10 septiembre 2010

Defenderá un independentismo más radical aún que el de ERC defendiendo la secesión inmediata y compitiendo, por tanto, con el partido Reagrupament de Joan Carretero

El ex presidente del Barça, Joan Laporta, será candidato a la presidencia de Catalunya por ‘Solidaritat per la Independencia’

Hechos

El 10.09.2010 quedó inscrito en el registro de partidos políticos la formación Solidaritat per la Independencia

Lecturas

UN MILITANTE DE LAPORTA FORZADO A APARTARSE POR PEDIR EL ASESINATO DE ALBERT RIVERA

El comienzo como partido de ‘Solidaritat per Catalunya’ se vio empañado al descubrirse que uno de sus militantes, Rubén Novoa, había pedido en la red social Facebook un ‘tiro en la nuca’ contra Albert Rivera, líder de Ciutadans de ideológica antagónica a la de ‘Solidaritat’. El Sr. Novoa, que había tenido que abandonar Convergencia por un escándalo similar, se vería obligado a renunciar a su puesto en las listas de Solidaritat.

04 Agosto 2010

La independencia era la 'chati'

Salvador Sostres

Leer

Cuando Artur Mas dijo que Cataluña aún no estaba madura para afrontar en serio el debate sobre la independencia, los esencialistas y los tarados enseguida le llamaron traidor y Dios sabe qué otras atrocidades. Pero lo cierto es que desde que en 2003 Convergència i Unió perdió el poder -que no las elecciones- la vida política catalana ha conocido sus momentos más bajos, mezquinos y rastreros, y sobre todo el movimiento independentista -y lo digo yo, que soy independentista- se ha parecido mucho más a una coz cabría que a ninguna articulación estratégica fruto de una inteligencia razonadora.

Estos últimos días estamos asistiendo al penoso espectáculo de ver cómo personas que de hecho piensan lo mismo y tienen el mismo y único objetivo de la independencia, son incapaces de entenderse para presentarse bajo una sola candidatura a las elecciones del próximo otoño. Joan Laporta, expresidente del Fútbol Club Barcelona, ha sido incapaz de hacer entrar en razón al alocado médico y exalcalde de Puigcerdà, Joan Carretero, que ya venía de organizarle una sonora escisión a ERC después de que Maragall le echara de consejero del primer tripartito.

Eso por no hablar de otros grupúsculos a cual más extravagante: des de las llamadas CUP, que si no son comunistas poco les falta, hasta personajes tan extravagantes como Santiago Espot, de pensamiento grotesco e incomprensible. Da la impresión que más allá de las razones que existan o no para reclamar la independencia de Cataluña, y más allá, también, de la viabilidad de este proyecto, los que se han arremolinado alrededor de él para representarlo políticamente, buscan más una salida personal que ponerse al servicio de una causa.

Así, Joan Laporta es ex presidente del Barça y con mucho tiempo libre; igualmente, el doctor Carretero, desde que Maragall le echó, tiene también poco que hacer. Los dos escuderos de Laporta, Alfons López Tena y Uriel Bertran, son dos descatalogados, respectivamente, de Convergència y de Esquerra. Artur Mas tiene toda la razón del mundo cuando dice que el independentismo en Cataluña aún no está maduro. El deprimente espectáculo de estos días no ha hecho más que confirmarlo.

Por más ridículo, la tan reclamada regeneración democrática que promulgaban todos estos movimientos, criticando el inmovilismo de los partidos políticos convencionales por la confección de sus listas electorales, ha quedado como una broma o un cinismo cuando se ha sabido que, por ejemplo, si Carretero y Laporta no se han unido bajo una misma candidatura es porque el primero quería imponer a sus candidatos en la lista y, sobre todo, a su pareja. Ma belle. Si la independencia era la chati, haberlo dicho. Más que un Estatut, habríamos alquilado un motel.