político, y se transmitió a las demás publicaciones del grupo, incluyendo el diario que ahora lucha por sobrevivir.Algunos han querido acelerar su agonía, según denunciaba hace dos días su fundador, que ha retomado la dirección hace ocho meses. Según su denuncía, el Gobierno ha sido más receptivo a las presiones de otros medios interesados en eliminar un competidor que a otras consideraciones, con el resultado de bloquear ayudas comprometidas y poner a D-16 al borde del cierre. Es cierto que la empresa soporta, unas deudas muy elevadas, pero también que son nimias en comparación con los 400.000 millones que adeudará a final de este año RTVE, convertida en estandarte del sectarismo más desnudo. Una novedad absoluta es que algunos periodistas consortes del Gobierno, desde la emisora de los obispos, encabecen la manifestación destinada a adelantar el entierro (y dejar sin empleo a 300 trabajadores): eso no había ocurrido nunca. Pero son muchas las cosas nunca vistas que se están viendo últimamente. Ojalá que entre ellas no figure la desaparición de DIARIO16.