27 abril 1978
Aperturista en la dictadura franquista, ahora, no obstante, es contrario a la línea de UCD y del presidente del Gobierno, Adolfo Suárez
El exministro franquista Barrera de Irimo entra en el Consejo de Administración del periódico YA y como ‘hombre fuerte’ de la empresa

Hechos
El 27 de abril de 1978 se produjeron incorporaciones al Consejo de Administración de la Editorial Católica S. A.
Lecturas
El 27 de abril de 1978 el Consejo de Administración de EDICA [Editorial Católica], empresa propietaria de los periódicos Ya, La Verdad en Murcia, Hoy en Extremadura y Ideal en Granada, así como de la agencia Logos ratifica como miembro de su Consejo a D. Antonio Barrera de Irimo junto D. Santiago Foncillas Casaus, D. Antonio Lago Carballo, D. José Antonio Muñoz Rojas y D. Felipe Ruiz de Velasco Castro. Mientras D. Máximo Cuervo Radigales y D. Luis Sáez de Ibarra serán consejeros de honor.
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INCORPORACIONES AL CONSEJO DE ADMINISTRACIÓN DE LA EDITORIAL CATÓLICA (EDICA):
D. Antonio Barrera de Irimo
D. Santiago Foncillas Casaús
D. D. Antonio Lago Carballo
D. José ANtonio Muñoz Rojas.
D. Felipe Ruiz de Velasco.
D. Máximo Cuervo Radicales (Consejero de honor).
D. Luis Sáez de Ibarra (Consejero de honor).
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El siguiente cambio en la presidencia de EDICA será el cambio de D. Juan Herrera por el Conde de Bugallal coincidiendo con las elecciones de 1979.
El Análisis
En marzo de 1977 el exministro franquista Barrera de Irimo fue postulado para la presidencia de la Editorial Católica respaldado por los sectores conservadores del periódico pero entonces su aspiración fue derrotada por la del ‘suarista’ Luis Coronel de Palma que tenía el respaldo de todas las Cajas de Ahorro. De momento el YA seguía siendo un periódico al servicio de la UCD, aunque no hacía más que perder lectores. EL PAÍS acaparaba los lectores demócrata, y desde que el ABC había dado un giro a la moderación estaba recuperando un buen tajo de los lectores que en el periodo 1974-1977 estaban en el YA.
Barrera de Irimo tenía una misión, reconducir la línea del YA, aunque no tendría suficiente fuerza para hacerlo hasta después de las elecciones generales de 1979, comicios en los que el YA volvió a pedir el voto para la UCD.
J. F. Lamata