31 enero 1981

"Si UCD no proveyera a la persona necesaria para los cambios sustanciales necesarios, habría que buscarlos fuera"

El periodista Emilio Romero propone al General Armada como sucesor de Adolfo Suárez en la Presidencia del Gobierno

Hechos

  • El 31.01.1981 el periodista D. Emilio Romero publicó en ABC un artículo – ‘Las Tertulias de Madrid’ – sugiriendo al General Alfonso Armada como sucesor de D. Adolfo Suárez en la Presidencia del Gobierno.

Lecturas

Fue el que fuera director de PUEBLO, de INFORMACIONES, EL IMPARCIAL y LA JAULA, D. Emilio Romero, el que, usando las páginas de ABC, donde era columnista desde mayo de 1980 – llevó a las linotipias lo que ha sido llamado en la historia como ‘La Solución Armada’.

D. Emilio Romero habla sobre el 23-F:

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31 Enero 1981

LAS TERTULIAS DE MADRID

Emilio Romero

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Están pasando cosas que obligan a una remodelación sustancial. Si para hacer esto UCD no proveyera, entonces existiría la vía de ‘un hombre ajeno y políticamente bendecido’. Estimulé entonces la imaginación y encontré al General Alfonso Armada. Un golpe de timón es un golpe de timón.

Madrid era anteanoche un hervidero de tertulia. Casualmente me encontré en dos: en la primera tuvo lugar el nacimiento de la noticia de la dimisión de Adolfo Suárez y algún día la contaré por ilustre, por excitante y por galdosiana. En la otra, tenía el carácter exuberante de un despliegue de las hipótesis. Todavía en España la democracia es un sistema provisional y la dictadura una contingencia histórica. Aquí no se estabiliza otra cosa que las cordilleras. El ambiente era de ‘acontecimiento nacional’ y esto habría que incribirlo más cerca de la psicopatía que del raciocinio. Ni el suceso, ni el personaje que lo protagonizaba merecían la ansiedad, ni la mastrubación mental. De Gaulle, Churchill, Adenauer – tres personajes históricamente universales – no produjeron en sus países con su marcha, conmoción sino noticia de interés a toda plana y episodio interesante de normalidad democrática. Los dos grandes temas eran ‘los estímulos de la dimisión’, la veradera revelación histórica de las causas de la marcha – que es un ovilllo y no un hilo- y las profecías sobre el sucesor. Para lo primero se precisa una mentalidad analítica a lo Pedro Ríus en el legajo del asesinato de Prim. Para lo segundo, la exigencia es menor; basta un retrato-robot de las condiciones necesarias. Dentro de lo que hay en los cuadros de UCD salieron siempre Leopoldo Calvo-Sotelo y Landelino Lavilla. Y por todas estas cosas: por una exigencia de integración; Suárez había separado. El sucesor tenía que reunirse o juntar. Tendría que estar familiarizado con la economía, que es la exigencia principal en todos los presidentes actuales de Europa. Y hasta sería también un mérito conocer Europa en us entresijos económicos. Tendría también que tener algunas condiciones parlamentarias de conocimiento de cosas y de repentización. No debía alarmar al a izquierda, a los mlitares, a la Conferencia Episcopal. Y, por supuesto, tendría que ser un hombre de clara confianza para la Corona, en primer lugar porque el Rey es el protagonista principal de la restauración democrática – la Monarquía de todos- y después porque la relación obligada entre el presidente del Gobierno y el jefe del Estado no autoriza sombras o recelos. De todas maneras, la primera acción de posibilidades que ha de tener el sucesor de Suárez es la aceptación de identificación de su partido, representado ahora principalmente en sus parlamentarios. El partido y el Congreso de Mallorca son todavía una nube.

Después de esta presunta normalidad de procedimientos, se manejaba otro factor que no debo silenciar, y es que se decía que aquí están pasando cosas que obligan a una remodelación sustancial. Si para hacer esto UCD no proveyera, entonces existiría la vía de ‘un hombre ajeno y políticamente bendecido’. Ahora o pasado mañana. Un tranquilizador neutral y en aquel objetivo. Eché entonces un vistazo a los profesores y al os militares y de profesores me rendí. Los había, pero en la endoesfera. Estimulé entonces la imaginación y encontré al General Alfonso Armada. Todo esto no quiere decir otra cosa que las tertulias de Madrid eran prisioneras del ‘clima esotérico de las hipótesis’ que decía Rusell. Pero hay una realidad que me consta, y es que lo que pasa es tan importante o tan grave, que no es aceptable ningún continuinismo. Un golpe de timón, en la versión Tarradellas, es un golpe de timón. No le demos vueltas.

Emilio Romero

El Análisis

¿GALLO GOLPISTA?

JF Lamata

De todos los artículos que se escribieron tras la dimisión de D. Adolfo Suárez, ninguno fue tan comentado como el de D. Emilio Romero (archienemigo del Sr. Suárez) en el diario ABC. Porque en él proponía como nuevo Presidente al General Alfonso Armada. Tan sólo un mes después se produciría el intento de Golpe de Estado del 23-F en el que el citado general aparecería implicado. No era el único dato que vinculaba al Sr. Romero con el 23-F, también se conocía la amistad del Sr. Romero con D. Juan García Carrés, que también sería procesado por su vinculación con el 23-F. Años después se haría pública una conversación telefónica la misma tarde del 23-F entre D. Emilio Romero y D. Juan García Carrés. Aunque el hecho de que hubiera un contacto telefónico entre ellos evidenciaba que se conocían, lo cierto es que el tono del Sr. Romero en la conversación, deja claro que él no estaba en el ajo del golpe.

J. F. Lamata

Llama interceptada durante el 23-F del Sr. García Carrés (implicado en el 23-F) con D. Emilio Romero

Emilio Romero y García Carrés durante el 23-F_mp3